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Él menciona que su primera
escuela fue su hogar, teniendo a su
mamá como maestra, ya que ella se
encargaba de enseñarle las primeras
palabras y fue por este motivo que
cuando llegó a la escuela, él era uno de
los niños más avanzados, gracias a la
estimulación que se le brindó en casa.
Fue un estudiante excelente,
pero la única limitante que tenía era que
además de estudiar se ponía a trabajar
y, como ya se mencionó anteriormente
por la falta de dinero algunas veces no
comía y en la escuela se dormía, pues
se encontraba muy débil, debido a los
quehaceres que realizaba en todo el día
y no tenía el alimento necesario para
reponer esa energía.
En unas de sus cartas, abordó el
trato que le daban ciertos comerciantes
a su mamá, por el hecho de no tener los
recursos suficientes para liquidar lo que
debía, este no era un trato digno, pues
todo lo que le decían eran maltratos, y
esto la hacía sentir menos. También
mencionaba algo respecto a las
autoridades, pues éstas no hacían nada
respecto a la exclusión de su mamá,
también comenta sobre los homicidios,
los secuestros, violaciones y otras
cosas más.
Inició sus primeros trabajos
siendo director de una escuela, en
donde se daba cuenta de las
necesidades que sufría cada uno de los
estudiantes y cómo estas repercutían
en sus aprendizajes, percibiendo que el
principal factor era el del hambre, cosa
que él mismo había vivido cuando era
pequeño, de esta manera el entendía la
importancia que se le debe tener a que
los niños y las niñas asistan a la
escuela bien alimentados y con las
mejores oportunidades, puesto que ello
les permitirá adquirir mejor los
aprendizajes.
Desde pequeño él tenía un
interés especial por la escritura, en el
proceso de cómo iba adquiriendo
nuevas palabras, asimismo se interesó
en el lenguaje, en cómo éste se apropia
del hombre. En la lectura habla sobre la
vocación, diciendo que todos nacen con
una y que hace lo que se denomina el
“humanismo” argumentando que todos
vienen al mundo para ejercer una
misión.