13.05.2013 Views

2. Versión Completa Formato PDF - Universidad de Chile

2. Versión Completa Formato PDF - Universidad de Chile

2. Versión Completa Formato PDF - Universidad de Chile

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Felipe Trigo : El médico rural<br />

En su calidad <strong>de</strong> padrinos, Esteban y Jacinta ocupaban puestos <strong>de</strong> honor junto a los<br />

novios. Ella, a la izquierda <strong>de</strong> Alberto, y él, a la <strong>de</strong>recha <strong>de</strong> Inés. Si tal fuese o no la<br />

rigurosa colocación protocolaria, lo ignoraba el médico, que al amparo <strong>de</strong>l mantel podía<br />

estrechar la mano que Inés tendíale con frecuencia; sabía tan sólo que Inés, su Inés,<br />

voluntariosa, le exigió con un rápido mirar que sentárase allí para el banquete.<br />

Querría la apasionada sentirle cerca por esta hora, al menos, en la falsa y memorable<br />

noche <strong>de</strong> sus nupcias. La veía triste, entre el gozar <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más, y dábala licores, que ella<br />

sorbía ávidamente con el ansia asimismo <strong>de</strong> aturdirse; en pago, iba entregándole por <strong>de</strong>bajo<br />

<strong>de</strong> la mesa tantas cosas y pedazos <strong>de</strong> su adorno, cual si ella propia así pudiera irse poco a<br />

poco <strong>de</strong>strozando y entregando.<br />

Habíale ya hecho coger y guardar en los bolsillos el pañuelo, una peineta, botones, dos<br />

sortijas, unas sedas <strong>de</strong> agremán..., y aún ahora le <strong>de</strong>jaba el famoso ceñidor <strong>de</strong> las fechas<br />

regalado por sus primas... «¡Lo tiras!»... «¡Me das otro!»... «¡7-11-9!... ¡son las nuestras!»...<br />

pudo a saltos <strong>de</strong>slizarle en un recru<strong>de</strong>cimiento <strong>de</strong>l barullo.<br />

Se admiró él, al compren<strong>de</strong>rla -inquieto ante la audacia dolorosa que prestábanla las<br />

pequeñas copas <strong>de</strong> licor, y retirando <strong>de</strong> su alcance una que intentó ella beberse por su<br />

cuenta-. Siete <strong>de</strong> noviembre, en efecto... ¡recordó el joven que había sido la fecha <strong>de</strong> ellos,<br />

en la memoria <strong>de</strong> Inés tan precisamente conservada!<br />

No lejos <strong>de</strong> los dos, garantía <strong>de</strong> sus próximas venturas, estaba doña Antonia, cuya<br />

memez hubiera <strong>de</strong> estorbarles poco y cuyos achaques serviríanle al médico <strong>de</strong> perpetua<br />

ocasión para venir a verla diariamente. Curra, a<strong>de</strong>más, cedida a Inés, por su madre, como el<br />

Cristo, seguiría velando la secreta felicidad <strong>de</strong> este chalet mejor que en su casita.<br />

Mas, ¡oh!... ¿Qué?... De nuevo Inés le apremiaba con algo, allí <strong>de</strong>bajo. Cauta acudió la<br />

mano <strong>de</strong>l pru<strong>de</strong>nte, y... ¡oh!, era el azahar, íntegro el ramo que ella se habría <strong>de</strong>sprendido<br />

<strong>de</strong>l pecho... Aun llegado tar<strong>de</strong>, le pertenecía; lo agra<strong>de</strong>ció..., y se vio negro para ocultarlo,<br />

para guardarlo. El «marido», mientras, siempre silencioso y lúgubre, con la boca abierta y<br />

las barbas y las solapas <strong>de</strong> la levita llenas <strong>de</strong> almíbar, aburríase y miraba hosco a doña<br />

Claudia -que ya dos veces, fuera, había tenido que reñirle la manía <strong>de</strong> «irse a su casa, a<br />

dormir».<br />

Hora <strong>de</strong> los brindis, iniciados por Frasquito. Leyó el suyo en verso, y dijéronlos en<br />

prosa Ramón Guzmán, Macario, don Indalecio y el ovetense director <strong>de</strong>l banco, Brusco el<br />

padre <strong>de</strong> la novia, los cerró con una frase que le salía <strong>de</strong>l corazón:<br />

-¡Brindo por la felicidad <strong>de</strong> mis hijos, y por el padrino <strong>de</strong> esta boda, y médico <strong>de</strong> primer<br />

or<strong>de</strong>n, que ha podido permitirla, volviéndole a mi querida niña <strong>de</strong> mi alma el gozo y la<br />

salud!<br />

Sin retóricas, aquella sincera gratitud provocó los entusiasmos. Era verdad. Curada<br />

Inés; radical y prodigiosamente curada por Esteban, los tíos <strong>de</strong> Oviedo volvían a<br />

sorpren<strong>de</strong>rse <strong>de</strong> la espléndida mujer hallada en la pálida y medio tísica chiquilla. Todos<br />

El Autor <strong>de</strong> la Semana ©1996-2001 Programa <strong>de</strong> Informática- Facultad <strong>de</strong> Ciencias Sociales<br />

– <strong>Universidad</strong> <strong>de</strong> <strong>Chile</strong>. Edición y selección <strong>de</strong> textos Oscar E. Aguilera F. oaguiler@uchile.cl<br />

198

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!