11.07.2015 Views

del volcán Chinyero - ACEC. Viera y Clavijo

del volcán Chinyero - ACEC. Viera y Clavijo

del volcán Chinyero - ACEC. Viera y Clavijo

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

HISTORIA DE LA GEOLOGÍAEl centenario de la erupción<strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>, en TenerifeEl 18 de noviembre de 2009 se cumplen 100 años de la erupción <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>, que sacudió la isla deTenerife después de 111 años de tranquilidad eruptiva. Ha sido la última erupción histórica que se ha producidoen Tenerife y la primera erupción canaria con documentación fotográfica y estudios de carácter científico. Laerupción fue sólo una noticia nacional y pasó casi desapercibida en la prensa mundial, salvo en Gran Bretaña,por las vinculaciones económicas y comerciales que mantenía con el archipiélago canario.TEXTO | José Luis Barrera, vulcanólogo, biotita@arrakis.esFOTOGRAFÍAS | Diversas fuentesPalabras clave<strong>Chinyero</strong>, Tenerife, Canarias, volcanes,vulcanología, erupciónEl 18 de noviembre de 1909, la isla deTenerife quedó sacudida por una nuevaerupción <strong>volcán</strong>ica en su territorio. Laimpresión fue nueva para toda la poblaciónisleña, pues la última erupción habida en laisla, el <strong>volcán</strong> Chahorra o Narices <strong>del</strong> Teide,se había producido en 1798, ¡111 años antes!La erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> (figura 1) fue la queemitió el menor volumen de lava de todas laserupciones históricas que se han registradoen las islas Canarias. Tal vez sea porque laerupción fue corta en el tiempo, ya que sóloduró diez días. Así, la superficie cubierta porla lava expulsada fue de 2.379 hectáreas.Esta erupción no ha sido la única en tiemposhistóricos que se ha producido en elarchipiélago; desde el siglo XIV otras 17erupciones han recordado a la poblaciónque el vulcanismo de Canarias está activo.Figura 1. Foto antigua de la erupción <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>. Fuente: Centro de Fotografía Isla de Tenerife.Las erupciones históricas en las islasCanariasEl archipiélago canario ha tenido 17erupciones históricas más o menosdocumentadas, repartidas en tres islas:Lanzarote, Tenerife y La Palma. Hay tresdudosas, no incluidas en la relación, que secree se produjeron en la zona <strong>del</strong> Taoro,Tenerife, que carecen de testimonios fiablesy se fundamentan sólo en aspectosgeomorfológicos de conservación y entradiciones de navegantes. Hay también otrasdos dudosas, no incluidas en la relación,como son la de 1793 en El Hierro, quealgunos autores la relacionan con el <strong>volcán</strong>de Lomo Negro o una erupción submarina enEl Golfo, y la de 1492, que se cita en el diariode Colón y que diversos autores la identificancon el <strong>volcán</strong> Montaña Reventada.En la tabla 1 se relacionan todas ellasordenadas por años, indicando tambiénel nombre <strong>del</strong> <strong>volcán</strong>, la isla, la fecha y laduración.Las erupciones históricas en TenerifeEn la isla de Tenerife hay cuatro erupcioneshistóricas bien documentadas. En la figura 2se puede ver la distribución de las mismasjunto a la fisura <strong>del</strong> Taoro, cuya veracidadestá en duda. Ninguna de las erupcionescausó víctimas mortales, pero sí grandesdaños. Así, la erupción <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> deGarachico (Arenas Negras) o <strong>volcán</strong> deTrevejo, ocurrida el 5 de mayo de 1706,produjo daños materiales considerables,destruyendo buena parte de la villa y elpuerto natural de Garachico, por entoncesel más importante de la isla. Crónicas de laépoca dejan clara la magnitud <strong>del</strong> desastre:“El espacio <strong>del</strong> puerto que quedó lleno <strong>del</strong>ava tenía más de 400 varas de ancho y 360de largo, quedando sólo uno incómodo de 140Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 3


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFETabla 1. Relación de las erupciones históricas ocurridas en las Islas CanariasAño Nombre Lugar Fecha y duración1470 o 1492 Volcán Tacande o Montaña Quemada Cumbre Vieja (La Palma) ?1585 Volcán Tahuya Cumbre Vieja (La Palma) 19 mayo-10 agosto (84 días)1646 Volcán Martín o de Tigalate Cumbre Vieja (La Palma) 2 octubre-21 diciembre (82 días)1677 Volcán de San Antonio Cumbre Vieja (La Palma) 17 noviembre-21 enero (66 días)1704/1705 Fisura de:– Volcán de Sietefuentes Dorso Cañadas (Tenerife) 31 diciembre-4 ó 5 enero (5 días)– Volcán de Fasnia ladera sur de Izaña 5 enero-16 enero (12 días)– Volcán de Arafo Dorsal de Pedro Gil 2 febrero-27 marzo (54 días)1706 Volcán de Arenas Negras Garachico (Tenerife) 5 mayo-13 junio (40 días)1712 Volcán <strong>del</strong> Charco Cumbre Vieja (La Palma) 9 octubre-3 diciembre (56 días)1730/1736 Timanfaya Sector central (Lanzarote) 1 septiembre 1730-16 abril 1736 (2.055 días)1798 Volcán Chahorra (Narices <strong>del</strong> Teide) Laderas Pico Viejo (Tenerife) 9 junio-14 y 15 septiembre (99 días)1824 Fisura de: Sector central (Lanzarote) 31 julioVolcán de Tao (Clérigo Duarte)29 septiembre-5 octubreVolcán Nuevo <strong>del</strong> Fuego o Chinero16 octubre-17 octubreVolcán de Tinguatón(85 días)1909 Volcán <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> Dorsal de Abeque (Tenerife) 19 noviembre-27 noviembre (10 días)1949 Volcán de San Juan Cumbre Vieja (La Palma) 24 junio-30 julio (47 días)(Nambroque, Duraznero)1971 Volcán <strong>del</strong> Teneguía Cumbre Vieja (La Palma) 26 octubre-18 noviembre (24 días)Volcán de Garachico1706El <strong>Chinyero</strong>1909El Chahorra oNarices <strong>del</strong> Teide1798Fisura <strong>del</strong> Taoro¿1430?Figura 2. Mapa de situación de las erupciones históricas en la isla de Tenerife.Santa Cruzde TenerifeFisura de Siete Fuentes-Fasnia - Güimar1704-1705El <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong> selocaliza geográficamenteen la parte noroccidentalde la isla de Tenerife,al noroeste <strong>del</strong> Pico Viejoy al este de ValleSantiago, en el términomunicipal de Santiago<strong>del</strong> Teidevaras por lo más ancho, cuando antes teníamás de 500 brazas. Y su boca de entrada, queantes tenía más de 300 brazas, en el día sólotiene 80”.La destrucción <strong>del</strong> puerto de Garachicoconvirtió al puerto de la Cruz en el principalde la isla en aquella época. El auge de lospuertos de La Orotava y de Santa Cruz hizoque Garachico perdiese importancia comoreferencia portuaria y mercantil.Localización <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>El <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong> se localizageográficamente en la partenoroccidental de la isla de Tenerife, alnoroeste <strong>del</strong> Pico Viejo y al este deValle Santiago, en el término municipalde Santiago <strong>del</strong> Teide. Tiene una altura de1.560 metros sobre el nivel <strong>del</strong> mar.Desde el punto de vista geológico, el<strong>Chinyero</strong> pertenece al eje eruptivo (rift)4 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍA*Volcán <strong>Chinyero</strong>Figura 3. Mapa geológico simplificado de la isla de Tenerife.Depósitos recientesErupciones históricasErupciones post CañadasErupciones de los ejes de riftEdificio CañadasEdificio DorsalEdificios antiguosErupciones de relleno <strong>del</strong> vallede La OrotavaEl primer terremotopreeruptivo se produjoen el municipio de Icod <strong>del</strong>os Vinos el 8 de juliode 1908 y se repitieronen varias ocasiones en lamisma zona y en la deGuía de Isora, sobre todoese mes de julio,en agosto y el 9 deseptiembrenoroeste de la isla de Tenerife, que haestado activo desde hace unos 500.000años, y sobre el que han surgido grancantidad de volcanes monogénicos detipo estromboliano que se alinean segúnel mismo. En la figura 3 está sintetizadala geología de Tenerife con la situación<strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>.La erupción surgió en la base de otro<strong>volcán</strong> preexistente con forma deherradura, abierto hacia el sur. Podríadecirse que la fisura eruptiva que seinstaló en su base fue una posiblereactivación <strong>del</strong> mismo.Así fue la erupciónEn la figura 4 está representada lacartografía geológica de las coladas que,desde la boca de salida <strong>del</strong> cráter, seextendieron principalmente en sentidooeste hacia Valle Santiago rodeando otrosconos <strong>volcán</strong>icos estrombolianospreexistentes, como Montaña de la Cruz,Poleos y Montaña Aguda.Síntomas preeruptivosDesde mucho antes de que se produjera laerupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>, hubo bastantesismicidad en la zona donde salió, quepersistió después de terminada la erupción,aunque con menor intensidad y frecuencia.El primer terremoto preeruptivo se produjoen el municipio de Icod de los Vinosel 8 de julio de 1908, ¡16 meses antesde la erupción!, y se repitieron en variasocasiones en la misma zona y en lade Guía de Isora, sobre todo ese mes dejulio, en agosto (uno muy fuerte seprodujo el día 4) y el 9 de septiembre.Especialmente intensos fueron los sismos<strong>del</strong> 4, 17, 24 y 30 de noviembre de esemismo año. La máxima actividad fue de14 sismos en dos horas, que se sintieronen La Orotava.Durante el año 1909 se siguieronproduciendo terremotos los meses deenero, marzo, abril, mayo (especialmentefuerte el <strong>del</strong> día 25), junio (intenso el<strong>del</strong> día 19 que agrietó varias de lasedificaciones de Icod), julio y octubre.Lógicamente, la frecuencia de los mismosfue creciendo hasta la semana anteriora la erupción, cuando los temblores eranya algo habitual los días 14, 15, 17 y 18de noviembre, hasta el mismo momento <strong>del</strong>a erupción. El alcalde de Icod de losVinos ya anunció al gobernador civil de laprovincia la existencia de estos temblores,cuando el 14 de noviembre le comunica:“Seis de la mañana de hoy sintiéronsevarios temblores durando cortísimosintervalos, siendo los últimos a las 7de la mañana. Sin consecuencias salvo lanatural alarma”. El día 15 vuelve a enviarotro telegrama en términos parecidos.La zona más afectada por los terremotosiba desde Icod hasta Guía de Isora. A las00:50 de la madrugada <strong>del</strong> 17 al 18 denoviembre, es decir, 14 horas antes de laerupción, se produjo uno de intensidadregular y otro, más fuerte, a la 1:30,siendo casi continuos a partir deentonces. Se acompañaron de ruidossubterráneos que llenaban de pánico alos vecinos de los pueblos cercanos, quecontinuaron sobrecogidos toda la mañana<strong>del</strong> día 18. Ese mismo día los terremotosse oían en Santa Cruz, donde, en unprimer momento, se creyeron que erancañonazos de barcos.A pesar de tantos precursores sísmicos,la erupción cogió desprevenida a lapoblación, ya que no sabían ni cuándoni dónde podía ocurrir “algo”.En aquellos tiempos, y tras los dramáticossucesos de la Semana Trágica de finalesde julio de 1909, en Barcelona, elpresidente <strong>del</strong> Gobierno era el liberalSegismundo Moret que, de nuevo, habíaalcanzado la Jefatura <strong>del</strong> Gobiernosucediendo a Antonio Maura, al tiempoque desempeñaba la cartera deTierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 5


HISTORIA DE LA GEOLOGÍA(figura 6), y el libro de Brito (2003) sobre laErupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> a través de la prensa.También hay que tener en cuenta las noticiascomunicadas por los vecinos, las autoridadeslocales y los socorros públicos que, en parte,están recogidas en las fuentes anteriores.Uno de los testigos y cronistas de laerupción, ya que estuvo presente en ella,fue Antonio de Ponte y Cologán, ilustrefarmacéutico por entonces de La Laguna, quefue destacado por el Gobierno para hacer unestudio in situ de la erupción, recorriendotodos los lugares. Hay que señalar que con élllevaba un conjunto de palomas mensajerasque utilizó para enviar los mensajes de suobservación.La erupción comenzó a las 14:30 horas <strong>del</strong>jueves 18 de noviembre de 1909, en la Dorsalde Abeque, y cesó el 28 <strong>del</strong> mismo mes, diezdías después de su comienzo. Fue unaerupción fisural con cinco bocas eruptivasintermitentes de carácter estromboliano,alineadas este-oeste. Durante ese periodo,el <strong>volcán</strong> originó una gran columna depiroclastos incandescentes y gaseseyectados que alcanzó los 200 metros dealtura y podía observarse desde la islade La Palma. Los lapillis y cenizas se dirigieronprincipalmente hacia el este <strong>del</strong> <strong>volcán</strong>,empujados por los vientos dominantes. Laerupción construyó un cono de 80 metrosde altura sobre la base y 300 metros <strong>del</strong>ongitud. Imágenes de la erupción tomadasdurante la misma se pueden ver en la figuras7, 8, 9, 10 y 11.Jueves 18 de noviembre. Comienza la erupciónPrácticamente desde el inicio de la erupción,el <strong>volcán</strong> comenzó a arrojar lavas. La primeracolada que surgió se dirigió hacia el Tanque eIcod pero, al irse solidificando, sirvió de muroy se fue desviando en sentido sur hacia elLlano de los Asnos, situado entre el <strong>Chinyero</strong>y la montaña de Los Poleos. Según losestudios <strong>del</strong> vulcanólogo americano Perret, laprimera manifestación efusiva formó unpequeño cono que no emitió coladas y quequedó inactivo cuando se abrieron las tressiguientes que, en lugar de formar tres conosindependientes, formaron uno solo elongado.Ante esta situación, los vecinos de lospueblos <strong>del</strong> norte, que habían subido al<strong>volcán</strong> para conocer el suceso, regresarontranquilos. Pero la tranquilidad no durómucho, pues a las 12 de la noche el cura <strong>del</strong>Tanque llegó a Garachico anunciando que lalava se dirigía a su vecindario.Las autoridades de Icod, Garachico y LosSilos, poblaciones cercanas a la erupción,remitieron telegramas al gobernador de la isla,el señor Luengo, comunicando que la erupciónhabía tenido lugar en la montaña de lasCruces y solicitando coches y buques para laevacuación de la población que se encontrabamuy alarmada y asustada. Finalmente, laerupción no fue de gran magnitud, a pesar <strong>del</strong>a impresión y el pánico que causó a losvecinos en sus inicios. El mismo día de laerupción, el Gobierno Civil constituyó en SantaCruz el Gabinete de Crisis bajo la autoridad <strong>del</strong>gobernador civil, Manuel Luengo Prieto (sólounos meses antes, el 2 de enero de 1909,había sido nombrado secretario <strong>del</strong> Gobiernode la provincia de Canarias), y desde el primermomento se convirtió en el centro neurálgicodonde se recogieron las noticias <strong>del</strong>fenómeno. El primer telegrama anunciandouna posible erupción fue enviado a las 11:00horas <strong>del</strong> día 18 de noviembre, es decir, antesde que realmente se produjera la erupción, porel alcalde de Icod, que aseguraba que: “Segúninformes telefónicos, hay señales evidentes deerupción <strong>volcán</strong>ica, en las faldas sur <strong>del</strong> Teide,en la montaña de Las Cruces”. El gobernadorcivil y el capitán general se trasladan aGarachico para seguir los acontecimientos.Mientras, un telegrama enviado por el curade Valle Santiago (actual Santiago <strong>del</strong> Teide)relataba: “Cunde alarma en este pueblo porhaber explotado la montaña de Las Flores,que arroja materias incandescentes”, y, pocodespués, otro cable precisaba: “En MontañaCadena Sur y Chajorra hay grandesdetonaciones y humos. Señales evidentesde erupción en dirección norte. Convendría dosbuques en el puerto de San Marcos”. Denuevo es el alcalde de Icod, quien pide auxilio:“Volcán sigue en aumento, sintiéndosetemblores subterráneos; grandísimasdetonaciones y columna de humo color rojizo,iluminada por resplandor”.Las evidencias, los avisos, telegramasy comunicaciones de alarmas por el humo,la lava, los sonidos y los temblores sesucedieron continuamente desde múltiplessitios e instituciones, pidiéndose incluso dosbuques en la zona icodense de San Marcospara posibles evacuaciones. Hay quedestacar como curiosidad de la época que,en las diversas comunicaciones, se utilizarontambién palomas mensajeras.El comandante de la Guardia Civil de Icodexplicaba a las 16:30 <strong>del</strong> día 18 que un vecinodecía “haber visto humo y sentir ruidos sobremontaña Vencheque y la Botija, creyendosean de las sacudidas sísmicas. Los pueblosy los campos están alarmadísimos”, situaciónque se reproducía en Garachico.Figura 5. Portada de la crónica de la erupciónrealizada por Antonio de Ponte y Cologán.Figura 6. Portada <strong>del</strong> estudio de la erupciónrealizado por Fernández Navarro.Desde los primeros momentos, lasautoridades <strong>del</strong> Gobierno en Madridestuvieron informadas puntualmente<strong>del</strong> acontecimiento a través de lascomunicaciones que enviaba el gobernadorde la isla. A las 19:30 horas el gobernadorenvía al ministro un telegrama anunciándoleTierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 7


HISTORIA DE LA GEOLOGÍAFigura 8. Foto de un episodio explosivo violento formando una columna piroclástica de gran altura.Figuras 10 y 11. Fotos de las columnas piroclásticas.todo lo visto y observado por ti. Lava aúncircunscrita a Llano Asnos, montañaen erupción <strong>Chinyero</strong> y no Flores como sedice. Sin peligro inmediato esos pueblos.Estén tranquilos”.Parece que Ponte, que sabía que la lava sehabía dirigido hacia el oeste (porque así lorelata en su artículo), no lo quiso decir enel telegrama.Figura 9. Foto de las bocas más orientales en actividad.Otro cable de aquel día 19 reflejaba lamagnitud de la erupción: “Anoche, a la 1,estando frente a la Punta de Hidalgo,empezamos a ver destellos de enormehoguera, hacia el norte de la isla, pudiendoapreciar que el lugar donde procedía secorrespondía a la zona superior deGarachico”.A las 20:00 horas salió de Santa Cruz Antoniode Ponte, pasando por La Laguna, condirección a Garachico. A las 12 de la nochese paró en La Rambla a cenar, donde seencontraba una gran cantidad de gente quehuía de Icod. Al llegar a Icod el pueblo estabacasi vacío. Continuó su viaje hacia Garachicodonde, al llegar, la oscuridad era absolutay casi no había gente en la calle, porque sehabían retirado a sus casas.Ponte, después de parar en casa de su padre,Gaspar, inició la subida al <strong>volcán</strong> a las 4 de lamadrugada <strong>del</strong> día 20, llegando a él cuandoestaba en plena erupción piroclástica yobservando que algunas lavas se habíandirigido hacia el Valle Santiago. Rápidamenteenvía a su hermano, que se quedó enGarachico, el siguiente telegrama: “ConfirmoEntre las observaciones que hace, ya con laprimera luz <strong>del</strong> día, destaca la presencia degran número de fumarolas que, al desprendersus gases en forma de penachos de humo,dejan cubiertos los materiales de algunossitios de eflorescencias blanquecinas. Elancho de la colada de uno de los ramales erade 200 metros; su espesor, dos metros sobrela tierra, y su velocidad 16 metros por hora.Había varios cráteres que vomitabancontinuamente grandes llamaradas, conproyecciones alternantes de coladas ypiroclastos; el ruido era enorme y una gruesacolumna de humo ascendía hacia el cielo.El viento dominante era <strong>del</strong> sur.En los siguientes recorridos que hace porla zona, observa una gran grieta de 20 cmde anchura y 27 metros de largo que,lógicamente, sería debida a los terremotosde la erupción. En el Llano <strong>del</strong> Trino, separadoTierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 9


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFEde los cráteres principales <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>,observa una pequeña montañita algo activaque, según testigos oculares, fue por dondeempezó la erupción, tal y como supuso Perret.En el Llano de las Asnos se encontró congrandes bombas calientes que tenían mediometro cúbico de volumen. En aquellosmomentos, el <strong>volcán</strong> tenía cuatro cráteresorientados de este a oeste.Sábado 20 de noviembre. Se realiza el primerinforme técnico de la erupciónSegún el relato de Antonio de Ponte, durantela madrugada, un ramal de la colada habíallegado hasta la Hoya de Bilma. Se oyeronfuertes detonaciones y, por la mañana,apareció un nuevo cráter que expulsaba sólolava cayendo en forma de cascada y quealimentaba un verdadero río de fuego. Éste,bordeando el costado derecho <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>,reforzaba el brazo de Los Partidos, el cual,estrecho el día anterior, se había ensanchadomucho y marchaba con bastante velocidad.Por la noche, los otros cuatro tenían lasiguiente actividad: el <strong>del</strong> este con igualcontinuidad, expulsión fuerte de gases yvapores e idéntica altura; el <strong>del</strong> oeste habíaaumentado en actividad, casi igualándoseal anterior; de los centrales, el de la derechaganó en altura y proyecciones ígneasintermitentes; el de la izquierda seguía congrandes y ensordecedoras detonaciones. Elconjunto se encontraba más violento y activoque la noche anterior.Las coladas, que ocupaban mayor espacio enel Llano de los Asnos, se distribuíanperfectamente en dos ramales, que se uníancasi a un kilómetro de distancia, reforzandoel brazo de Valle Santiago.El director <strong>del</strong> Instituto Técnico de Canarias(el único que había en el archipiélago),Cabrera Pinto (1855-1926), sensibilizado conla ocasión histórica que se le presentaba deestudiar una erupción en directo, dispuso estedía para realizar una visita técnica al <strong>volcán</strong>.La comisión estaba formada por él mismo,el catedrático de Historia Natural, AgustínCabrera Díaz, y el catedrático de Física yQuímica, José Font y Bosch. En palabras deCabrera Pinto: “… Realizaron sobre el terrenocuantas observaciones les permitieron losaparatos de que disponía el Instituto…”.El informe que elaboraron lo remitieron alA mediodía, en Garachicocontinuaban sin conocerel punto exacto <strong>del</strong>siniestro y, en Buenavista,la población ya estabasiendo atendida. A su vez,el alcalde de Icodsolicitaba que ingenierosy soldados fuerana Santiago para prestarauxilios urgentesMinisterio de Instrucción Pública en Madrid.Cinco días más tarde volvieron al <strong>volcán</strong>,dirigiendo una excursión con los alumnos<strong>del</strong> Instituto.Ese mismo día, el cura párroco de ValleSantiago sugiere que se consulte a losingenieros para ver si obstaculizando conpiedras las corrientes de lava podríandesviarse de este pueblo. También comunicaque los vecinos acampaban en MontañaAraza, en Buenavista, y reclaman auxiliosurgentes. La respuesta <strong>del</strong> gobernador civilno se hizo esperar y, a través <strong>del</strong> alcaldede Icod, comunicó al cura párroco que:“Inmediatamente envío vapor con fuerzaspara que les auxilien”. A las 22:00 horaszarpó el vapor “San Sebastián” con variasambulancias de La Laguna y Santa Cruz condestino a Buenavista.En muchos pueblos de Tenerife se inició unasuscripción pública para recaudar fondos enayuda de las víctimas.Domingo 21 de noviembreA las 8:20 horas, el alcalde de Icod envíaun nuevo mensaje: “El pueblo regresa sushogares; se han terminado las explosionesy han cesado temblores. El <strong>volcán</strong> sigue sucurso con cinco bocas abiertas que arrojangran cantidad de lava. Ésta divídese en dosbrazos y el que viene al norte puede bajar alTanque”. Inmediatamente comunicó que lalava se dirigía a Santiago y amenazabaacelerarse por el declive.Ponte llega al <strong>volcán</strong> a las 10:00 de lamañana y observa que el brazo <strong>del</strong> ValleSantiago está estacionado en las Hoyas deBilma, rellenándolas y ganando en espesor.Casi a la mitad, se había iniciado un nuevoramal con dirección al paso de Arguayo. A suvez, el cráter de poniente se había apagado.A mediodía, en Garachico continuaban sinconocer el punto exacto <strong>del</strong> siniestro y, enBuenavista, la población ya estaba siendoatendida. A su vez, el alcalde de Icodsolicitaba que ingenieros y soldados fuerana Santiago para prestar auxilios urgentes.Se pedía alimentos para los vecinos pobresde la montaña Araza y “fuerza para ayudar aldesalojo de habitaciones antes que lleguela lava”.Por la tarde, aprovechando que era domingo,acudieron varias autoridades con sus familias:alcalde de la Orotava, acompañado de suseñora, dos hermanas <strong>del</strong> señor marqués <strong>del</strong>Sauzal, Luis Llarena, esposo de una de ellas,Mariano Estanga, arquitecto de la capital,y Daniel Díaz Cueto, registrador de lapropiedad en La Laguna.Hacia media tarde, los cráteres extremos sehabían igualado en actividad; los centrales, yaconvertidos en uno con aumento de diámetro,continuaban con sus formidables estampidosy proyecciones irregulares. El conjunto estabamucho más violento y activo que la víspera, apesar de la inactividad <strong>del</strong> cráter <strong>del</strong> Poniente.Lunes 22 de noviembreAntonio de Ponte llegó a las 8 de la mañanay observó que el brazo de Los Partidosestaba paralizado, habiendo recorrido pocotrecho durante la noche, si bien ganó enanchura y espesor. También los cráteresaparecían desde allí con igual actividadque la víspera. El ramal de la derecha enMontaña Bilma amenazaba directamenteal pueblo de Santiago (Valle Santiago),marchando con alguna rapidez, granespesor y anchura de 250 metros; sólole faltaba un kilómetro para el descensode la pendiente. La distancia a la que seencontraba de Valle Santiago era tan sólode 3-4 km.10 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍAPor el otro lado de Montaña Bilma, el primerramal marchaba con alguna velocidad; suanchura de 150 metros y su espesor de 8,le faltaban unos 200 metros para la caída,siendo de presumir por la configuración <strong>del</strong>terreno que pronto se uniría a otro brazo que,más al poniente, caminaba hacia el Pago deLas Manchas que se encuentra a unos 8 km.Pasadas las 6 de la tarde, la situación <strong>del</strong><strong>volcán</strong> era: el cráter <strong>del</strong> este y los centralesestaban casi lo mismo que la víspera; encambio, el <strong>del</strong> oeste bastante disminuido.Los ríos de lava seguían corriendo, aunquemás ocultos por la consolidación de la capasuperior. El conjunto con alguna menorintensidad que la noche anterior, iniciándosesu descrecimiento. Sin embargo, en elapagado cráter <strong>del</strong> poniente se notaban, detiempo en tiempo, expulsiones violentasde humo rojizo y cenizas.Ese día, el alcalde de Guía solicitaal gobernador civil que “procédaseinmediatamente a construir poradministración carretera de Guía a Playa SanJuan”. Mientras, la sección de Cruz Rojacomunica que “se traslada a los inválidoshasta la zona de la playa”. En el <strong>volcán</strong> seabrió la quinta boca con gran estruendo.Los pocos conocimientos científicos eranahogados por el temor, la angustia y el pánicoante los continuos temblores y bramidossubterráneos que retumbaban en toda lacomarca <strong>del</strong> oeste de Tenerife durante estosdías.Según asomaron las primeras coladas sobreValle Santiago, los aproximadamente milvecinos que vivían en la zona decidieronabandonar sus hogares y trasladarse a laplaya de San Juan, donde se negaban aembarcarse en vista de la lejanía <strong>del</strong> peligro.Hacia esta fecha, el temor de la población seconvirtió en curiosidad, excepto para losvecinos de Valle Santiago, que aún veíancon temor aproximarse la lava por MontañaBilma. Muchos ciudadanos de la isla queríanir a ver la erupción y subían desde Icod en“romería” a la cumbre <strong>del</strong> <strong>volcán</strong>. Las casasnavieras, ante tal demanda, organizaronviajes especiales habilitando vaporespequeños. Por el contrario, esos días llegabana Santa Cruz decenas de evacuadosvoluntarios que habían decidido abandonartemporalmente sus casas.Durante la noche la erupción era visible desdeLa Gomera y la iluminación desde GranCanaria y Punta <strong>del</strong> Hidalgo (Anaga).Desde Madrid se recibe el anuncio de queel Gobierno ha decidido enviar a la zona uncrucero de guerra que permanecerá en lasaguas de Canarias el tiempo que durenlas circunstancias adversas.Martes 23 de noviembreSegún el testimonio de Antonio de Ponte,a primera hora de la mañana, la boca <strong>del</strong>poniente había entrado nuevamente enerupción, expulsando grandes cantidades <strong>del</strong>ava que se dirigía a la montaña de la Cruz. Elextremo <strong>del</strong> ramal de Santiago marchaba congran bravura (sic) por el fondo <strong>del</strong> barranco <strong>del</strong>os Codesos, cerca <strong>del</strong> caserío de LasManchas. La lava sobrepasó las últimascrestas de los bloques anteriores y asomabaya, precipitándose con gran velocidad por lapendiente <strong>del</strong> terreno, y se reparte en anchascintas de fuego (figura 12).Por la tarde, los cráteres primitivos habíandisminuido progresivamente su actividaden relación a las noches anteriores.Ese día, el jefe de brigada de Buenavistacomunicaba que se iban a las montañascercanas, recogiendo a las familias quedeseen marchar a Santa Cruz y prestandoauxilio moral y material a los que decidenquedarse. Los campesinos que se fuerona la capital tuvieron que ser atendidos con laayuda de las autoridades y vecinos, creandoun pequeño colapso logístico. También esemismo día se fueron a Tamaimo, donde eranmás urgentes los servicios de auxilio. De allíse marcharon con familias a la playa deSantiago, donde esperaron el vapor.Ese mismo día zarpó a la zona afectada elvapor “Machrie” a socorrer a las víctimas. Yaen esas fechas, muchos vecinos de la zona seconvencieron de que el peligro para lospueblos <strong>del</strong> norte había pasado y decidieronpermanecer cerca de sus casas.Miércoles 24 de noviembreA primera hora de la mañana, el cráterde poniente se había apagado. El ramalFigura 12. Foto de la situación en que quedó elramal de lava que se dirigía a Las Manchas.Autor: Marcos Brito.de Los Partidos había aumentado de espesora unos 17 metros, debido al estancamientosufrido por los relieves que tenía <strong>del</strong>ante.Tamaimo corría peligro por la dirección quetomaban las lavas.El alcalde de Buenavista informa de que elvecindario de Valle Santiago y los pueblosde Erjos, Los Partidos de Franquisy Ginovés se han acogido en las fincasCumbres de Bolico y Arana. Todo el ganadose encuentra reconcentrado y, como esnatural, sus dueños no los quierenabandonar. Este día zarpó el vapor“Esperancilla” con sacos de arroz, patatas,pescado salado, tocino y otros alimentos.Por la noche, aparecía el cráter <strong>del</strong>poniente completamente apagado y lostres primitivos arrojando lava con pocospiroclastos y ruido. Las bocas estaban encorrelación, pues cuando aumentaba laactividad de una, disminuía la de lasotras, lo cual se venía viendo enobservaciones anteriores. La lavacirculaba de un modo discontinuo y endistinta dirección, dependiendo de laactividad de la boca de la que procedíacada ramal, por lo que, en los extremosde éstos, y en diferentes puntos, seproducía gran consolidación de materialesque ofrecían resistencia a los nuevosimpulsos lávicos, retrasando su marchay salvándose así los poblados deLas Manchas, Santiago y Tamaimo. Laactividad <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> estaba reducida a unatercera parte.Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 11


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFEJueves 25 de noviembreA primera hora de la mañana, el ramalde Los Partidos continuaba activo,rellenando la depresión que hay en la basede la montaña de la Cruz. Hacia las 2 de latarde, la lava desbordó la depresión. Elcura de Valle Santiago agradece losvíveres enviados en auxilio de las gentes.Ya por la noche los cráteres <strong>del</strong> oestey central arrojaban una gran columnade humo negro con proyecciones lávicas detarde en tarde; el <strong>del</strong> Naciente estaba muydisminuido y el conjunto reducido a sumitad con relación a la víspera. Antoniode Ponte pronosticaba que la erupciónestaba apagándose y que no le quedabamás de dos días.Este día, a las 9 de la noche, salierondesde Laguna la excursión terrestreorganizada por el director <strong>del</strong> InstitutoGeneral y Técnico de Canarias, AlfonsoCabrera Pinto, compuesta por 86 personasentre profesores y alumnos, acoplados enunos 20 coches, a los que acompañabandos médicos y una ambulancia. Entre losprofesores se encontraba el catedrático deHistoria Natural y discípulo de FernándezNavarro, Agustín Cabrera Díaz (figura 13),que acababa de ser nombrado catedráticode dicha asignatura. La excursión seconvirtió en una clase práctica de geologíay otras ciencias, donde los profesoresexplicaban a los alumnos las ideas básicasde la corteza terrestre y <strong>del</strong> vulcanismo.Agustín Cabrera Díaz (1878-1961)Fue el primer canario que ocupó la Cátedra de HistoriaNatural <strong>del</strong> Instituto General y Técnico de Canarias. Enella permaneció como titular desde 1909 hasta 1948.Su dedicación al Gabinete fue vital para su crecimientoy mantenimiento <strong>del</strong> Gabinete de Historia Natural, realizandoimportantes y variadas adquisiciones de materialesde las distintas colecciones.Viernes 26 de noviembreA las 7 de la mañana llegó a Icod laexcursión <strong>del</strong> Instituto de La Laguna,con su director al frente. La subida al<strong>volcán</strong> la hicieron en caballerías desde laplaza de la Constitución <strong>del</strong> mismo pueblo.Por la mañana, el ramal de lava queamenazaba Los Partidos había avanzadomuy poco en relación a la superficieFigura 13. Retrato de Agustín Cabrera. Autor:Mariano de Cossío. Óleo/lienzo, 110 x 89 cm.Hacia 1945. Colección Instituto Canarias CabreraPinto, La Laguna. Tenerife.Figura 14. Explosión semivulcaniana al finalde la erupción.de la hondonada de la base de la montañade la Cruz. Los cráteres sólo arrojabanhumo blanco con pequeños espasmosde lava. A las 12 <strong>del</strong> mediodía, ya casi nohabía actividad. Pero las ayudas seguíanllegando. El director comisionado de CruzRoja comunica desde Icod que: “Ayer salióembarcación de Puerto Santiago. Hoy mecomunican que han llegado víveresa Tamaimo”.La cantidad de visitantes, curiososy autoridades que acudían para ver elfenómeno era incesante, desbordandola capacidad <strong>del</strong> pueblo para atenderles.Incluso las colonias inglesa y alemana <strong>del</strong>a isla organizaban también excursiones al<strong>volcán</strong>; algunos iban hasta con aparatos.Sábado 27 de noviembre. Empiezael final de la erupciónEl decrecimiento de la actividad <strong>volcán</strong>icacomenzó el 27 de noviembre y todospreveían que la erupción llegaba a su final,aunque no todos los observadoresopinaban igual. Todavía el <strong>volcán</strong> producíaexplosiones espasmódicas de tiposemivulcániana (figura 14). Un comunicadourgente <strong>del</strong> gobernador civil al <strong>del</strong>egado <strong>del</strong>Gobierno en Las Palmas y a los alcaldes concomunicación telegráfica y telefónica decía:“Tengo muchísimo gusto en comunicarlesque la erupción <strong>volcán</strong>ica disminuyenotablemente su extensión y el cráter sólodespide humo. En los pueblos se ve renacerla calma y aumentan las familias quevuelven a sus hogares”.El alcalde de Icod explicaba que: “Por loque me aseguran, el fenómeno hadecrecido mucho. Según lo que observédesde la Montaña las Flores, todos losbrazos principales se dirigen sobre ValleSantiago, al que considero amenazadoa pesar <strong>del</strong> decrecimiento referido”. El edildesechaba que el <strong>volcán</strong> estuvieraapagándose: “… pues a las cinco de latarde empezó a arrojar grandes cantidadesde lava, aumentando considerablementehasta las siete de la tarde en que me retiréde la Corredera de Chasna y me aseguranque la corriente de lava que se dirige aEl Tanque tiene un aumento considerable”.Por contra, el sargento de la Guardia Civilen Valle de Santiago decía a las 19:00horas que: “La erupción estáextinguiéndose. Uno de los cráteres arrojahumo en pequeña cantidad y los demásestán apagados. La lava está estacionaday los habitantes de la villa pernoctanhoy en sus casas”. El alcalde de Icod sesumó a la buena nueva: “Me satisfaceparticipar a V.E. que las últimas noticiasson de que la erupción parece que tocaa su término, arrojando humo sólo unode los cráteres. Los demás se creenapagados”. También comunica algobernador las noticias que traía Antoniode Ponte <strong>del</strong> lugar de la erupción: “El señorPonte, que acaba de llegar lugar suceso medice lo siguiente: ‘Reconocido cráteranoche continúa despidiendo solamentehumos cada hora próximamente pequeñascantidades fuego por lo cual consideraterminado fenómeno sísmico, según habíaprevisto con anterioridad quedando portanto salvado todo peligro región…’”.El ayudante de Obras Públicas dirige algobernador este día un telegrama desdeGarachico, diciendo: “Parece haber12 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍAFue muy notable elservicio prestado por lasdotaciones de la Cruz Rojaal vecindario de lospueblos afectados por laerupción. En aquellostiempos, la Cruz Roja tenía94 hombres entre jefes,oficiales y otro personal;21 individuos de ellase trasladaron al lugarde la catástrofeFigura 15. Fumarolas en el cráter.terminado totalmente la erupción. Desdeprimeras horas hoy 27 cesó la lava,quedando paralizados todos los brazos”.Domingo 28 de noviembrePrácticamente, la actividad <strong>del</strong> <strong>volcán</strong>se había terminado. Sólo permanecíanfumarolas en el cráter como testigosúltimos de la erupción (figura 15).El alcalde de Garachico explicaba: “Elcráter continuaba anoche despidiendo cadahora pequeñas cantidades de fuego, por locual se considera terminado el fenómenosísmico”. Era la boca más meridional laque todavía quedaba semiactiva.Ya con el <strong>volcán</strong> inactivo, aunque con laslavas calientes, el gobernador envía alGobierno en Madrid la noticia <strong>del</strong> cese <strong>del</strong>a actividad diciendo: “Icod 28, 16:50. Envista de la mayor normalidad y creyendoinnecesaria la fuerza de la Guardia Civilque había enviado á los poblados conmotivo de las erupciones <strong>volcán</strong>icas, heordenado que vuelva á sus puestos. Elcapitán general regresará hoy á la capital.Acabo de llegar á este puerto (Garachico)que está completamente en su vidanormal, lo mismo que al pasar por Icod.La animación en las familias que regresaná sus casas es grande. Por las noticiasque me da de la erupción el doctor Ponte,puede darse por terminado el fenómeno,habiéndose paralizado todos sus brazospor carencia de lava. Subo al lugar de laerupción en unión <strong>del</strong> ingeniero y á miregreso comunicaré detalles. El capitángeneral debe llegar hoy á este puerto”.Martes 30 de noviembre. Una partede los auxilios regresan a sus basesEl 30 de noviembre, una vez confirmadoel cese de la actividad <strong>volcán</strong>ica, laBrigada de la Cruz Roja comenzó suregreso a su base. Fue muy notable elservicio prestado por las dotaciones de laCruz Roja al vecindario de los pueblosafectados por la erupción. En aquellostiempos, la Cruz Roja tenía 94 hombresentre jefes, oficiales y otro personal; 21individuos de ella se trasladaron al lugarde la catástrofe a las 10 de la noche <strong>del</strong>día de la erupción. Partieron <strong>del</strong> muelle deSanta Cruz, embarcando inmediatamenteen el vapor “Guanche” con dirección almuelle de San Marcos en Icod, cerca deGarachico. En la zona de la catástroferealizaron muy buenos servicios yfavorecieron al vecindario en el trasladode enfermos y ancianos impedidos quenecesitaban el auxilio inmediato, así comoatención sanitaria a varios de losexcursionistas y visitantes que seaccidentaron en el lugar.El ejército también realizó importantestrabajos de apoyo logístico y a losdamnificados por la erupción. Ordenabala circulación hacia el <strong>volcán</strong> y laseguridad de la zona. Evacuaba a lapoblación, llevaba alimentos e, inclusive,realizó un mapa esquemático de laerupción (figuras 16 y 17).A modo de resumenDe las cinco bocas que llegó a tener laerupción (para algunos testigos llegaron aser seis), al final se quedaron activas sólotres. El “cráter” tiene un borde superiorpolilobulado, indicativo de las diversasbocas que fueron surgiendo y que se ibanagregando y yuxtaponiéndose linealmente.El brazo de lava más lejano llegó a la zonade Las Manchas y, el día 27 de noviembre de1909, se paró prácticamente el avancede todos los ríos de tierra fundida. Despuésquedaron algunas fumarolas y todo fuevolviendo a la normalidad. En ningúnmomento el Teide dio signos de actividad.Los materiales emitidos fueron todoscoladas de tipo “aa” y nunca salieronTierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 13


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFELas pérdidas materiales de esta catástrofeconsistieron en la inutilización de unterreno poco productivo perteneciente alEstado, por el enterramiento ocasionadopor la caída de los piroclastos (figura 18).Los vecinos <strong>del</strong> Valle y de Las Manchassembraban estas pequeñas parcelasde centeno, pagando por él un pequeñocanon.Pasada la erupción llegan los científicosal <strong>volcán</strong>Figura 16. Mapa de situación <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>. Fuente: Archivo Intermedio Militar, Tenerife.Figura 17. Mapa esquemático de la erupción. Fuente: Archivo Intermedio Militar, Tenerife.coladas tipo “pahoehoe” o cordadas.La composición de las lavas fue muyhomogénea, siempre eran basaltospiroxénicos plagioclásicos, con fenocristalesmayores de augita y plagioclasa y menoresde olivino con texturas esqueléticas(Cabrera Lagunilla, 1981). La matriz escriptocristalina con zonas puntuales vítreas.Solamente en una zona surgieron (no sesabe en qué momento de la erupción)basaltos anfibólicos con anfíboles marronestotalmente reabsorbidos. Más detallespetrográficos y geoquímicos se encuentranen Cabrera Lagunilla (1981).Hay que mencionar en este punto quetodas las erupciones históricas deTenerife fueron siempre basálticas.La última erupción en Canarias anteriora la <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> fue la de 1824 enLanzarote, 85 años antes. En aquellostiempos no había en España científicoscon conocimientos vulcanológicoscapaces de realizar un informe científico.Lo más cercano a algo parecido a ungeólogo eran los naturalistas <strong>del</strong> RealMuseo de Ciencias Naturales (hoy MuseoNacional de Ciencias Naturales) pero queno pasaban por sus mejores momentospolíticos ni tenían experiencia geológica.Tampoco los precedentes <strong>del</strong> actualInstituto Geológico y Minero de Españaestaban establecidos, ni los de loscentros universitarios, tal y como losconcebimos hoy. Ante este panorama, laerupción de Lanzarote de 1824 solamentese quedó documentada por algunasautoridades locales (sobre todo por elcura párroco) y por los habitantes quefueron testigos presenciales.En la erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>, la cuestiónhabía cambiado un poco. Al iniciarse elsiglo XX, la ciencia española, que yahabía sembrado su semilla, se encontrabaen un marcado estado de latencia. Latradicional escasez de recursos públicos,el escaso desarrollo económico <strong>del</strong> paísy de las estructuras universitariashacían casi inviable la investigacióncientífica. A pesar de todo, la ciencia enEspaña encontrará algunos senderosesperanzadores. Una primera respuestaconcreta vino de la mano de la creaciónen 1900 <strong>del</strong> Ministerio de InstrucciónPública y Bellas Artes y, por lo querespecta a la ciencia, la fundación, en1907, de la Junta de Ampliación deEstudios, que marcó sin duda un antesy un después en la historia de la cienciaespañola. Comenzaba lo que se ha14 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍALucas Fernández Navarro (1869-1930)*Nace en Guadalajara, donde su padre era catedráticode Matemáticas en el instituto de la provincia. Estudióbrillantemente el Bachillerato en dicho centro. Setraslada a Madrid para estudiar Ciencias Naturalesen la Universidad Central. En 1890, sin terminar aúnla carrera, entró a trabajar en el Museo Nacional deCiencias Naturales, junto a Francisco Quiroga, en lascolecciones de mineralogía. Al año siguiente se licenciaen la universidad y en 1893 obtiene su doctorado.En 1898 saca por oposición la Cátedra de HistoriaNatural <strong>del</strong> Instituto de Almería que permuta en 1900por la de Soria. A finales de 1901 se le destina enComisión de Servicio al Museo de Ciencias para elarreglo de sus colecciones mineralógicas bajo ladirección <strong>del</strong> insigne geólogo Salvador Calderón. Enel año 1902 es nombrado, por oposición, catedráticode Cristalografía de la Facultad de Ciencias de la UniversidadCentral. Su primera visita a un terreno <strong>volcán</strong>icose produce en 1904, cuando estudia el vulcanismode Olot. Al año siguiente, se va a estudiar lasregiones <strong>volcán</strong>icas de Melilla, Chafarinas e isla deAlborán. En el verano de 1906 trabajó en la islade El Hierro y estuvo de visita en La Gomera, GranCanaria, Tenerife y La Palma. En el año 1907 estudióel <strong>volcán</strong> de Cofrentes. En el año 1909 vuelve al nortede Marruecos oriental. El Ministerio de InstrucciónPública le pensionó en 1911 para estudiar Petrografíay Vulcanología en Francia, con Lacroix, en el Museode París, y con Duparc en Ginebra e Italia. Ese mismoaño, al morir Salvador Calderón, desempeña, por acumulación,la Cátedra de Mineralogía descriptiva de laUniversidad Central. En 1920 asciende a jefe <strong>del</strong>a Sección de Mineralogía <strong>del</strong> Museo Nacionalde Ciencias Naturales. En 1922, el Ministerio de InstrucciónPública le nombró <strong>del</strong>egado para el XIII CongresoGeológico Internacional de Bruselas. En 1923es elegido académico de la Real Academia de CienciasExactas, Físicas y Naturales. Desde el año 1923al 1926 siguió viajando a Canarias para estudiarlas islas de Tenerife, Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura,preparando la excursión <strong>del</strong> XIV CongresoGeológico Internacional <strong>del</strong> año 1926 que se celebróen Madrid y de la que fue miembro de la organización.En 1924 fue nombrado vicepresidente de la Secciónde Vulcanología de la Unión Internacional deGeodesia y Geofísica. En 1927 se le nombra presidentede la Real Sociedad Española de Historia Natural.En 1928 se le declaró una enfermedad degenerativaque le afectaba al cerebro. En octubre de l930, alas seis y media de la tarde, falleció en Madrid a consecuenciade una parálisis general progresiva. FernándezNavarro también fue un gran especialista enHidrogeología y en el estudio de meteoritos.* Datos tomados de Barrera (en preparación).llamado históricamente la “Edad de Platade la ciencia española”.En 1909, el desarrollo geológico español,aunque modesto, ya comenzaba a sentarlas bases de un cuerpo de profesoresFigura 18. Árbol enterrado por la caída de piroclastos.Figura 19. Fotografía <strong>del</strong> vulcanólogo españolLucas Fernández Navarro.universitarios algo más especializados. Enel campo de la geología, los geólogos <strong>del</strong>a Facultad de Ciencias de la UniversidadCentral (Madrid) y el Museo Nacionalde Ciencias Naturales —institucionesíntimamente relacionadas en lo docentey en la investigación— ya tenían unapreparación más específica para abordaralgunos acontecimientos puntuales.Casualmente, entre el pequeño grupode geólogos de la universidad había unoque ya tenía alguna experiencia envulcanología: el profesor Lucas FernándezFigura 20. Fotografía <strong>del</strong> vulcanólogonorteamericano Frank A. Perret.Navarro (1869-1935) (figura 19).Fernández Navarro no fue el únicocientífico que acudió a Tenerife paraestudiar la erupción. A título particular, elcientífico norteamericano Frank A. Perret(1867-1943) (figura 20), un físicoreconvertido a vulcanólogo en 1904,también realizo observaciones en el<strong>Chinyero</strong>. En aquel momento, Perret,que estaba en contacto con la CarnegieInstitution de Washington para instalarun observatorio vulcanológico en Hawái,pero seguía en Italia, ya tenía algunasTierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 15


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFEexperiencias vulcanológicas adquiridas enItalia. Había llegado a Nápoles en 1904 y,por su afición a los volcanes, manteníauna relación muy estrecha con el director<strong>del</strong> Observatorio <strong>del</strong> Monte Vesubiano,el profesor Matteucci. De él aprendiómuchos aspectos vulcanológicos y, encambio, Perret le enseñó conocimientosde física que podían aplicarse a lapredicción vulcanológica. Ambos secomplementaban muy bien y formabanun buen equipo de vulcanólogos. Perretestaba en Nápoles cuando entró enerupción el Vesubio en 1906. De hecho,con sus aparatos físicos predijo laerupción, lo que asombró a Matteucci.Hizo un estudio tan minucioso y detallado<strong>del</strong> acontecimiento que llamó la atenciónen el mundo de la vulcanología internacionaly le sirvió para adquirir un gran prestigiocientífico.Fernández Navarro y Perret eran doscientíficos que se complementaban.Fernández Navarro era más geólogopetrólogo.Nunca había estado en unaerupción (y en la <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> tampocollegó a tiempo) pero conocía variosdominios <strong>volcán</strong>icos como Olot (Gerona),Melilla, las islas Chafarinas, la isla deAlborán y varias islas canarias. Tambiénera uno de los pocos geólogos españolesque sabía petrografía, lo que le facultabapara estudiar al microscopio la composiciónmineralógica de las lavas. Casualmente,con motivo de la erupción <strong>del</strong> Vesubiode 1906, escribió un artículo titulado “ElVesubio. Erupciones <strong>del</strong> periodo histórico.El Vesubio actual: sus materiales.Explicación moderna <strong>del</strong> volcanismo”, conel que trataba de llamar la atención sobreel riesgo <strong>volcán</strong>icoa la vez que ampliaba —aunque fuerabibliográficamente— sus conocimientosvulcanológicos.Por su parte, Perret, sólo dos años mayorque Fernández Navarro, tenía una sólidaformación física que este último no poseía;entendía el <strong>volcán</strong> como un puro aparatofísico, interesándole mucho todos losaspectos físicos relacionados con unaerupción, como los terremotos, lastemperaturas y todo parámetro físico queafectara al movimiento y expulsión <strong>del</strong>magma. Su experiencia vulcanológica eraFrank A. Perret (1867 -1943)Ingeniero eléctrico e inventor, se dedicó tardíamente a la vulcanología. Sus estudios en el Vesuvio, Etna, Estrómboli,Kilauea y Sakurashima le hicieron muy conocido entre la comunidad científica internacional y un referente entemas de vulcanismo. Su contribución a la vulcanología ayudó mucho a su desarrollo durante el siglo XX.Perret era un hombre complicado y solitario, que nunca se casó. En 1886 estudió Física en el Instituto Politécnicode Brooklyn. Un año antes había acudido intermitentemente al laboratorio de T. Edison. Su primera actividadprofesional estuvo relacionada con el desarrollo de instrumentación eléctrica para aplicaciones industrialesen la Elektron Manufacturing Company. Luego fue cofundador de una empresa especializada en motoreseléctricos y dínamos e inventó un motor eléctrico.En 1902 sufrió problemas nerviosos por estrés que le hicieron abandonar el trabajo. En mayo de ese mismo año,la erupción <strong>del</strong> Mt. Pelee le dejó tan impresionado que comenzó su interés por la vulcanología. Dejó la compañíay, en diciembre de 1903, se trasladó a la bahía de Nápoles para recuperarse. Lo primero que hacía al despertarseera subir al Vesubio. Allí conoció al director <strong>del</strong> observatorio vesuviano, el geólogo Rafael V. Matteucci,un entusiasta <strong>del</strong> Vesubio que trabajó en estrecha colaboración con él y <strong>del</strong> que aprendió mucha vulcanología.Con las observaciones sistemáticas que hizo realizó un patrón de comportamiento <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> que le sirvió parapredecir la erupción de 1906. Su monografía sobre esa erupción fue “la más gráfica y completa que hasta esemomento, y años posteriores, se publicó sobre ninguna erupción <strong>volcán</strong>ica”.En 1909, Perret, Jaggar, <strong>del</strong> MIT, y el profesor Daly, de Harvard, visitaron el Kilauea con la intención de instalarun observatorio permanente. En 1911, Jaggar y Perret establecieron la primera estación en el borde <strong>del</strong> cráter<strong>del</strong> Halema’uma’u.Su experiencia en vulcanología no pasó desapercibida y, así, a comienzos de la década de los años 10, Day,director <strong>del</strong> Geophysical Laboratory de Washington, expresó su interés en incorporarle como colaborador. Aunquenunca fue miembro <strong>del</strong> staff <strong>del</strong> Laboratorio, Perret permaneció en contacto con él hasta su fallecimiento.Perret llegó a Martinica en 1930, durante la erupción <strong>del</strong> Mt. Pelee entre 1929-1932. Su diagnosis y seguimientode la crisis contribuyeron a informar a la población en cada momento. Perret estuvo cerca de diez años en Saint-Pierre, donde fue muy querido, y donde construyó, en 1932, un museo vulcanológico como regalo a la población.Perret volvió definitivamente a los Estados Unidos en 1940, donde falleció en 1943 mientras preparaba un nuevolibro sobre volcanes. El libro fue finalizado por otros investigadores y lleva por título Volcanological Observations.Mildred Giblin comentoó el trabajo de Perret diciendo: “Las contribuciones de Perret son únicas en lo que respectaa que ningún otro vulcanólogo tuvo el tiempo y la oportunidad para hacer tantas rigurosas y variadasobservaciones sobre muchos tipos diferentes de volcanes en actividad”.ya amplia, pues había aprendido muchoen sus investigaciones durante la erupción<strong>del</strong> Vesubio, en 1906, y en sus excursionesal Etna y a las islas Eólias.De manera casual, otros científicos, comoel meteorólogo alemán Dr. Robert Wenger,llegaban en noviembre de 1909, unos díasantes de la erupción, para responsabilizarsede los trabajos de instalación <strong>del</strong>observatorio meteorológico alemán enLa Cañada de la Grieta. Wegner, que llegóa ser el director <strong>del</strong> Instituto Geofísicode Leipzig, ascendió al <strong>Chinyero</strong> el 26 denoviembre acompañado de Óscar Moritz.No consta que realizara algún informetécnico <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>.El estudio de Fernández NavarroEl 25 de noviembre de 1909, cuandoel <strong>volcán</strong> estaba aún en erupción, elMinisterio de Instrucción Pública ledesigna, a propuesta <strong>del</strong> director <strong>del</strong>Museo de Ciencias Naturales, IgnacioBolívar, y según lo informado por la JAE,para que estudie la erupción.Textualmente, la Real orden decía, entreotras cosas: “... S. M. el Rey ha tenidoa bien designar al catedrático de laUniversidad Central, D. Lucas FernándezNavarro, para que estudie la erupción<strong>volcán</strong>ica <strong>del</strong> Teide (sic), recoja materialesmineralógicos y geológicos, y obtengalas fotografías que juzgue necesariasen aquella región percibiendo por eseservicio la subvencionó de dos milpesetas” (ACN0281/14). En aquellosmomentos, Fernández Navarro era elcatedrático de Cristalografía de laUniversidad Central y, aunque se hizo todolo posible por acortar los trámitesadministrativos, Lucas llegó a la isla16 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍAÁngel <strong>del</strong> Campo Cerdán (1881-1944)Nació en 1881 en Cuenca, hijo único de un ingenieroagrónomo catedrático de Agricultura en el Institutode Segunda Enseñanza de la ciudad. Su padrefalleció poco antes de cumplir los cinco años. Elhecho de no tener hermanos y vivir sólo con su madrehizo de él un niño solitario e introvertido. En 1895obtuvo el título de Bachiller con Premio Extraordinarioen el Instituto de Cuenca.En 1901 obtuvo su grado de licenciado en Ciencias, secciónde Físico-Químicas, en la Universidad Central. Esemismo año comienza a dar clases como profesor deFísica General y, años más tarde, de Química General.En 1904 se convierte en socio fundador de la SociedadEspañola de Física y Química. En 1906 se doctoraen Ciencias Fisicoquímicas y, al año siguiente,es nombrado auxiliar interino <strong>del</strong> catedrático JuanFagés y Virgili. En 1908, la Junta de Ampliación deEstudios le beca para ampliar estudios en París sobreespectros de absorción y se convierte en una primeraautoridad española en el análisis químico mediantemétodos espectroscópicos. En 1911 es pensionadode nuevo para estudiar espectroquímica en París y enLieja. En 1912 crea la Escuela Española de Espectroscopia.Fue el descubridor de platino en mineralesen la sierra de Ronda y de germanio en blendas en losPicos de Europa. En 1915 obtiene por oposición eltítulo de catedrático numerario de Análisis QuímicoGeneral y Especial de la Facultad de Ciencias de laUniversidad Central. En 1924 fue <strong>del</strong>egado españolen el Congreso de la Unión Internacional de QuímicaPura y Aplicada, celebrado en Copenhague.Figura 21. Borrador <strong>del</strong> mapa geológico que realizó Fernández Navarro de la erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>.En 1925 el Gobierno le nombra vocal de la comisiónque debe llevar a cabo la construcción de un edificiodestinado al Instituto de Física y Química, que es costeadopor el International Education Board de la FundaciónRockefeller.En 1927 ingresa en al Real Academia de CienciasExactas, Físicas y Naturales. En uno de los congresosa los que asistió en París como representante español,el Gobierno francés le otorga la credencial y lainsignia de la Legión de Honor.Aunque el Gobierno republicano le sugiere exiliarse,prefiere quedarse en Madrid. Colaborador científicode la Segunda República española, tras la guerra civilfue depurado y posteriormente rehabilitado.En 1940 acumula las cátedras de Química Analítica yAnálisis Químico. En 1942 es nombrado vicedecanode la Facultad de Ciencias.Finalmente, en 1944, Ángel <strong>del</strong> Campo fallece enMadrid.de Tenerife cuando ya se había terminadola erupción.Fernández Navarro desembarcó en SantaCruz el 4 de diciembre, seis días despuésFigura 22. Mapa <strong>del</strong>ineado y completado <strong>del</strong> borrador de la figura 21.de que finalizara la fase más activa <strong>del</strong>a erupción. La prensa local se hizo ecode la llegada diciendo: “En el vapor correo‘Reina Victoria’ llegó ayer el ilustrecatedrático de Cristología (sic) de laUniversidad Central, D. Lucas FernándezNavarro, encargado por el Ministerio deInstrucción Pública de estudiar sobre elterreno la naturaleza y efectos <strong>del</strong> <strong>volcán</strong>abierto en la montaña de <strong>Chinyero</strong>”.También la prensa citó una carta queFernández Navarro había enviado alcatedrático de Historia Natural <strong>del</strong> Institutode Canarias, Agustín Cabrera, solicitandosu concurso como naturalista y conocedor<strong>del</strong> país y pidiéndole que reuniera al efectotodos los datos, observaciones yfotografías obtenidas.En Santa Cruz le recogió precisamentesu antiguo discípulo, Agustín Cabrera,que le acompañó en todas susexcursiones. Al llegar, las autoridadesde Tenerife le dieron todas lasfacilidades logísticas para susobservaciones, al igual que lo hicieronlos alcaldes de Garachico e Icod. Supresencia fue muy valiosa, pues Cabrerahabía estado dos veces en el <strong>volcán</strong>durante la erupción (primero en la visitatécnica y luego con los alumnos), y de élrecogió muchos testimonios de lamisma. Como la erupción habíaconcluido, se detuvo un día en hacer lospreparativos de la excursión antes de ira Garachico, donde instaló su basedurante los siete días siguientes.Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 17


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFEFigura 23. Microfotografías de los basaltosemitidos.Fernández Navarro subía muy tempranoal <strong>volcán</strong> y permanecía allí unas seiso siete horas haciendo mediciones.Posteriormente se trasladó a LosPartidos de Franqui para cartografiar laslenguas de lava que no había podido verdesde su otra localización. Allípermaneció tres días y se acercó a LosSilos donde se decía había ocurrido unaerupción submarina que no considerócierta; luego regresó por Garachicoa Icod, donde hizo todo el embalaje <strong>del</strong>material (378 kg de rocas). Desde allísalió para Santa Cruz con destinoa la Península. Su estancia se prolongóhasta el 1 de enero, aprovechando elviaje para hacer excursiones por Anaga,los Chupaderos y la cumbre de losBarriales, acompañado por su amigoAgustín Cabrera Díaz. La llegadaa Madrid fue el 5 de enero de 1910(Barrera, en prep.).Al no poder asistir a la fase activa de laerupción, Lucas tuvo que conformarse conrecoger las manifestaciones de los testigospresenciales, entre ellos la de AgustínCabrera. Fernández Navarro analizó la faseresidual, cartografió las lenguas de lava ylos conos de piroclastos (figuras 21 y 22)y muestreó los materiales emitidos.La repercusión que tuvo en el mundocientífico esta erupción fue muy grande. El 5de febrero, sólo un mes después de sullegada de Tenerife, Lucas dio unaconferencia ante la Real Sociedad Españolade Historia Natural (RSEHN) (FernándezNavarro, 1910) en la que expuso sucintamentelos primeros resultados de su investigación,mientras terminaba el estudio completo. Lamemoria de la erupción se publicó en 1911(Fernández Navarro, 1911) (figura 6) y en ellase describieron perfectamente, y de maneracronológica, toda la evolución dinámica y losfenómenos de la misma, desde losprecursores sísmicos hasta el recorridoy características de las lavas. También sereflejaron todos los parámetros físicosy químicos propios de una erupción <strong>volcán</strong>icacomo la temperatura, la dirección de losvientos, las fumarolas, etc., incluyendo,igualmente, una caracterización petrológicade los materiales emitidos, ilustrados confotografías microscópicas de las muestrasmás representativas (figura 23). Tambiénincorporó el concepto de “periodo de retorno”aplicable a las erupciones <strong>volcán</strong>icascanarias, realizando la tabla de erupcioneshistóricas y calculando aproximadamente cuálera el tiempo medio transcurrido entre ellas.A pesar de esta iniciativa, y en honor al rigorcientífico, ni siquiera ahora, que el registro haincorporado dos más (las erupciones de 1949y 1971 de la isla de La Palma), hay erupcionessuficientes para hacer un cálculo realista <strong>del</strong>periodo de retorno.El estudio que hizo Fernández Navarro <strong>del</strong>a erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> fue ejemplar.Incluso tomó muestras de los sublimadosblancos de las fumarolas que analizó sujoven amigo el químico Ángel <strong>del</strong> Campoy Cerdán que, en aquellas fechas, eraauxiliar de Análisis Químicos en laUniversidad Central. Del Campo nocomenzó a analizar las muestras hastaabril de 1911, cuando estaba trabajandosobre espectroquímica en el Laboratorio deInvestigaciones Físicas. Los resultados, conlas técnicas existentes, no fueron todo locompletos que esperaban los geólogos,según manifestó él mismo (Del Campo,1912). Por esa razón, al comenzar el veranode 1912, Ángel <strong>del</strong> Campo recogió másmuestras que guardaba Fernández Navarroen el Museo de Ciencias Naturales e hizoun análisis más completo que publicó eseaño. Era la primera vez que se analizabanestos productos <strong>volcán</strong>icos en España. Elinforme de Fernández Navarro fue el primerinforme científico de una erupción<strong>volcán</strong>ica en Canarias.Resulta sorprendente que, estando en laisla los mismos días que estaba Perret,no haga ningún tipo de mención a unaposible colaboración en la recogida deinformación. ¿Nadie le informó de supresencia? Un norteamericano cogiendopiedras y midiendo temperaturas en el<strong>Chinyero</strong> no podía pasar desapercibidopara ningún vecino o autoridad. Perodebió de ser así, ya que en su relato <strong>del</strong>a erupción (Fernández Navarro, 1911)dice textualmente: “… Además de lasnoticias de una porción de personas queno puedo enumerar, me han servido,sobre todo, los datos de mi compañerode excursión, Sr. Cabrera, úniconaturalista que visitó el <strong>volcán</strong> en superiodo activo, los días 20 y 26”. Sinembargo, se contradice cuando, en elmismo trabajo, hace mención a él.El estudio de PerretPerret viajó a Tenerife desde Italia. Hastaese momento, sus conocimientosvulcanológicos estaban centradosprincipalmente en el Vesubio y en algunasexcursiones a las islas Eólicas (Estrómboli yVulcano) y al Etna, todo un vulcanismo de unmarco geodinámico muy diferente al de unaisla oceánica como Tenerife.Perret salió de Nápoles el 26 denoviembre hacia Algeciras y de allía Cádiz. En el puerto gaditano embarcóhacia Tenerife, donde llegó el 4 dediciembre, el mismo día que llegóFernández Navarro. La prensa local sehizo eco de su estancia, aunque hastael día 13 de enero no publicó la noticia,añadiendo la información de que unperiódico francés, al enterarse de la18 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍApresencia <strong>del</strong> geólogo americano, le habíarequerido para que informara de losresultados de su investigación.Nada más llegar a Tenerife, se dirigióa Icod de los Vinos, base de la ascensión al<strong>volcán</strong>. En la isla recibió las atenciones <strong>del</strong>cónsul americano Solomon Berliner, queestaba destinado en Tenerife desde 1898.Los estudios que realizó Perret <strong>del</strong><strong>Chinyero</strong> los publicó en 1914 (Perret,1914), recogiendo información de laspublicaciones previas de FernándezNavarro y de las autoridades locales.La primera visita que Perret hizo al <strong>volcán</strong>fue el 5 de diciembre, cuando la lava yano corría pero estaba incandescente. Loprimero que observó al llegar al <strong>volcán</strong> fueque la fisura de salida de la erupciónestaba perfectamente alineada con la <strong>del</strong><strong>volcán</strong> Chahorra, la última erupción que sehabía producido en la zona, en 1798.También señaló que, como es normalen las erupciones fisurales en zonas <strong>del</strong>adera, la erupción progresó de arriba haciaabajo. Cuando se acercó a las lavascercanas al cráter vio que estaban aúnincandescentes aunque no fluían. Introdujoun pirómetro y las temperaturas que leyóestaban entre 750 y 860 °C, suponiendoque este calor no se debía a la meraconducción, sino a la obstrucción de losgases. Para demostrarlo, limpió una de lasfisuras obstruidas con una barra y losgases salieron; rápidamente la temperaturadescendió. Calculó que la velocidad mediade las lavas había sido de 19 m/s. Tambiénobservó que, aunque en el momento desalida las lavas tenían aspecto pahoehoe,durante su desplazamiento se rompíany adoptaban un sorprendente y llamativocarácter escoriaceo (lavas aa) que, segúnmanifestó, nunca antes había visto(lógicamente, este tipo de coladas no seproducen en el Vesubio, por lo que no lashabía visto antes). Estimó que habíansalido 15 millones de m 3 de lava esparcidospor una superficie de 2.150 millones de m 2 .Las fumarolas acompañantes a la erupciónlas dividió en dos tipos: primarias ysecundarias. Las primeras se encuentranasociadas a los canales eruptivos, mientrasque las segundas aparecen alejadas deellos.El turismo de la isla,mayoritariamente inglés, seretrajo ante las noticias tanalarmistas que daban losperiódicos ingleses en supaís sin una informaciónexacta <strong>del</strong> riesgo existenteDespués de estudiar la erupción eincorporar el relato (parece que cierto,aunque no comprobado) de que en la costase había producido una erupciónsubmarina, Perret llegó a la conclusiónde que la erupción había sido sólo unapequeña manifestación de la grancantidad de magma que debía de haberdebajo de la zona. Esta predicción parecemuy acertada porque, desde aquel añoy actualmente, los epicentros de los sismosen la isla de Tenerife se producenprecisamente en esa área. La conclusiónmás importante a la que llegó Perret iba enesa dirección, la de definir la erupción comouna erupción subterránea de gran extensióncon poderosos y profundos efectosexplosivos que, probablemente, descargarongran cantidad de magma dentro de fisuras,las cuales actuaron de “cámara reductora”.Los efectos de la erupciónDaños producidosLa erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> no produjovíctimas mortales. Solamente algunosanimales pequeños, como perros, fueronvíctimas mortales de los gases. Las lavasdestruyeron una parte <strong>del</strong> bosque y montebajo, pero ninguna casa quedó afectada,aunque la huida de los vecinos provocóque se abandonara el campo por untiempo. Se quemaron algunas huertas y,puntualmente, se perdieron cepasy platanares; también se secaron fuentes.Los daños, siempre menores, fueronprovocados por las cenizas que sepultarontierra vegetal y llegaron hasta el valle de LaOrotava, empobreciendo a muchos labradoresal no permitirles cultivar sus parcelas.Impacto socialLa erupción produjo un gran impacto en lapoblación de Tenerife y en los visitantesextranjeros. En Europa se publicaronnoticias demasiado catastrofistas sobre laerupción, lo que causó una ligera alarmaen varios países. El turismo de la isla,mayoritariamente inglés, se retrajo antelas noticias tan alarmistas que daban losperiódicos ingleses en su país sin unainformación exacta <strong>del</strong> riesgo existente.Para calmar a los visitantes, los principaleshoteles <strong>del</strong> Puerto de la Cruz mandaronmensajes de tranquilidad. A pesar de ello,no se consiguió calmar a los visitantes y,al año siguiente, el número de turistasprovenientes de Europa descendió.Ayudas a los damnificadosAdemás de las ayudas sociales dadas porlas autoridades de la isla, el Gobierno de lanación, previa aprobación <strong>del</strong> Consejo deMinistros, dio 25.000 pesetas para ayudasde los damnificados. Esta ayuda la propusoel Ministerio de Hacienda y fue computadaen el Ministerio de la Gobernación (Gacetade Madrid, 1909). También se comenzó unplan de infraestructuras, ejecutado porAdministración, para dar empleo a laspersonas damnificadas. Igualmente,el Gobierno acordó pagar las cuentaspendientes con las casas navieras yalmacenes de víveres que habían atendidolas necesidades urgentes de la población.Los fenómenos posteruptivosTerminada la fase paroxismal de laerupción, el <strong>Chinyero</strong> continuó variassemanas con una actividad menor. El 1 dediciembre, los cráteres estaban apagadosy la lava estaba aún caliente.La sismicidad continuaba en toda la zonacomprendida entre Guía e Icod, a veces conbastante intensidad, como los días 11, 14,17 y 18 de diciembre. La salida de gasesen las fumarolas fue decreciendo poco apoco, pero aún, a finales de diciembre,continuaban emanaciones menores en elinterior <strong>del</strong> cráter (figuras 24 y 25). Inclusose veían pequeñas explosiones quelanzaban los lapillis al aire a consecuencia,como muy bien observó Perret, de gasesTierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 19


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFEzona <strong>del</strong> <strong>volcán</strong>, los indicios de anomalíassísmicas y de gases que le comunicabanhacían muy probable una nueva erupciónen el mismo cráter o en otros próximosque pudieran formarse, lo cual confirmaríala opinión <strong>del</strong> autor de que el paroxismo<strong>del</strong> 18 de noviembre pasado pudo no sermás que el primer momento de unaerupción compleja.Situación <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> en 1912Fernández Navarro (1912) viajó nuevamenteal <strong>Chinyero</strong> en julio de 1912. Las observacionesque hizo, publicadas en el Boletín de la RealSociedad Española de Historia Natural,las reproducimos casi literalmente por daruna clara descripción de la situación <strong>del</strong><strong>volcán</strong>.En su visita observó que el cono pequeño,separado <strong>del</strong> principal por el brazo <strong>del</strong>ava que contornea a este último haciaLevante, no había sufrido alteraciónsensible en su aspecto y dimensiones;estaba completamente frío, tanto que,marcando el termómetro al aire 14 °C, bajóhasta 10 cuando se le introdujo 20 cmentre las escorias y lapillis de las bocas.Figuras 24 y 25. Arriba, fumarolas residuales en la parte alta <strong>del</strong> cráter. Abajo, detalle de la figura 24.atrapados debajo de los materiales <strong>volcán</strong>icos.Durante los meses de enero, febrero y marzo,estos terremotos fueron cortos y repentinos sintremores previos, acompañados por un sonidocomo una explosión aguda.Se hablaba también de resplandoresnocturnos en la zona <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> quecontinuaban aún en marzo de 1910asociados con algunos temblores que sesintieron, aunque Fernández Navarro no pudocomprobar dicha afirmación a través de suscontactos en la isla. Desde Guía se escribíaque por los cráteres salían columnas dehumo y se sentían pequeños temblores.Fernández Navarro (1910c) manifestó que,según noticias que había recibido de laEn el cono principal había cesado casi porcompleto la actividad fumaroliforme (sic),conservándose tan sólo tres fumarolasamarillas: una sobre la primera boca, otrasobre la tercera y otra hacia la granescotadura <strong>del</strong> borde. La emisión de gasesen todas es insensible y sin la coloraciónde los sublimados, y la elevación detemperatura que en ellas se compruebapasarían fácilmente inadvertidas. Sobrela corriente lávica no había ya ningunafumarola activa, habiendo desaparecidocasi todos los sublimados blancos quetanto abundaban antes. Sólo seconservaban las sales, en pequeñacantidad, en ciertos puntos, resguardadosde la lluvia. Esta rápida extinción de lasfumarolas es una característica queagregar a las que han singularizadola erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>, tan efímeraen todas sus manifestaciones.El avance <strong>del</strong> proceso destructivo <strong>del</strong> grancono, aunque bien patente, no era tangrande como esperaba, lo cual se explica,sin duda, por tratarse de un país de20 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍAlluvias escasas. La superficie externaseguía siendo muy regular y de colornegro intenso, excepto en la misma cima,donde los materiales estaban muyrubefactados y las grietas circulares sehabían acentuado bastante. No habíanuevas grietas, sobre todo transversales,que valga la pena de mencionar, más quehacia el extremo sur de la cumbre, dondeconsiderables desmoronamientos habíanvariado bastante el aspecto <strong>del</strong> cono.Donde más deterioro había por losdesmoronamientos era en la pared interna,sobre todo en las concavidadescorrespondientes a las bocas segunday tercera. En la primera se había formadoun talud rojo de restos rodados, a modode un cono de deyección, muy próximoa la vertical y de gran regularidad. Hacialas grietas de esta pared había algunasmanchas blancas correspondientes aconductos de fumarolas seccionados por laactual superficie <strong>del</strong> cráter. Aun en lasescasas fumarolas que existían, la cantidadde azufre y sal amoníaco era pequeña.En ninguno de los fondos de los cráteres sepodía reconocer un orificio de salida bienlocalizado. A partir de cada uno de elloshabía en las superficies de las lavasgrandes grietas semicirculares quemarcaban las ondas de presión por lamarcha de la corriente.En los cráteres persistía algún calor, perosólo en puntos determinados. Metiendoel depósito <strong>del</strong> termómetro a 15 o 20 cmentre las escorias que todo lo recubren,la temperatura subió hasta 28 °C. Al SE<strong>del</strong> cono, en la morrena lateral izquierda<strong>del</strong> brazo de lava que le rodeó por este lado,había un punto con abundantes sublimados,donde el termómetro llegó a los 200 °C.Se observaba que los puntos de temperaturaelevada estaban localizados a lo largo de lagrieta por donde se verificó la erupción. Elcono en conjunto estaba frío, pero en ciertospuntos se notaba gran calor, sobre todojunto a las fumarolas, y el termómetroenterrado alcanzaba enseguida los 200 °C,siendo seguro que en algunos sitios pasaríade los 300 °C.Fernández Navarro, en la mismacomunicación, incluye además los nuevosdatos publicados por otros autores despuésde la erupción. Del trabajo de Brunty Collet (1910) destaca la velocidadde la corriente lávica que, según Collety Montagnier, era de 15 metros por horaen la tarde <strong>del</strong> 19 de noviembre. Estosmismos autores dan el siguiente análisisde las sales condensadas en una fumarolaa 500 metros de las bocas, el 21 de diciembrede 1909 (costras blancas, coloreadas enalgunos sitios de amarillo pálido):Cloruro de amonio 79,35Cloruro ferroso 1,86Fluoruro de amonio 9,46Fluoruro de calcio 1,21Fluoruro de silicio 3,67Ácido clorhídrico libre 3,72AlúminaIndiciosManganesaLigeros indiciosTotal 99,27Fernández Navarro, en su publicación,compara este análisis con el de Del Campo,señalando dos diferencias. En primertérmino, la falta <strong>del</strong> cloruro magnésicoexistente en el análisis de este último.En segundo lugar, la existencia de una grancantidad de fluoruros, siendo la primeravez que se cita el flúor en las sales de lasfumarolas de Canarias.También es notable el análisis <strong>del</strong> vidrio<strong>volcán</strong>ico después de separados los cristalesmediante el ataque de los lapillis con unadisolución acuosa caliente de ácido oxálicopuro. Brunt y Collet (1910) encuentran endicho vidrio un 43% de sílice, un 5,1% deanhídrido titánico y un 5,2% de protóxidode manganeso. Como se deduce de lasanteriores cifras, el vidrio es mucho másbásico que la roca compacta, en la queLucas había hallado un 50,89% de sílice.Es muy notable la proporción <strong>del</strong> titanioy, por último, sorprendente la considerablecantidad de manganeso, elemento que noapareció en el análisis de Del Campo.Fernández Navarro corrige ligeramentea Perret, en 1914Fernández Navarro (1914) presentó unacomunicación en la RSEHN comentando elartículo sobre la erupción publicado porPerret ese mismo año. Manifiesta que elartículo está casi en absoluto conformeFernández Navarro quieredejar claro que la altitudde 300 metros asignada porPerret al cono de escoriasciertamente no pasaba de80, como había comprobadoen repetidas ascensiones,tanto en los díasinmediatamente posterioresa la erupción, como ennuestra visita de 1911con las conclusiones a las que él llegó en lamemoria sobre la erupción (FernándezNavarro, 1911), hasta tal punto que podríafirmarlo como fiel resumen <strong>del</strong> suyo.Sin embargo, hizo alguna pequeñarectificación a errores sin importanciade Perret, debidos, sin duda, a unainformación deficiente por no conocerel autor el idioma <strong>del</strong> país. Tal es, porejemplo, hablar de una actividad de pocosdías seguida de una nueva erupción,siendo así que la actividad duró tan sólo<strong>del</strong> 18 al 28 de noviembre, no cesando unmomento durante esos diez días.No fueron raras las bombas, como suponeel autor americano, ni dejó de haberlas deconsiderable tamaño, especialmente en lavertiente norte de la montaña nuevamenteformada. Fernández Navarro las había traídoen gran número, muy pesadas y hasta demás de medio metro de longitud. Aquí habríaque añadir el testimonio de Antonio deCologán, que cita expresamente la presenciade grandes bombas aún calientes.Por último, Fernández Navarro quiere dejarclaro que la altitud de 300 metros asignadapor Perret al cono de escorias ciertamenteno pasaba de 80, como había comprobadoen repetidas ascensiones, tanto en los díasinmediatamente posteriores a la erupción,como en nuestra visita de 1911.Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 21


EL CENTENARIO DE LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN CHINYERO, EN TENERIFEFigura 26. Foto aérea <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong> en el año 2003. Autor: Marcos Brito.Actualmente, el <strong>volcán</strong><strong>Chinyero</strong> y toda su áreade influencia han sidodeclarados como la“Reserva Natural Especial<strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>” por la Ley12/1987, de 19 de junio,de Declaración deEspacios Naturalesde Canarias, comoparte <strong>del</strong> Parque Naturalde TenoEl <strong>Chinyero</strong> hoyActualmente, el <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong> y toda suárea de influencia (figura 26) han sidodeclarados como la “Reserva NaturalEspecial <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>” por la Ley 12/1987,de 19 de junio, de Declaración de EspaciosNaturales de Canarias, como parte <strong>del</strong>Parque Natural de Teno, y reclasificadopor la Ley 12/1994, de 19 de diciembre,de Espacios Naturales de Canarias. La Ley2/2000, de 17 de julio, ha modificado suslímites en el sector norte, recortandoel espacio natural protegido en 63,1hectáreas. Ocupa parte de los municipiosde Santiago <strong>del</strong> Teide, El Tanque yGarachico, y se extiende desde los 565a los 1.561 metros en el <strong>Chinyero</strong>,presentando una importante concentraciónde volcanes que dan lugar al sector másreciente <strong>del</strong> eje eruptivo noroeste (Dorsalde Abeque).El <strong>Chinyero</strong>, emplazado justo en el límite <strong>del</strong>os terrenos <strong>del</strong> espacio natural más visitadode España (el Teide), se localiza en plenaCorona Forestal a una altitud cercana a los1.500 metros. El <strong>volcán</strong>, “fosilizadas lascoladas en su boca de salida” (figura 27),recibe numerosos excursionistas a lo largo <strong>del</strong>año que reviven la situación catastrófica quese produjo en aquellos tiempos pretéritos.En el kilómetro 15 de la TF-38, en la base <strong>del</strong>a montaña Boca Cangrejo, se encuentra unaexplanada en la que se puede aparcar elcoche y que sirve de inicio a la ruta. El lugarde comienzo no ofrece duda, pues una barreray un par de carteles indican la entrada a lareserva. La pista presenta un trazado y unfirme excelentes para rodar con la bicicleta.EpílogoLas erupciones <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> (1909), Chahorra(1798) y Arenas Negras (Garachico) (1706)22 • Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009


HISTORIA DE LA GEOLOGÍAsurgieron muy cercanas entre sí, en la dorsal<strong>volcán</strong>ica activa <strong>del</strong> suroeste de Tenerife. Enesa misma zona se produjo, en 2004, la crisissísmica que tuvo alarmada a la poblacióny a las autoridades de la isla durante variosmeses. La sismicidad de la isla, aunquedisminuida en magnitud y frecuencia, se sigueproduciendo en esa misma zona. Llevan 300años de inestabilidad <strong>volcán</strong>ica. No es deextrañar, por tanto, que la próxima erupciónen Tenerife se produzca en esa dorsal. Sinembargo, la falta de un instituto vulcanológicoatendido por las Administraciones Públicassupone un motivo de preocupación ante unaposible erupción. El Senado aprobó en 2005la creación <strong>del</strong> Instituto Vulcanológico deCanarias, una decisión ratificada por elParlamento de la comunidad en 2006, peroaún no hay ubicación para su instalación.Hace cein años, el geólogo español queestudió la erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>, FernándezNavarro, después de visitar Tenerife parainvestigar la erupción, manifestó, al términode la conferencia pronunciada en Madrid, losiguiente: “… Las consideraciones anterioresnos llevan a manifestar la conveniencia deinstalar en las proximidades <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> actualun observatorio sismológico y meteorológico. Lainstalación, tratándose de un establecimientomodesto, no es nada costosa, pudiéndoseencargar las observaciones, mediante unaFigura 27. Foto aérea <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong> en el año 2003. Autor: Marcos Brito.pequeña retribución, a cualquier persona dealguna cultura científica, como médico,farmacéutico, maestro, etc. Ningún punto parecepara esto más indicado que la villa de Icod, sitioen que las sacudidas sísmicas se han sentidocon más intensidad que en el <strong>volcán</strong> mismo.No hace falta insistir en la utilidad e importanciacientífica que tiene el registrar los movimientos<strong>del</strong> suelo en una zona tan inestable. Debe, sinembargo, recordarse, que si el observatoriohubiera existido, la actual erupción se habríapodido predecir con gran seguridad. Tambiénvale la pena recordar que en alguna naciónextranjera parece agitarse la idea de crear en lasinmediaciones <strong>del</strong> Teide algún centro de estaíndole, lo cual sería vergonzoso para España, sipor nuestra parte no hacíamos algo análogo”(Fernández Navarro, 1910).AgradecimientosA Pedro Martínez por la documentacióngráfica; a Ricardo Balcells por el aportede documentación; a Marcos Brito por lacesión de las fotografías aéreas; a laSecretaría <strong>del</strong> Instituto Cabrera Pinto deLa Laguna por la imagen de AgustínCabrera Díaz y a Lázaro Sánchez Pinto.BibliografíaBarrera, J. L. (en prep.). Lucas Fernández Navarro. El primervulcanólogo español.Brito, M. (2003). Erupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> a través de la prensa, Tenerife,Ed. Llanoazur, 110 pp.Brunt y Collet (1910). Étude des matériaux recoltés par M. Benry F.Montagnier au volcan Ghinyero, Arch. des Sc. phys. et nat. deGenéve, XXIX, 618.Cabrera Lagunilla, P. (1981). Las erupciones históricas de Tenerife(Canarias), tesis de licenciatura, Universidad Complutense deMadrid, 193 pp.Del Campo, A. (1912). Los sublimados blancos <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>(Canarias), Anales de la Sociedad Española de Física y Química, X,431-449.Fernández Navarro, L. (1910a). Resumen de la conferencia acerca de laerupción <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>, Boletín de la Sociedad Española de HistoriaNatural, X, 104-122, dos láminas.Fernández Navarro, L. (1910b). Más sobre el <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong>, Boletínde la Sociedad Española de Historia Natural, X, 208-209.Fernández Navarro, L. (1910c). Comunicaciones, Boletín de laSociedad Española de Historia Natural, X, Actas.Fernández Navarro, L. (1911). Erupción <strong>volcán</strong>ica <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong> (Tenerife)en noviembre de 1909, Anales de la Junta para Ampliación deEstudios e Investigaciones Científicas, V, Mem. 1, 99 pp.Fernández Navarro, L. (1912). Nuevos datos sobre el <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong> (Tenerife),Boletín de la Sociedad Española de Historia Natural, XII, 74-78.Fernández Navarro, L. (1914). Comunicación sobre el artículo de Perretrelativo a la erupción <strong>del</strong> <strong>volcán</strong> <strong>Chinyero</strong> (Tenerife), Boletín de laSociedad Española de Historia Natural, XIV, Actas.Gaceta de Madrid (1909). Decreto de concesión de un créditoextraordinario de 25.000 pesetas (22 de diciembre de 1909), nº356, 682-682.Giblin, M. (1950). Frank Alvord Perret, Bulletin of Volcanology, 10, 191-195.Perret, F. A. (1914). The volcanic eruption of Teneriffe in the autumn of1909, Zeitschrif für Vulkanologie, 1, 20-31.Ponte y Cologán, A. de (1911). Volcán <strong>del</strong> <strong>Chinyero</strong>. Memoria históricodescriptivade esta erupción <strong>volcán</strong>ica, acaecida en 18 denoviembre de 1909, lit. A. J. Benítez, Tenerife, 61 pp., de ellas,sólo 35 están dedicadas a la erupción.Tierra y tecnología, nº 35, 3-23 • Primer semestre de 2009 • 23

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!