El Tajo que habló - Calzada de Valdunciel

EL TAJO QUE HABLÓ, pág. 12
las paredes de ambos lados hay unas tablas de madera - vasaressujetas
a las paredes forradas con papeles vistosos. En ellas están
colocados los platos, tazones, vasos y otros enseres. En las partes de
abajo se colocan los más pesados y de uso corriente. En las partes de
arriba se colocan los platos antiguos y la loza mejor, o vajilla.
También hay en las paredes más clavos fuertes clavados, hechos por
el herrero, que sirven para apoyar los varales, que se colocan
encima, para colgar la mayor parte de la matanza: chorizos,
morcillas, farinatos, lomos, jamones y otras cosas, durante un
tiempo, después de hacer la matanza, para que se sequen y
empiecen a curarse.
Entre la ventana y un rincón hay un mueble de madera, tipo
armario, que tiene dos puertas; el interior está dividido en tres
partes, separadas por dos tableros o baldas. En la parte de arriba, en
los costados de mueble, como si fueran unas pequeñas ventanas,
lleva puestas unas telas metálicas con el fin de que pase el aire y se
refrigere de una forma natural, las carnes o pescados frescos, para el
día. Esto se llama fresquera, antes no había frigorífico. En la parte de
arriba también se coloca la salera, esto es una caja alargada no muy
grande, con tres departamentos, hecha de madera o corcho, sin tapa
conteniendo: sal; pimiento molido; ajos. En la parte del centro- balda
se colocan la botella de vinagre; la aceitera; alguna botella de vino y
las sartenes más pequeñas. En la parte de abajo se colocan las ollas
o pucheros, las cazuelas, fuentes y platos más pesados.
En otro de los rincones está la mesa de madera, que tiene un
cajón en el que se meten los cuchillos, cucharas y tenedores de uso
diario y el pan.
Colocados junto a las paredes están los distintos asientos: tajos,
tajuelas, banquetas, sillas y dos sillones de mimbre.
Antonio Gordillo Asunción