El por qué de un consumo responsable - Siss

Serie del Consumo Responsable
Denuncie a quien robe
agua. Como no la pagan
son los que más desperdician,
y además eso afecta su
economía personal, pues si
son pocos los que pagan, las
tarifas serán mayores.
Denuncie a empleados negligentes
que no reparan
fugas, no tratan las aguas
residuales, no se esfuerzan
por mejorar la calidad del
servicio ni la eficiencia en el
desempeño, no capacitan a
su personal, etc.
Reporte las fugas o malos olores que observe en las calles, exija un número de recepción
de su reclamo y que le informen ágilmente sobre el estado de atención que
lleve su reclamo o reporte.
Solicite que la entrega de agua a su domicilio mantenga la presión adecuada. La
presión no debe ser excesiva como para que propicie roturas y fugas, ni demasiado
baja que le impida usar sus instalaciones correctamente, como por ejemplo, que
encienda el calefón.
Denuncie a quien descargue residuos peligrosos. Exija vigilancia y programas de
educación sobre este tema, y alternativas de contenedores especiales para tales residuos
por parte de las autoridades, así como depósitos para facilitar la clasificación
y reciclaje de desechos sólidos.
No compre tierra de monte, ni muebles o madera de origen poco claro, que pueda
proceder de talas ilegales a los pocos bosques y zonas de recarga a acuíferos.
Mantenga una dieta y base alimenticia más vegetariana que carnívora. Se consume
8 veces más agua para generar un kilogramo de carne que uno de vegetales.
No consuma productos que tengan mucho empaque o genere demasiada basura,
ya que además de contribuir a no producir tanto desecho, las industrias demandan
menos agua mientras menos empaques procesan.
No use automóviles particulares y opte por servicios de transporte público. Ya
no necesitará agua para lavar el auto, ni demandará procesos industriales de
alto consumo de agua como son las refi nerías de gasolina, o manufactureras de
vehículos.
Viva más sano y no se vuelva dependiente del agua caliente para bañarse. Al usar
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