LA MUJER QUE OPERARON EN UN OVNI

LA MUJER QUE OPERARON EN UN OVNI
que hacía tiempo estaba obsesionado por los secretos del Uritorco, el gran monte sacro de
Argentum:
-Si desertara una persona del grupo que se está integrando para ir a cierto lugar muy
especial, pienso que el individuo que lo completaría serías vos...
-Esperemos-, fue su respuesta, sin preguntarme nada más.
Unas horas antes de partir defeccionó uno de los candidatos más firmes. Le telefoneé:
-Hermano: eras vos, nomás. El lugar es Capilla del Monte, cerro Uritorco, para entrar a
Erks.
-No me habías dicho nada, pero lo estaba esperando -respondió- ¡son cinco veces que
voy allí, buscando! ¡qué bueno que haya llegado el día!
(Fuimos a buscar la mágica ciudad, nos desviamos... o, mejor dicho, nos desviaron...
Algo de aquella tentativa frustrada está relatada en mi libro “Los Hombres de Negro en la
Argentina (y el Triángulo de las Bermudas)”. El total de la experiencia vivida ha tenido, por
ahora, sólo un relato radial... quizá no haya llegado aún el tiempo para referirla en un libro).
De todos modos, para los efectos de esta investigación del “caso Mónica” debemos
regresar a aquel instante en el líving de su casa de ella: HAP estaba preparando un material
por encargo de la fenecida editorial Puntosur sobre un año que sabíamos clave: 1992. Se me
ocurrió preguntarle si “ellos” podrían decirnos algo al respecto. Solicitó silencio, se concentró
como si estuviera “escuchando a alguien”, luego indicó que pusiéramos en marcha el
radiograbador y, con voz pausada, como forzada desde su laringe, muy uniforme en su tono,
expresó textualmente lo siguiente, que sería luego publicado en el Nº 1 de la revista “Lo que
Vendrá”, en setiembre de 1992:
“...se halla el mundo colmado de insatisfacción social, cultural; se pierde
todo impulso de amor dentro del propio ser. No hay iniciativa propia, no
queda nada de lo que el hombre tendría que ser. Los tiempos cambian, la
Tierra cambia; el hombre retrocede y no cambia, no sigue su “cíclico”; por
tal motivo debe haber un cambio... no una hecatombe, un giro de 90
grados sobre los polos...: eso es una equivocación.
La Tierra va a ir cambiando y dando su giro, pero en forma lenta y
paulatina, sin que el propio ser humano se dé cuenta de eso...los
hombres que ya dejaron de ser humanos no habitarán la Tierra
nuevamente, y es como si pasaran a un “cuarto intermedio” para su
propia reflexión. Entonces sí la Tierra volverá a ser, lenta y
paulatinamente, lo que una vez fue y debe ser...
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