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InternacionalInternacionalLa herencia del perro y losabsurdos del capitalismoAzucena del CampoSe murió <strong>la</strong> señora Leona Hemsley y le heredó asu perro 12 millones de dó<strong>la</strong>res. ¿Qué va a hacerel perro con tanto dinero? Mientras milesde millones de seres humanos se mueren de hambrey enfermedades, uno de ellos, o dos, puesto que <strong>la</strong>respetable señora tenía marido aunque éste se le habíamuerto hacía 10 años, acumu<strong>la</strong>n 4 mil millonesde dó<strong>la</strong>res para gastarlos en artículos tan indispensablesy urgentes como joyas por 485 mil dó<strong>la</strong>res,una pista de baile de mármol construida sobre unaalberca por 1 millón, un reloj de p<strong>la</strong>ta por 45 mil, unamesa de caoba para jugar cartas por 210 mil y objetosde jade para alegrarse <strong>la</strong> vista por una suma tan módicacomo lo es medio millón de dó<strong>la</strong>res.No se crea ni que invento para impresionar ni queme metí a <strong>la</strong>s intimidades de <strong>la</strong> señora -aunque aceptoque me gusta el chisme-, pues todo lo dicho aparecióen importantes periódicos y noticieros y hasta enlibros. Lo del perro que es maltés y se l<strong>la</strong>ma Trouble(problema) es estrictamente cierto y se supo ahoraque <strong>la</strong> señora colgó los tenis y se dio a conocer públicamentesu testamento; lo de <strong>la</strong>s otras compritassólo se vuelve a refrescar pero ya se sabían todos esosdetalles y muchos más, desde que <strong>la</strong> señora fue juzgaday sentenciada a cuatro años en chirona y a pagar7.1 millones de dó<strong>la</strong>res por evadir el pago de impuestos.También se sabía, y se sabe, que <strong>la</strong> distinguidaseñora Hemsley no era ni con mucho de los primeroslugares entre los más acauda<strong>la</strong>dos del mundo, pues 4mil millones de dó<strong>la</strong>res acumu<strong>la</strong>dos apenas le alcanzabanpara un modesto lugar número 369 entre ellossegún <strong>la</strong> revista Forbes que se ha dedicado a e<strong>la</strong>borar<strong>la</strong> macabra lista.¿Qué onda? ¿Qué lecciones sacamos? Nos ilustramoscon un ejemplo real, cómo el sistema de producciónen el que estamos inmersos es un sistemaque tiene como base, como motor que lo mueve y loimpulsa, <strong>la</strong> obtención de ganancias y en qué extravaganteforma se gastan. Nos ilustramos también en elsentido de que quienes obtienen esas ganancias noson los más trabajadores, inteligentes, instruidos ymorales, sino simple y sencil<strong>la</strong>mente quienes tienenen propiedad exclusiva los medios indispensablespara <strong>la</strong> producción: <strong>la</strong>s tierras, los edificios, <strong>la</strong>s materiasprimas, <strong>la</strong>s máquinas, etc., y que los poseenprecisamente porque privan de ellos a <strong>la</strong> inmensamayoría de sus congéneres.El ejemplo de Leona Hemsley nos sirve tambiénpara que comprendamos por qué los gastos indispensablespara <strong>la</strong> conservación y desarrollo del génerohumano están reducidos a su mínima expresión. Enefecto, los gastos en salud, educación, vivienda, infraestructuraurbana y otros, no dependen de <strong>la</strong> riquezaproducida por el hombre, sino que dependen,por una parte, de lo que de su magro sa<strong>la</strong>rio se lesarranque por fuerza a los mismos trabajadores y de loque, después de miles de resistencias y triquiñue<strong>la</strong>s,los capitalistas acepten aportar en forma de impuestos.La ganancia social, valga el término, no se usaen beneficio del género humano, sino en beneficio deunas cuantas Leonas Hemsleys.¿Qué más? Que para garantizar <strong>la</strong> concentraciónde <strong>la</strong>s ganancias en poquísimas manos se ha elevadoa sagrado el derecho a <strong>la</strong> propiedad privada de los mediosde producción y, con ello, para aumentar su acumu<strong>la</strong>ción,el derecho a heredarlos. No se crea que elderecho a <strong>la</strong> propiedad privada tiene como propósitoprincipal proteger <strong>la</strong> miserable ropa del trabajador,sus enseres de cocina, su televisor, ni siquiera su terrenoo su casa cuando llega a tenerlos, sino que estádedicado a salvaguardar <strong>la</strong> acumu<strong>la</strong>ción de capital y,como se ve con el ejemplo citado, <strong>la</strong>s excentricidadesde los capitalistas. La libertad en <strong>la</strong> propiedad, <strong>la</strong> libertadde heredar, <strong>la</strong> libertad en <strong>la</strong> vida diaria, estánen función del capital poseído: a mayor capital, mayorlibertad; a menor capital, menor libertad; a nadade capital, nada de libertad. Ésa es <strong>la</strong> cruda realidad.En Estados Unidos, país en el que acumuló su fortunaLeona Hemsley, hay 5 millones más de pobresque hace seis años y el ingreso promedio de sus habitanteses mil dó<strong>la</strong>res inferior al que había en el año2000. ¿Más datos? En <strong>la</strong> pobreza viven 36 millones ymedio de norteamericanos, 47 millones carecen totalmentede servicios públicos de salud y el númerode niños sin ningún tipo de seguro social asciende a8.6 millones. Todo eso sin tomar en cuenta que se lesreventaron los diques por mal estado y se les inundó<strong>la</strong> ciudad de Nueva Orleans, les tronó una tubería devapor en Nueva York y se les cayó un puente llenode vehículos en Minnessota, es decir, que su infraestructuraurbana se les está desmoronando. ¿Qué másveremos todavía?Quienes tienen el poder económico y sus empleadosque ejercen el poder político no sólo acumu<strong>la</strong>ncantidades inmensas de dinero, beneficiándose delsistema, sino que nos han hecho creer que no existeotra manera de impulsar <strong>la</strong> producción que el afán delucro, el egoísmo y <strong>la</strong> mezquindad, que ésas son <strong>la</strong>sMientras unos heredan a sus perros, otros no tienen para vivir.únicas motivaciones que tiene el ser humano. Perono es cierto. La co<strong>la</strong>boración y el aprovechamientocolectivo de <strong>la</strong> enorme riqueza que ya se produce en<strong>la</strong> actualidad son muy superiores. El sistema vigentenos está llevando a que existan millones de sereshambrientos, enfermos, ignorantes y encadenados altrabajo embrutecedor, y nos está arrojando a <strong>la</strong> destruccióndel p<strong>la</strong>neta, cuyo calentamiento global no sedebe a <strong>la</strong> producción en general, sino a <strong>la</strong> paranoiapor obtener ganancias. Y todo ¿para qué? Para queun producto del sistema pueda dejarle 12 millones dedó<strong>la</strong>res a su perro.10 de septiembre de 200710 de septiembre de 2007

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