Otro enigma en torno a Julián Iñíguez de Medrano: las dos Orcavellas

Otro enigma en torno a Julián Iñíguez de
Medrano: las dos Orcavellas
Andrés Gallego Barnes
LESO. Toulouse
Ante el estudioso que se enfrasca en la vida y la obra de Julián Iñíguez de Medrano,
surgen no pocas incógnitas. Desde la imprecisión de datos biográficos acerca del que se
dice caballero navarro 1 , hasta los problemas de autoría o de datación planteados tanto por
1 Muy pocas cosas sabemos de Julián Ifiíguez de Medrano. Los datos biográficos que existen a su
respecto son de lo más lacónicos. En realidad, las pocas informaciones que tenemos acerca del personaje
están sacadas, en su mayoría, de las precisiones contenidas en la portada de su Silva curiosa y en las
diferentes piezas liminares contenidas en dicha obra. Nicolás Antonio en su Bibliotheca Hispana Nova se
contenta con escribir: «Julianus de Medrano, Navarras, edidit: Silva curiosa para Damas y cavalleros, a
Caesare Oudin recognitam et in meliorem formam redactam» (Parisiis, ex officina Marci Orry, 1608, in 8 o ).
M. Menéndez y Pelayo, por su parte, dedicó algunas líneas a nuestro autor en sus Orígenes de la novela,
ed. Enrique Sánchez Reyes, Madrid, C.S.I.C, 1961, pp. 121-123. La Enciclopedia Universal Ilustrada de
Espasa-Calpe, Madrid, 1966, vol. 34, p. 172 puntualiza: «Medrano (Julián) Biog. Escritor español, nacido
en Navarra en 1540. Se ignora la fecha de su fallecimiento y demás circunstancias de su vida. Es conocido
por una especie de antología titulada La Silva Curiosa, en que se tratan diversas cosas sotilísimas y curiosas
y en la cual se contienen poesías de diversos autores, proverbios, anécdotas, muchas de ellas extractadas
de Timoneda, y El Curioso Impertinente de Cervantes. (París 1583)[s!c]». Alfred Morel-Fatio en su
Ambrosio de Salazar et l'étude de l'espagnol en France sous Louis XIII, Paris-Toulouse, Picard-Privat, 1900,
señala por su parte la edición de la 5¡7va de 1583 en París, sin aportar datos nuevos sobre la vida del autor.
De las precisiones contenidas en las piezas liminares de la Silva curiosa y en las indicaciones contenidas en
la obra, podemos deducir que este caballero navarro antes de llegar a ser familiar de la reina Margarita de
Navarra, o más bien de Valois, había dedicado muchos años a viajar por el mundo: España, Italia, Sicilia,
Francia, Flandes, Portugal, las Indias y África. De su familia, a partir de lo que pretende ver Julio en un
espejo mágico que le proporciona un nigromante, sabemos que su padre sufrió la amputación de una pierna
(p. 376), que su primo Pedro Iñíguez era muy aficionado a la caza con galgos, que un hermano suyo se
llamaba Pedro y gustaba de la conversación con las damas, que sus dos hermanas se dedicaban a labores
de red o resul (p. 377) y por fin que su enamorada, una tal Marfisa, D. A., gustaba de la lectura de la Diana
de Montemayor. Detalles sin transcendencia, como puede verse, y que merecen además ser puestos en tela
Studia Áurea. Actas del III Congreso de la AISO, III, Toulouse-Pamplona, 1996
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la publicación de una miscelánea 2 como por un tratado sobre los animales 3 , desde la
publicación del varias veces anunciado y nunca encontrado Vergel curioso 4 , hasta la
atribución a Medrano de una novela añadida a su Silva —nada menos que el Curioso
Impertinente— punto de partida de una polémica que surgió a fines del siglo XVIII 5 .
Quisiera por mi parte cuando no resolver, por lo menos proponer otro interrogante
planteado por el descubrimiento de lo que se presenta como una traducción al francés de
un manuscrito hallado por un tal De Castera en la Abadía de Chátillon 6 .
En efecto, la Biblioteca Nacional de París posee una obrita en 8° cuyo título exacto
es el siguiente: RELATION / DE LA / DECOUVERTE / DU TOMBEAU / DE /
L'ENCHANTERESSE / ORCAVELLE / AVEC / L'HISTOIRE TRAGIQUE DE SES
AMOURS. / Traduite de l'Espagnol de Jule Iniguez / de Médrane. / A PARÍS, rué de la
Harpe, / Chez la Veuve d'HOURY, vis-á-vis la rué / S. Severin, au St Esprit. /
MDCCXXIX / Avec Approbation & Permission». Sign. A-G, in 8 o . 7 p.n.n. + 88 pp. 7
de juicio, ya que es difícil a menudo distinguir lo que atañe a la autobiografía y lo que remite a la ficción
literaria.
2 Hasta fines del siglo XVIII se desconoció la edición que se ha de considerar como la princeps, la
de París, en casa de Nicolás Chezneau (y no la edición, a todas luces pirata, de Zaragoza, en casa de loan
Escartilla, 1580). Véase a este propósito mi ponencia en el Coloquio Internacional celebrado en Toulouse,
en febrero de 1993: «Le voyage á Saint-Jacques de Compostelle d'un courtisan de Marguerite de Navarre,
Julián Iñíguez de Medrano», en prensa.
3 No se sabe por qué la obra del Protonotario Luys Pérez, clérigo, vezino de Portillo, El can y el
cavallo y de sus calidades: dos animales de gran instincto y sentido, fldelíssimos amigos de los hombres (en
Valladolid, Impresso por Adrián Ghemart, 1568), se publicó, atribuida a Julián de Medrano, bajo el nuevo
título: Historia del can, del caballo, oso, lobo, ciervo y del elefante (París, 1583), cuando en realidad sólo se
trata en ella del can y del caballo. Véase sobre el tema el trabajo de Francisco de Uhagón y de Enrique de
Leguina, Estudios bibliográficos. La Caza. Datos reunidos por..., facsímil de la edición de Madrid, 1888, p.
39. 4 En su Si/va curiosa, repetidas veces alude Medrano a un Vergel curioso que va a publicar y cuyo
contenido va puntualizando a lo largo de la miscelánea. En él piensa incluir enigmas (p. 54), epitafios (pp.
117 y 268-269), anécdotas (p. 297), divisas y emblemas (p. 389), y poemas, así como el relato
pormenorizado de sus viajes (pp. 401-402) y más particularmente el de su romería a Santiago de
Compostela (p. 389).
5 Véase a este respecto Sempere y Guariños, Ensayo de una biblioteca española de los mejores
escritores del reynado de Carlos III, t. V, p. 101. Véase también José María Sbarbi, Refranero general
español, t. X, p. VI, y Morel-Fatio, Ambrosio de Solazar, pp. 115-116.
6 Relation: «Celui-ci n'a jamáis été imprimé; j'en ai trouvé le manuscrit de la main de Médrane méme
dans l'illustre Abbaye de Chátillon, oü dans les intervales de loisir que me laissoient des études plus
sérieuses, je me suis amusé á l'habiller á la francoise». Hay en Francia numerosas ciudades que llevan el
nombre de Chátillon. Sólo en Chátillon-sur-Sévres (Mauléon) se señala la presencia de una abadía, que fue
primero de los Augustinos y luego de la orden de Santa Genoveva. Hoy en día no queda ningún rastro del
fondo de manuscritos, con excepción de un Cartulario. Datos proporcionados amablemente por M.
Guillebaud. Véase L. H. Cottineau, Répertoire topo-bibliographique des Abbayes et Prieurés, Macón,
Protat, 1939,2 vols.
7 La obra está registrada con la signatura Y 2 11.016.
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El autor de esta traducción, un tal De Castera 8 , después de dedicarla «A son Altesse
Monseigneur de Bouillon de la Tour d'Auvergne» 9 señala a continuación los motivos
que justifican su labor de traductor:
Ce n'est point la démangeaison de passer pour autor qui m'oblige á mettre ce petit ouvrage
au jour; je n'ai fait que le traduire fidélement de l'Espagnol de Me Iniguez de Médrane. Si
l'on y trouve quelques traits dignes d'attention, c'est á lui seul que la gloire en est düe. II
florissoit du temps de la Reine Marguerite de Navarre; et cette Princesse qui scavoit
estimer les gens d'esprit, crut beaucoup gagner en le fixant dans sa Cour, dont il a fait
pendant plusieurs années l'ornement & les délices.
Proporciona por otra parte datos interesantes, aunque difíciles de comprobar, a
propósito de las obras de Medrano:
On a de lui deux livres, sous le titre de Verger fertile & de Fóret curieuse, qui ont eu l'un &
l'autre diverses éditions, suivies d'un applaudissement general tant en France qu'en
Espagne.
Con lo cual parece confirmarse que Medrano llevó a cabo su proyecto de redactar su
Vergel curioso al cual, tal vez, diera el título de Vergel fértil, si por lo menos la
traducción de De Castera es fiel.
Más interesante para el tema que nos interesa hoy es la precisión siguiente:
Celui-ci n'a jamáis été imprimé; j'en ai trouvé le manuscrit de la main de Médrane méme
dans l'illustre Abbaye de Chátillon, oü dans les intervales de loisir que me laissoient des
études plus sérieuses, je me suis amusé á l'habiller á la Francoise.
Se basaba pues De Castera nada menos que en un manuscrito autógrafo y no
tenemos por qué poner en tela de juicio su afirmación. No pienso, en efecto, que se trate
del socorrido recurso al hallazgo de un texto desconocido para dar más verosimilitud o
auctoritas a la nueva composición. Cuanto más que las puntualizaciones del traductor no
dejan lugar a dudas en cuanto a su sinceridad, ya que insiste en su labor de traductor,
señalando incluso sus dudas en cuanto a la veracidad de lo que relata Medrano, después de
haber comparado esta nueva historia de Orcavella con la que ya figuraba en la Silva
curiosa:
8 En realidad, su nombre exacto es Louis Adrien Du Perron De Castera. Nació en París en 1707, se
tonsuró sin llegar a las órdenes mayores, y tomó el título de «Abbé». Empezó a escribir novelas a partir de
1727. Se le conoce como autor de: Les avantures de Leónidas et de Sophronie, histoire sérieuse et galante;
La pierre philosophale des dames ou les capuces de l'amour et du destín; Dialogues entre la Renommée et
l'Envie; Entretiens littéraires et galans, avec les avantures de don Palmerin de Thamire. Murió de disentería
el 25 de agosto de 1752. Véase Román d'Amat, Dictionnaire de biographie francaise, París, Letouzey, 1970,
t. XII, pp. 341-342. Algunas de estas obras están conservadas en la Biblioteca Nacional de París.
9 Relation: «A son Altesse Monseigneur de Bouillon de la Tour d'Auvergne, Grand chambellan de
France, Gouverneur & Lieutenant General du Haut & Bas Pays & Province d'Auvergne, Mestre de Camp
du Régiment de Turenne».
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Quoique Médrane donne cet ouvrage pour une vérité constante, & qu'il assure que dans la
Colchide qu'on nomme á présent la Mingrelie, il a effectivement découvert le Tombeau de
la Magicienne Orcavelle, je n'ai pas un assez grand fonds de crédulité pour y ajouter foi;
d'autant plus que dans sa Forét curieuse, l'Auteur parle d'Orcavelle d'une fac.on bien
différente de ce qu'il en dit ici.
Las últimas puntualizaciones de De Castera, su juicio literario de la obra, no parecen
ser las de un literato que añade ficción a la ficción, sino de un traductor, amigo de letras,
que ha gustado de un relato que, según él, merece ser conocido:
Je pense done que tout ceci n'est qu'une revene ingénieuse d'un sc,avant homme qui a voulu
s'agayer. Mon sentiment ne rabaisse point en cela le mérite de l'Ouvrage. D'habitude les
gens ont dit que l'Odyssée étoit un fruit de la vieillesse, mais de la vieillesse d'Homére. On
pourroit diré que ce petit Livre est une réverie, mais une réverie de Médrane; il n'appartient
qu'á peu de monde de rever si agréablement 10 .
Sin embargo, el examen de la Relation no puede considerarse como una traducción
directa del manuscrito de Medrano. En efecto nos encontramos con un texto en el que De
Castera se hace el narrador de los acontecimientos sucedidos a Medrano, el cual aparece
así en tercera persona:
Jule Iniguez de Médrane, genthilhomme navarrois, illustre par son sc.avoir & célebre par
ses voyages dans presque tout l'univers, raconte que s'étant un jour assis prés du mont
Caucase, sur une colline revétue de verdure, il sentit que l'herbe qui étoit sous son dos
s'enfongoit. II l'écarta & vit qu'elle couvroit un trou de la largeur du corps d'un homme. A
ce trou aboutissoit un escalier taillé dans le roe. Médrane, naturellement curieux,
s'imagina que c'étoit lá un souterrain qui renfermoit peut-étre quelque rareté ou quelque
trésor, & il résolut d'y descendre. Pour cet effet il alia chercher une lanterne, & suivi d'un
fidéle serviteur, il revint bientót aprés á l'endroit qu'il avoit exactement remarqué 11 .
Este tipo de redacción se prosigue hasta la relación del descubrimiento por Medrano
de un manuscrito en griego. Este manuscrito que según De Castera pretende haber
encontrado Medrano en un sepulcro, contiene una confesión, en primera persona pues, de
una bruja Orcavella, quien después de evocar rápidamente su vida de sacamantecas,
ogresa y vampiro, refiere la triste historia de sus amores.
A partir de ahí podría tratarse de una traducción fiel del texto de Medrano, cuando lo
que antecede corresponde a todas luces a una relación atribuible a De Castera, que se
inspira ya del manuscrito hallado en la Abadía de Chátillon ya de elementos sacados de
la segunda parte de la Silva curiosa.
En efecto si cotejamos este relato introductor con los datos contenidos en la
miscelánea, comprobamos que coincide con elementos contenidos en las piezas
10 Relation, Préface.
11 Relation, pp. 2-3.
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liminares de la Silva y en el relato del viaje a Santiago: por ejemplo la fama de gran
viajero de que gozaba Medrano 12 :
Me Iniguez de Médrane, Gentilhomme Navarrois, illustre par son scavoir & célebre par
ses voyages dans presque tout l'Univers... 13 .
su curiosidad natural y su afición a lo secreto y lo raro 14 :
[...] Médrane, naturellement curieux [...] Médrane doutoit s'il devoit pousser plus loin sa
curiosité... 15 .
También aparecen en la continuación de este relato introductor la referencia a los
pájaros nocturnos que ya encontrara Medrano, en su viaje a Santiago de Compostela, al
penetrar en el antro de un nigromante, fámulo de un santo ermitaño:
A peine la lumiére qu'il portoit eut-elle dissipé les profondes ténebres qui régnoient dans
cette cáveme qu'une prodigieuse quantité de chauves-souris, de hiboux & d'autres oiseaux
nocturnes, épouvantéz par sa présence pensa le renverser en volant tumultueusement
autour de lui... 16 .
En cuanto al descubrimiento de unos dibujos en las columnas que sostienen la sala
espaciosa que va descubriendo Medrano, nos remite directamente a la afición del
caballero navarro por las inscripciones que va coleccionando con fruición en la Silva
curiosa u .
También pudo inspirarse el Abate francés del retrato de la Orcavella gallega para
evocar la del Cáucaso:
12
En las piezas laudatorias que le dedican sus amigos, se alude insistentemente a su afición a los
viajes. Básteme citar aquí como botón de muestra la composición de Jean Dorat, poeta real: «In Iulii
Medranae Syluam curiosam. / Quod gentes varías, varías vidisset & urbes, / Magna viri quondam laus
Ithacensis erat. / Sed tamen ad patrios retulit nihil inde penates, / Ereptas alus dum mare raptat opes.
Doncecad Alcinoi tándem venit hospita tecta; / Unde domum varias rettulit hospes opes. / lulius ecce
Medrana nouus velut alter Vlysses, / A varijs populis, a varioque man, / Gemmarum omne genus, genus
omne reportat & aun, / Thesaurus nunquam quantus Vlissis erat».
13
Relation, pp. 1-2.
14
Muy a menudo hace hincapié Medrano en su propensión irresistible a buscar cosas secretas, raras
y antiguas. Esta búsqueda de manuscritos, divisas, emblemas y epitafios es el hilo conductor de toda la
segunda parte de su Silva curiosa. Véase mi ponencia «Le voyage a Saint-Jacques de Compostelle d'un
courtisan de Marguerite de Navarre: Julián Iñíguez de Medrano», en las Actas del Coloquio Les Chemins
de Saint-Jacques de Compostelle (Toulouse, febrero 1993), en prensa.
15
Relation, pp. 2 y 5.
16
Relation, p. 3. Véase Silva curiosa, pp. 387-388.
17
Vemos en la Silva con qué entusiasmo transcribe Medrano las divisas, emblemas, adivinanzas,
poesías, epitafios que va descubriendo en sus viajes y que dedica a su amada Marfisa, pp. 250-268 y 401-
448.
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190 A. GALLEGO BARNES
...il parvint enfin au bas de l'escalier & se trouva dans une salle spatieuse, soutenue d'un
triple rang de colomnes qui étoient ornees de différens reliéis d'un goüt bizarre & nouveau.
On y voyoit représentée au naturel une femme qui, toute échevelée & le poignard á la
main, égorgeoit plusieurs petits enfans dont elle faisoit couler le sang dans un vase 18 .
y a su pacto con los demonios:
D'un autre cóté, cette méme femme armée d'une baguette mystérieuse, faisoit sortir de la
terre une legión de démons, ailleurs elle paroissoit fendre les airs dans un char traíné par
des animaux ailéz d'une figure épouvantable 19 .
Al describir la segunda sala que descubre Medrano, insiste De Castera en la presencia
de serpientes y alimañas ponzoñosas que amenazan al curioso explorador y que le asaltan
cuando intenta levantar la lámina de cobre que protege el sepulcro de Orcavella. Esta
protección ejercida por varias clases de alimañas en torno al sepulcro de la Orcavella del
Cáucaso es un trasunto de la que describía Medrano a propósito de la tumba de la
Orcavella gallega 20 .
Trátese o no de una transposición del manuscrito de Medrano, la anécdota «traducida»
no deja, como lo señalaba el propio De Castera, de ser muy diferente de la que refería
Medrano en la segunda parte de la Silva curiosa.
Vayamos por partes. La confesión de Orcavella, contenida en el manuscrito griego
hallado por Medrano en la tumba, presenta efectivamente muchas diferencias con el
relato contenido en la Silva curiosa, y la primera de ellas está en la forma de narrar en
primera persona, cuando en la miscelánea nunca interviene directamente la bruja.
Conocemos sus fechorías a través de la plática de un piadoso pastor que intenta poner
sobre aviso al curioso Julio, deseoso de acercarse a la tumba, cavada en la roca, de la
ogresa gallega.
Pero las diferencias saltan aún más a la vista cuando se fija el lector en lo narrado en
la confesión de la vampiresa del Cáucaso. Vayamos por partes.
En cuanto al lugar: la Orcavella de la Silva vivía no muy lejos de la ermita de
Finibus Terrae y durante setenta y seis años ejerció sus artes diabólicas a expensas de los
18 Relation, p. 4. Véase 5¡7va curiosa, p. 405: «la robaua de noche y de día quantos niños podía y con
la carne y sangre de aquellas pobres criaturas inocentes mantenía su vida y hizo tanto con su scientia y
larga experíentia que la Megera infernal alargó su vida ciento y sententa y seis años».
19 Relation, p. 3.
20 Relation, pp. 5-8. Véase Silva curiosa, pp. 408-409: «El encantamiento que esta maldita dexó entre
aquellas pennas fue que, desde el passo que ella se metió dentro, la tumba y sepulchro quedan rodeados de
una tan grande multitud de culebras, áspides y serpientes que los guardan noche y día, que en verlos dan
grandíssimo espanto a los que se acercan del sepulchro. Todavía si las personas que allí van, entran en
aquel llano que paresce un pradecito sin hazerles nigún daño, las animalias se apartan y les dan lugar para
que se puedan passear, y vean los cuerpos sepultados. Pero si los que abren la tumba son tan curiosos que
quieran toccar y palpar los cuerpos, luego estas bestias venenosas, como si tuuiessen juizio para conoscer
el agrauio que se haze a los cuerpos, salen de sus cueuas en grandíssima multitud y saltando sobre los
hombres que los cuerpos an tocado, les dan tan cruel guerra que hiriéndolos y lastimándolos con sus dientes
y lenguas venenosas, los persiguen hasta que los saccan fuera del pradecito que está entre las peñas. Y los
que de tales llagas quedan heridos mueren locos o rabiosos y entoxicados».
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campesinos gallegos y de sus hijos antes de cavar su tumba en la misma roca. La maga
de la Relation enemistada con todo el género humano 21 , tiene en las costas de la
Cólquide, hoy Mingrelia rusa 22 , una tumba a la cual se llega después de bajar una
escalera y recorrer tres salas. Se trata de un sepulcro monumental con su lápida de cobre,
en las costas de la Cólquide, hoy Mingrelia rusa, cerca del monte Cáucaso.
Por lo que se refiere a la vida amorosa, nunca se alude a supuestos amores de la
ogresa gallega; cuanto más sabemos que, valiéndose de un ensalmo, mantuvo Orcavella
bajo su dominio a un desgraciado pastor con el cual fue cavando en la peña viva una
tumba o sepulcro 23 . Terminada la fúnebre tarea lo atrajo después en la tumba, donde,
después de desnudarse se encierra en ella, utilizando como colchón al desgraciado
pastor 24 . O sea que en ningún momento se alude a un supuesto enamoramiento por parte
de Orcavella. En cambio la vampiresa del Cáucaso, a pesar de su odio a la hombres, se
dejará enternecer por la desesperación de un náufrago del cual quedará prendada:
Je les considérois avec attention, lorsque j'en vis un qui étoit vivant & qui n'avoit qu'une
playe légére. Son visage paroissoit animé d'un funeste désespoir; un feu terrible &
menacant éclatoit dans ses yeux; ses mains & sa bouche étoient toutes ensanglantées; il
tenoit un poignard, & l'on voyoit á son attitude qu'il le tenoit á dessein de s'en percer le
coeur.
Je me sentís touchée á la vue de cet infortuné, & la compassion qui s'insinuoit alors pour
la premiére fois dans mon ames y fit entrer l'amour 25 .
En realidad, la gran diferencia, a nivel de la anécdota, radica precisamente en este
amor de Orcavella por este náufrago cuya historia se engarza ahora en la confesión de
Orcavella.
En cuanto al parricida Gelanor: se entera entonces el lector que este náufrago
desesperado es el príncipe árabe, Gelanor, víctima de la alevosía de una tal Theodoride de
la cual se enamora. Esta joven asiría se niega a casarse con él mientras no sea rey;
Gelanor se niega a derribar a su padre, pero se deja convencer por un astuto asirio, un tal
Phalerus, y termina por apuñalar a su padre, el rey Felimar, en el templo. El relato por
Gelanor del parricidio, la relación de la toma del poder por el intrigante Phalerus, su
boda con la traidora, la huida de Gelanor para escapar a la venganza del pueblo
soliviantado por el propio Phalerus, la evocación de los celos del parricida y de su deseo
de vengar a su padre, las peripecias del regreso a Pudnopolis de Gelanor disfrazado, del
asesinato por Gelanor de Theodoride, la oportuna reaparición del rey Felimar que había
sido escondido por el fiel Cyranophile, acompañado del sabio Timagéne, la huida de
Relation, pp. 9-10: «Je suis la Magicienne Orcavelle, l'ennemi du genre humain, le fléau de
l'univers. J'avois juré une haine implacable á tous les hommes, je les poursuivois sans cesse, je m'abreuvois
de leur sang, les voir souffrir faisoit mes plus chéres délices».
22 Relation, Préface: «Quoique Médrane donne cet ouvrage pour une venté constante, & qu'il assure
que dans la Colchide qu'on nomme á présent la Mingrelie, il a effectivement découvert le Tombeau de la
Magicienne Orcavella».
23 Silva curiosa, p. 406.
24 Silva curiosa, p. 407.
25 Relation, p. 13.
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Phalerus, el perdón del rey a su hijo, la persecución de Phalerus a quien Gelanor
consigue alcanzar y matar y por fin el naufragio constituyen un núcleo narrativo
completamente original respecto a la Silva curiosa.
A continuación el texto de la Relation nos refiere cómo la enamorada Orcavella
atiende al hermoso Gelanor recurriendo a sus conocimientos y consigue curarle:
A ees mots, je pris quelques hérbes salutaires que je portois sur moi, & je les préparai
suivant les regles de mon part pour les appliquer sur les blessures de Gelanor. Pendant que
je m'occupois á ce travail oü l'amour animoit mon esprit & conduisoit mes mes mains...
Le temps pressoit. Gelanor touchoit á sa derniére heure. J'aérrétai son sang, je fermai ses
bvlessures, & la forcé de mes enchantemens lui rendit la vie qu'il étoit pret á perdre sans
un si prompt secours 26 .
A partir de ahí vanamente intenta Orcavella enamorar a Gelanor, pero el príncipe
árabe no consigue olvidar el amor que profesara a la traidora Theoride, y por más
protestaciones de amor que haga a la bruja, no puede evitar sus celos. Decidida a
asegurarse de la autenticidad de este amor proclamado por Gelanor, Orcavella, recurriendo
de nuevo a sus artes diabólicas, toma las apariencias de la joven asiria y no tarda en
descubrir con rabia que el joven príncipe:
O toi, passant que la curiosité porte á visiter ce tombeau & qui lis cette funeste histoire,
juge quels furents les mouvemens de fureur qui s'élevérent dans mon ame, lorsque je vis le
traítre que j'aimois, prosterné aux pieds du fantóme de ma rivale, & lorsque j'entendis ce
que l'amour lui dictoit d'injurieux au feu sincere que je ressentois pour lui... 27 .
Orcavella, abandonando las apariencias de Theoride, incapaz de contener su furia clava
un puñal en el pecho de Gelanor, y al contemplar la agonía de su amante, gime y se
desespera y termina por transformar el hermoso palacio en que abrigara sus amores en
una triste y horrorosa cueva donde, también como la Orcavella gallega, se encierra viva
en un sepulcro junto a su amado.
Después de analizar puntos de convergencia y elementos nuevos respecto a la historia
de la Orcavella de la Silva curiosa de Medrano, queda en pie el interrogante: ¿encontró
verdaderamente De Castera en Chátillon el manuscrito del caballero navarro? Y de
encontrarlo ¿por qué transformó el relato introductorio? Un análisis más pormenorizado:
sensibilidad ya dieciochesca, lamentaciones, pero también afición a los cuentos
orientales, a lo exótico, y podemos preguntarnos: ¿esta nueva versión de la Orcavella
gallega no sería por casualidad un trasunto de alguna novela corta, de tema trágico que
tanto se difundieron en Francia y España durante el siglo XVII 28 ? Y de tratarse
verdaderamente de un texto de Medrano, ¿no lo habría compuesto a imitación o plagio de
alguna novela de su época? La obra de Medrano da mucho de sí y espero que los
26 Relation, pp. 75 y 78.
27 Relation, pp. 84-85.
28 Véase Histoires tragiques de Boiastuau.
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estudiosos actualmente enfrascados en ella aporten soluciones que mis cortos alcances no
pudieron proponer.
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