18.11.2012 Views

Génesis 27:3 - Haas Automation, Inc.

Génesis 27:3 - Haas Automation, Inc.

Génesis 27:3 - Haas Automation, Inc.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Athens Archery se ha labrado una gran reputación en el mundo de<br />

la caza mayor y el tiro deportivo gracias a la potencia y a la precisión de sus<br />

arcos, y a su gama de accesorios prácticos y elegantes. La empresa afincada<br />

en Rochester (Indiana), que fabrica prácticamente todas las piezas de los<br />

arcos en sus fresadoras y tornos CNC de <strong>Haas</strong>, también recibe pedidos de otros<br />

fabricantes de arcos, que les encargan producir componentes especiales.<br />

“Nos hemos ganado a pulso estar donde estamos ahora”, dice Jason Hudkins,<br />

fundador y presidente de la empresa. Pero no siempre ha sido así. Hace<br />

tres años, este hombre hecho a sí mismo vio cómo su anterior negocio se<br />

desmoronaba.<br />

“Siempre se me ha dado bien construir cosas”, cuenta. “Mientras los<br />

demás niños jugaban a béisbol, yo estaba construyendo algo o haciendo<br />

dibujos en tres dimensiones. Siempre he trabajado en el mundo de la<br />

ingeniería, desde mi primer empleo a principios de los noventa hasta que<br />

fundé Lyntech Engineering con mi mujer Amanda en 2002.”<br />

Al principio, se dedicaban a diseñar y fabricar máquinas, y también<br />

hacían trabajos de consultoría. Sin embargo, la economía estadounidense<br />

seguía en una situación difícil después del 11-S, así que empezaron a<br />

mecanizar piezas para clientes del sector de la automatización, como Toyota<br />

y John Deere. Fue entonces cuando Jason compró su primera máquina <strong>Haas</strong>.<br />

“Fue una VF-3, y por entonces no tenía ni idea de cómo se programaba un<br />

código G”, ríe. “En realidad, ¡no sabía ni lo que era un código G!”<br />

“Yo no he ido a la universidad”, reconoce Jason, “pero soy tenaz: para<br />

mí, el fracaso no es una opción. Allí estaba yo, con mi primera máquina CNC,<br />

sin saber cómo funcionaba, sin ningún operario para usarla y con sólo unas<br />

semanas de tiempo para aprender a manejarla. Así que saqué el manual y,<br />

como los controles <strong>Haas</strong> son tan sencillos, aprendí lo que necesitaba saber en<br />

sólo tres o cuatro días. Así de fácil. En poco tiempo, ya ni siquiera tenía que<br />

mirar los botones para pulsarlos.”<br />

La empresa empezó a crecer bastante rápido. Producían una mezcla<br />

de tiradas largas de piezas sencillas y de series más cortas de componentes<br />

complejos, como el alojamiento de la dirección por cremallera del Toyota<br />

Tundra, por ejemplo. “Llegamos a hacer más de ocho millones de piezas en<br />

este taller”, recuerda Jason.<br />

Con el aumento del trabajo, tuvimos que invertir en máquinas nuevas,<br />

y así llegó el torno <strong>Haas</strong> SL-10. “Un poco antes, una empresa del sector de la<br />

automoción nos había aceptado un presupuesto para un encargo enorme,<br />

pero todavía no teníamos la maquinaria necesaria. Pero como los márgenes<br />

eran decentes, compramos el SL-10 para poder hacer el pedido. La tienda<br />

de la fábrica <strong>Haas</strong> (HFO) nos trajo la máquina enseguida y pasé de aprender<br />

programas sencillos a mecanizar mis propias piezas al cabo de dos o tres días<br />

de recibir el equipo. También encargué dos <strong>Haas</strong> SL-30 y un VF-2, que tuve<br />

listos para usar en siete días.”<br />

En 2007, la empresa mecanizaba una gama amplia de piezas de<br />

aluminio y hierro fundido para clientes importantes, y había ganado el<br />

contrato de un proyecto de ocho años de duración para un proveedor de<br />

componentes de automoción. “Las perspectivas de futuro eran muy buenas”,<br />

rememora Jason. Pero, entonces, en octubre de 2007, el trabajo empezó a<br />

bajar.... y rápido.<br />

“Los fabricantes japoneses habían sido los únicos que mantenían<br />

cierta estabilidad, así que cuando las cifras de Toyota también empezaron a<br />

disminuir, supimos que teníamos un problema grave.” Y vaya si fue grave. El<br />

negocio se vino abajo a en un abrir y cerrar de ojos; nadie lo había previsto.<br />

“Los pedidos para el sector de la automoción nunca se recuperaron”, dice<br />

Jason. “Pasó de ser el 90% de nuestra actividad al 0% actual. No dormíamos<br />

por las noches. Teníamos un montón de máquinas fantásticas… con sus<br />

costes fijos. . . Con la misma rapidez que crecíamos, perdíamos volumen de<br />

trabajo. No sabíamos qué hacer.”<br />

La inspiración le llegó el 15 de noviembre de 2007, mientras estaba<br />

sentado en un asiento de árbol de los que usan los cazadores. “Era durante la<br />

temporada de caza, y en esa época del año voy mucho al bosque, me ayuda<br />

a pensar. Esos bosques son como mi segunda iglesia”, explica Jason, “son un<br />

buen lugar para meditar. Fue una época muy dura; teníamos ocho bocas<br />

que alimentar: seis hijos y dos niños de acogida. Y además me sentía muy<br />

responsable por los cincuenta empleados de la empresa. Mi mujer es una<br />

mujer muy religiosa, siempre rezaba por ellos y por la empresa. Así que aquel<br />

día yo también me puse a rezar. Entonces, justo cuando dije “amén”, miré el<br />

arco que tenía en la mano y lo vi claro. Me di cuenta de que no había nada en<br />

él que no pudiéramos fabricar.”<br />

Cuando regresó a la oficina, ya había decidido fundar Athens Archery.<br />

“Recuerdo entrar y dejar el arco encima del escritorio de Mike –nuestro<br />

ingeniero de entonces– y decirle: ‘Nos dedicaremos a hacer arcos’. ¡Me miró<br />

como si me hubiera caído de un árbol! Luego se lo dije a todos los del taller<br />

y también pensaron que me había vuelto loco. Pero yo sabía que teníamos<br />

que reinventar el negocio. Hasta entonces, siempre habíamos sido pasajeros<br />

en un tren que conducían otros. Así que decidí que si había que estrellarse, lo<br />

haría conduciendo yo. ¡El 15 de diciembre de 2007 ya fui a cazar con mi primer<br />

prototipo de arco Athens!”<br />

CNC MACHINING | 5

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!