Memoria 1998 Caja Rural de Toledo

los paises del Euro, y donde la creación de 400.000 puestos de trabajo sirvió para
fijar los máximos históricos en nuestro país en cuanto al establecimiento de empleo.
Nuestra integración en la Asociación Española de Cajas Rurales ha sido el catalizador
necesario e imprescindible para el desarrollo de la actividad de las Cajas Rurales
en torno a tres ejes fundamentales: el Banco Cooperativo Español como Institución
encargada de facilitar todos los servicios financieros necesarios para estas Entidades;
la aseguradora RGA, para la comercialización y diseño de seguros y RSI, la
división informática que constituye el pilar básico y necesario para el desarrollo de
todas las Cajas Rurales en su apuesta por el uso intensivo de la tecnología.
Todas estas actuaciones han sido argumentos concluyentes para posibilitar el
avance y desarrollo, de una forma rentable y eficiente, de todas las Cajas Rurales integradas
en la Asociación, ajenas a cualquier movimiento especulativo interesado en
su forma de gestión y constitución societaria.
Por su parte, también Caja Rural de Toledo sigue avanzado al ritmo deseado
gracias a la especial atención que siempre hemos puesto en la calidad de nuestros
productos y en la consideración con nuestros socios y clientes, especialmente las cooperativas.
Precisamente, la simbiosis que siempre ha existido entre Caja Rural y estas
sociedades, generosa y sin vanas concesiones, debe constituir el marco irreprochable
y permanente por donde discurran las relaciones entre ambas Instituciones.
Desde luego, esa siempre será la conducta con la que esta Caja acogerá su vinculación
con las cooperativas, de la misma forma que con el resto de socios y clientes,
donde Caja Rural seguirá aportando soluciones a sus necesidades y prestándoles servicios
y productos de alta calidad por encima, incluso, de sus expectativas. Y todo
ello gracias al decisivo papel que en esta Casa desempeñan sus empleados, sin cuya
profesionalidad y entusiasmo la Entidad no hubiera alcanzado las cotas de credibilidad
y solvencia adquiridas.
Durante el pasado ejercicio, como puede comprobarse, Caja Rural de Toledo
avanzó considerablemente dentro de los objetivos marcados, diseñados con el generoso
apoyo y ayuda de mis compañeros de Consejo, y ejecutados ejemplarmente por
la Dirección General de esta Casa. Pueden estar seguros que seguiremos intentando
en el futuro cumplir con los compromisos adquiridos y los que ustedes nos encomienden.
Aspiramos a comprender y apoyar las actividades de nuestros socios y
clientes con la misma ilusión y entusiasmo que sus promotores, ya que si somos capaces
de ayudarles a progresar también contribuiremos al desarrollo y fortalecimiento
de esta Entidad y de los territorios donde se desenvuelve.
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