Edicion No. 33 - Asorfac

sobre vivencia. En aquel lugar, en el que el diablo
parecía triunfador, una buena persona había salvado
mi vida, me había dado esperanzas, en un lugar
en donde ésta, no existía. Mi madre me había prometido
enviarme un Ángel, y el Ángel apareció.
MARIA PAOLA RUIZ L.
Finalmente me Hija encaminé del CR a Inglaterra, Mariano Ruiz donde Berrío fui
asistido por una institución de caridad judía. Me
colocaron en un hospedaje con otros niños que
Desde el principio he sabido que es hacer parte
de
sobrevivieron
una familia…..
al Holocausto y fui entrenado en
electrónica. Después fui a Estados Unidos, don-
Nuestras de mi hermano familias Sam militares se había mudado. nos han Serví enseñado en el
el ejército significado en la guerra de la de palabra Corea sacrificio.No y regresé a Nueva estoy
hablando York, luego de de un dos sacrificio años. En que agosto necesite de 1957 recono- abrí
cimiento, mi propio o negocio que alguien de reparación sienta pena de por electrónicos. nosotros.
Estaba empezando a establecerme allí.
Nosotros, aquellos que hemos vivido al lado de
aquella persona que ha servido a la patria, tenemos
Un día,
algunas
mi amigo
particu-
Sid que conocí en Inglaterra,
laridades me llamó incom- y me dijo: “tengo una cita para ti, es
prensibles una amiga polaca. Vamos a salir juntos”.
¿Una cita a ciegas?. No, eso no es para mí. Pero
Sid continuó insistiendo y unos pocos días nos
reunimos y dirigimos al Bronx para recoger a su
FAMILIAS
MILITARES
novia y a su amiga Roma. Tengo que admitir,
para ser una cita a ciegas, no estaba nada mal.
Roma era una enfermera en el Hospital Bronx.
Era linda e inteligente. Hermosa también, con
cabellos castaños y ojos verdes almendrados, que
la llenaban de vida.
Los 4 nos dirigimos a Coney Island. Dimos un
paseo para alguien por la orilla que de mire la playa a simple y después vista cenamos nuestras
cerca vidas. de No la orilla. es fácil No recomenzar podía recordar una haber vida a tenido cada
mejores nueva orden, momentos. no es sencillo Al regreso, no tener compartimos a esa perel
asiento sona tan trasero. necesaria Como día a judíos día. europeos que habíamos
sobrevivido la guerra, sabíamos que muchas
¿Qué
cosas
valor
se
se
dejaron
necesita
sin
para
decir
resistir
entre
una
nosotros.
vida de
servicio al lado de nuestro militar?.
Ella comenzó con el tema: -”¿Dónde estabas durante
Cuantas la guerra?” veces no preguntó sentimos delicadamente. a la Fuerza como
-”En nuestra los Fuerza campos y lloramos de concentración, con sus sacrificios, dije. Las
terribles pero se nos historias llena el jamás corazón vividas, de orgullo las irreparables con sus
pérdidas. éxitos? Yo traté de olvidar, pero jamás podré”.
Ella comentó: -“mi familia estuvo escondida en
una
Hoy
finca
miro
en
atrás
Alemania,
y solo
no
doy
lejos
gracias
de Berlín;
por esa
mi
vida
padre
con
conocía
todos sus
a un
pros
sacerdote
y sus contras,
y éste
con
nos
todos
dio pape-
sus
recuerdos algunos hermosos y otros tristes, doy
les arios”. Yo imaginé cómo ella habría sufrido
gracias por los amigos que casi se sentían como
también miedo. Y aún así, allí estábamos, ambos
hermanos, ya que al fin y al cabo sentían igual
sobrevivientes en un nuevo mundo.
que nosotros.
-”Cerca En mi caso de la es estancia, mi padre, había para un otros campo que lean de con- este
centración, pequeño articulo continuó escrito Roma, con yo vi toda allí a humildad, un niño y
pude serán llevarle sus madres, manzanas esposos cada (as), día”. hermanos, Qué extraordi- hijos.
naria Me siento coincidencia, muy orgullosa que ella de haya mi Fuerza ayudado Aérea. a algún
otro niño. -”Cómo era él?”, le pregunté. -”Era
Mas allá de los reconocimientos, de los ben-
alto, delgado y hambriento. Yo iba a verlo todos
eficios recibidos, se que de manera grande
los días durante seis meses”.
o pequeña todos hemos hecho sacrificios
y es exactamente eso lo que nutre
Mi corazón
mi
dio
vida
un
en
salto.
este momento,
¡¡No podía
entiendo
creerlo!!.
a
¡¡No podía cabalidad ser!!. -”Él en te valor dijo del un día buen que sacrificio no volvieras
porque los estaban trasladando a Schlieben??”.
Roma Gracias me miró a nuestras estupefacta familias y dijo: militares -”¡Sí!”
-”¡Era yo!!!” por Estaba su apoyo, pronto por a su explotar paciencia de y alegría, por su
inundado amor de emociones. que desde No siempre podía han creerlo. sido ¡Mi pi-
Ángel!. -“¡¡No lares te fundamentales voy a dejar ir!!”, y necesarios le dije a Roma. para
llevar a cabo esta gran empresa que es
hoy mi propia vida.
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