Vidente Darly Chagas da Silva, 'Flor de Trigo' - Apariciones de ...

Brasil, rezad todos los días, pidiéndole a Dios por la fuerza, el coraje y la aceptación
de todo lo que se viene para toda la humanidad, mucho dolor, sólo Dios puede
ayudaros.
Yo os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el
Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción.
Debéis meditar sobre el santo Evangelio de hoy: Marcos 7, 1-8, 14-15, 21-23.
Confidente Darly Chagas
Mensaje de Nuestra Señora – María Llena de Gracia
El Advenimiento del Nuevo Mundo – Palabras de Nuestra Señora
EL TIEMPO DE LA REALIZACIÓN DE LAS PROFECÍAS DADAS AL MUNDO
15 de Septiembre de 2012
Queridos hijos, con mucho amor y cariño Yo vengo a bendeciros en el Nombre del Padre, del
Hijo y del Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, Mi alegría es grande por encontraros, aquí reunidos en oración para acogerme y
rezar todos juntos ante Dios pidiendo en este momento por los pueblos del Medio
Oriente primeramente, ellos se dejaron caer en la ilusión y comenzaron un conflicto
que no va a terminar sin derramamiento de sangre. Recemos, niños, pidamos la Paz para
todas las naciones.
Mirad, hijos, Dios dio todo lo bueno y sigue dando cada vez más a la humanidad, pero el
hombre quiere más, quiere destruir su propia felicidad e inventó la guerra.
Cuando el mundo esté ardiendo con fuego, él va a querer dejar de pensar en cómo
evitarlo, pero será demasiado tarde para el hombre. Ya encendió la llama que poco a
poco va extendiéndose y no se apagará hasta que Dios les muestre lo que ellos
fueron capaces de hacerse a sí mismos. Habrá gritos y crujir de dientes, debido a que
el mundo está lejos de Dios.
Mis hijos, rezad cada vez más para que Jesucristo venga pronto, porque ahora el
mundo está perdiendo la razón.
Mis hijos, hoy os invito a meditar más en la Santa Palabra de Dios, pues este día tiene un gran
significado para vosotros mismos, que sois hijos de Dios y recibisteis un premio del Cielo.
Porque Jesucristo desde lo alto de la Santa Cruz, en el momento que iba a morir, compartió
con vosotros a Su propia Madre, dándoos así una ayuda muy grande, una Mediadora entre el
Cielo y la Tierra. Él os dio a Mí como hijos y Me hizo vuestra Protectora, Aquélla que se encarga
de vuestras peticiones, Yo llevo delante de Él todo lo que vosotros pedís y traigo para vosotros
la respuesta de Dios.
¡Cuántos ruegos vosotros Me hacéis y cuántas Gracias os traigo! Pero debéis comprender que
no todos vuestros problemas se pueden resolver hoy en día, ya que dependen de vuestra
perseverancia, de vuestra aceptación.
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