nueva

Mucho se habla sobre el
desarrollo laboral y el
crecimiento profesional,
pero está claro que
dentro de una empresa, el intrapreneur
no puede funcionar solo, sino
que deberá apoyarse en el equipo
que lo acompaña, para que esa idea
pueda sustentarse y hacerse realidad.
Asimismo, es importante saber
inculcar la visión del emprendedor
en los empleados y hacerlo genera
nuevos intraemprendedores.
Y es que identificar una oportunidad
y constancia sobre una idea, son
cualidades típicas de un emprendedor.
Son personas que piensan algo
y lo ejecutan, y toman estos nuevos
caminos de emprendimiento porque
saben que pueden obtener mejores
compensaciones que estando dentro
de una empresa.
Pero, ¿qué mueve a alguien dentro
de una empresa a generar nuevas
ideas en busca del beneficio común?
Quizás sea la desesperación
por evitar el status quo y el querer
ir más allá. Pero en la mayoría de
las ocasiones, este proceso de intrapreneurship
surge a raíz de un
detonador, que suele ser alguien que
nos inspira en la empresa.
Desde el punto de vista los buscadores
de talento, en cada compañía
hay emprendedores, pero se necesitan
catalizadores para detonar el
emprendimiento. O bien tiene que
llegar alguien externo a la empresa
apostando por las ideas que surgen
Revista de Negocios y Economía
de los empleados, o el líder es un gran
estratega visionario que da oportunidad
de convertir en realidad esas ideas,
tal como sucede en algunas empresas
inmobiliarias, como Grupo Frisa.
En ocasiones esta iniciativa emprendedora
se ve frenada por la visión
de una compañía que no quiere
correr riesgos o porque la persona
que propone el emprendimiento no
es de la confianza del equipo directivo;
y no se entiende cómo alguien va
a poder romper algunos paradigmas
para generar beneficios económicos
para la misma.
Algo que falta mucho en las empresas
es saber formar equipos de alto
desempeño, comprometido, persistente
en corto, mediano y largo plazo,
algo sobre lo que se trabaja en la teoría
del libro Las cinco disfunciones de un
equipo, de Patrick Lencioni.
Y trabajar sobre la falta de confianza,
el temor al conflicto, la falta
de compromiso, la ausencia de responsabilidad
y la desatención a los
resultados, fortalecerá a un equipo
para lograr un mejor desempeño en
su productividad y generar confianza
en la posibilidad y viabilidad de las
ideas de los intraemprendedores.
En Frisa, por ejemplo, los líderes de
proyecto comienzan visualizando el
concepto, realizan una evaluación del
proyecto para crear flujos y finalmente
transformarlo en números concretos
que se presentan al Consejo, y si se
considera que es viable y financiable,
el proyecto saldrá adelante.
algo que falta mucho en las empresas es saber formar equipos de
alto desempeño, un equipo comprometido, persistente en corto,
mediano y largo plazo, algo sobre lo que se trabaja en la teoría del
libro las cinco disfunciones de un equipo, de Patrick lencioni.
abril - MaYo 2013 11