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Holstee
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Ofrecen productos significativos para compradores conscientes. Y junto con
vender poleras y billeteras de plástico reciclado, crearon un manifiesto para
cambiar el mundo. Bienvenido al mundo de Holstee.
Corría mayo de 2009 cuando los
hermanos Mike y Dave y su pareja,
Fabián comenzaron Holstee.
Más que una empresa, o la ropa, el
trío quería crear un estilo de vida. A
partir de ese verano se metieron de
cabeza en el mundo del diseño y
de la producción. Después de seis
meses y una curva de aprendizaje
enorme, Holstee lanzó la primera
línea de poleras hechas ciento por
ciento de plástico de botellas recicladas
que molieron, cortaron y cosieron
a menos de 150 kilómetros
uno del otro en Carolina del Norte,
Estados Unidos. A partir de esta
primera ronda, el 10% de todas
las ventas se prestó a pequeños
emprendedores en la pobreza extrema
sin fines de lucro, mediante
micro-préstamos a organizaciones
como Kiva.org - una tradición que
se sienten orgullosos de abrazar
todavía.
Billeteras de plástico
Unos meses más tarde, Mike necesitaba
una nueva billetera y al
no encontrar el tipo de diseño funcional
y minimalista que buscaba,
decidió crear una. Luego de unos
bosquejos rápidos nació la idea de
una billetera Holstee. Trabajando
en conjunto con una ONG en la
India que había perfeccionado un
método de uso de bolsas de plástico
recogidos de las calles de Delhi
para crear un único tejido 100% reciclado,
pocas semanas más tarde
tuvieron algunos prototipos en sus
manos: la billetera de sus sueños.
Hicieron una cantidad suficiente
para ellos y para sus amigos y no
La billetera de Holstee es 100 por ciento de plástico reciclado.
pararon más. Debido al gran éxito
las venden en Holstee.com junto
con las poleras. Es ahora uno de
sus productos más vendidos.
El manifiesto más popular
En los inicios de la compañía estaban
llenos de un montón de energía
en bruto, de emociones y de
sensaciones que nunca han querido
olvidar. Por eso que lo primero
que se les ocurrió a los tres fundadores
fue sentarse juntos en Union
Square y escribir exactamente lo
que estaba en sus mentes y las
puntas de sus lenguas. No se trataba
de poleras y no se trataba de
sus antiguos empleos. Se trataba
de lo que querían de la vida y de
cómo crear una empresa que se
respira esa pasión en el mundo
cotidiano. Fue un recordatorio de
lo que vivieron. El resultado llegó
a ser conocido como el Manifiesto
Holstee, hoy ampliamente difundido
en internet y redes sociales y
muy conocido en todo el mundo.
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Caso de negocios