Nº 34, Septiembre 2011 - Centro de Estudios Garrigues

EL CENTRO POR DENTRO
se merecen. Otros nos quedaremos en Madrid, convirtiendo esa
ciudad desconocida para muchos de nosotros hace apenas un
año, en nuestra casa. Pero seguro que seguiremos en contacto,
compartiendo nuevas experiencias, viajes y por qué no, nuevos
retos profesionales.
Echando la vista hacia atrás, me parece increíble que hace
un año no conociera a ninguno de ellos. Compartir tantas horas
de biblioteca, comidas en la planta club, recordar los largos
ratos pasados hablando de las preocupaciones comunes y los
planes de futuro y, cómo no, todos los viajes y los ratos de ocio
compartidos, hacen imposible no considerarles parte de tu familia.
Por último, si se me permitiera dar un consejo a aquél que
vaya a tomar la decisión de cursar este Máster, le diría que se
olvide de metas y objetivos a largo plazo y dedique un año de su
vida y todo su tiempo y esfuerzo a sacar el máximo provecho de
esta experiencia y de la infinidad de posibilidades que ofrece.
Y es que, a veces no es necesario tener un destino; disfrutar y
aprovechar el viaje es, sin duda, la elección acertada.
profesionales de primer nivel del sector aplican en su día a día
y, por supuesto, nuestras propias conclusiones y formas de
trabajar que vamos definiendo conforme avanza el Máster.
La coyuntura económica de nuestro país ha supuesto un
mayor nivel de exigencia en todos los niveles a los jóvenes
profesionales que nos incorporamos al mercado laboral.
Esta circunstancia tan trascendental también ha sido tenida
en consideración a lo largo de todo el programa formativo.
Evidencia de ello es que cuando acudes a un proceso de
selección te sientes completamente preparado para afrontar
cualquier prueba o pregunta, y percibes la diferencia con
respecto a otras personas.
En definitiva, cuando finalizas el Máster eres una persona,
tanto a nivel profesional como personal, totalmente diferente:
más preparado para afrontar las futuras situaciones que nos
encontraremos en el futuro y, además, con numerosos buenos
amigos que siempre te acompañarán en tu vida.
humanos son mucho más que personas, pero hay que saber
demostrarlo.
Creo que he tenido especialmente suerte, no solo por contar
con buenos profesionales impartiendo las clases y poder
aprender de ellos de primera mano, sino también por los
compañeros con los que he podido trabajar codo con codo
estos meses. Todos han colaborado y han hecho que surgiera
un buen ambiente de trabajo y buen trato que será difícil de
igualar.
El reto mereció la pena y sacó todo lo mejor que teníamos
dentro. Lo que empezó en octubre del 2010, terminó hace ya
unas semanas. Parece que no ha pasado el tiempo desde aquel
primer día de Máster. Sin embargo, ya todo acabó. Tras estos
intensos meses puedo decir que esta gran aventura superó mis
expectativas.
Ahora comienza otra gran aventura, poner en práctica todo lo
que hemos aprendido. ¡Mucha suerte a todos!
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