IDADIDENpropias tropas el sentimiento de justicia y legitimidad de <strong>la</strong> causa <strong>por</strong> <strong>la</strong>IDENTIDAD <strong>21</strong>IDENTIDADque se combate.Quien ocupe el trono moral tendrá mayores posibilidades de obtener e<strong>la</strong>poyo público, elemento fundamental para obtener <strong>la</strong> victoria. (Las 33estrategias de <strong>la</strong> guerra. Robert Greene. Editorial Océano. México2006. Pag 377).En el caso colombiano, tanto el Establecimiento como <strong>la</strong>s FARC-EP,hemos expuesto (guardadas <strong>la</strong>s diferencias) <strong>la</strong>s posturas políticas eideológicas que, se supone, legitiman el accionar de cada uno. ¿Quédice <strong>la</strong> realidad histórica?.La moral del soldado.La causa inicial que movía el corazón y <strong>la</strong> mente de los guerrilleros deBolívar eran <strong>la</strong> libertad, <strong>la</strong> soberanía, <strong>la</strong> justicia social y <strong>la</strong>independencia.Las supuestas motivaciones que alientan y nutren <strong>la</strong> moral de <strong>la</strong>s tropasdel ejército actual, distan demasiado del verdadero papel que <strong>la</strong>sfuerzas militares han cumplido en los <strong>la</strong>rgos años de dominación ysometimiento que ha padecido <strong>la</strong> nación colombiana.Señalemos inicialmente que a partir de <strong>la</strong> segunda mitad del siglo XX seconfiguró <strong>la</strong> Doctrina de Seguridad Nacional, con <strong>la</strong> cual los EEUUpretendían afrontar el nuevo contexto político surgido tras el fin de <strong>la</strong>segunda guerra mundial, <strong>la</strong> prioridad sería combatir al supuesto“enemigo interno” en cada uno de los países del continente americano,con el fin de impedir el avance del comunismo que amenazaba susintereses económicos en <strong>la</strong> región. El instrumento idóneo para tal finserian <strong>la</strong>s fuerzas militares de cada nación.Por eso, y a pesar del discurso y <strong>la</strong>s campañas como <strong>la</strong> mencionada, <strong>la</strong>moral del soldado colombiano, sigue siendo el mísero sa<strong>la</strong>rio de cadames, <strong>la</strong> libreta militar, <strong>la</strong> marihuana, un permiso o una recompensa sillegan con algún trofeo de caza; como es natural, de entre ellos habráalgunos que <strong>por</strong> ignorancia llegan a creer que el mayor problema de<strong>Colombia</strong> son <strong>la</strong>s FARC-EP, y con gusto vienen a buscar pelea. Eldiscurso sobre el “terrorismo”, “<strong>la</strong> defensa de <strong>la</strong> democracia”, “losvalores”, “<strong>la</strong> soberanía” y demás, lo manejan unos cuantos, que buscan<strong>por</strong> todos los medios (incluidos montajes como <strong>la</strong> operación Jaque,desmovilizaciones masivas falsas, y crímenes de guerra como losfalsos positivos etc..) hacer pasar <strong>por</strong> verdad esta gran mentira.La moral del guerrillero.En <strong>la</strong>s FARC-EP, hemos asumido <strong>la</strong> guerra como una imposición de <strong>la</strong>sc<strong>la</strong>ses dominantes, en tanto han cerrado todas <strong>la</strong>s posibilidades de unaverdadera participación democrática, y han acudido a métodos35“La doctrina se extiende a los países cobijados <strong>por</strong> su órbita deinfluencia y se convierte en el modelo obligado a seguir para proteger losintereses norteamericanos y los de <strong>la</strong>s élites dominantes de cada país.En el hemisferio occidental, <strong>la</strong> aplicación de <strong>la</strong> Seguridad Nacional hatenido diferentes formas de expresión e intensidad, debido a <strong>la</strong>sparticu<strong>la</strong>ridades de <strong>la</strong> lucha de c<strong>la</strong>ses en cada país y a <strong>la</strong> capacidad delos bloques de poder para confrontar<strong>la</strong>. Todos ellos, sin excepción,identifican <strong>la</strong> rebeldía política y <strong>la</strong> protesta social con <strong>la</strong> propagación delcomunismo. A los ojos de <strong>la</strong>s c<strong>la</strong>ses dominantes en el poder, <strong>la</strong>s luchasderivadas de <strong>la</strong>s desigualdades sociales y de <strong>la</strong> opresión políticaencarnaban el alma del comunismo, razón <strong>por</strong> <strong>la</strong> cual éste deja derepresentar una amenaza externa, para convertirse en un peligrosoenemigo interno, en una amenaza de orden interno”. (<strong>Colombia</strong> y <strong>la</strong>doctrina de guerra de <strong>la</strong>s c<strong>la</strong>ses en el poder. Ediciones El Murcié<strong>la</strong>go.Bogotá 2010).El ejército colombiano, formado bajo <strong>la</strong> concepción ideológica de <strong>la</strong>DSN, ha asumido su papel como instrumento de contención de <strong>la</strong>saspiraciones popu<strong>la</strong>res, como custodio de los bienes de <strong>la</strong> burguesía yel gran capital, ha mantenido una re<strong>la</strong>ción cordial con <strong>la</strong>s élitesdominantes, con el alto clero católico, y juntos han prolongado <strong>la</strong>smiserias del pueblo.Bajo el influjo de <strong>la</strong> DSN, <strong>la</strong>s FFMM (y paramilitares) colombianas, seconvirtieron en el so<strong>por</strong>te de una c<strong>la</strong>se dominante mezquina, arrodil<strong>la</strong>day criminal que ha gobernado siempre en favor de sus intereses de c<strong>la</strong>se,y de espaldas a <strong>la</strong>s necesidades de <strong>la</strong> mayoría utilizando impunementea miles de jóvenes humildes, de los sectores popu<strong>la</strong>res para quemueran defendiendo lo que no tienen.criminales y genocidas, con tal de mantenerse en el ejercicio del poder.La violencia revolucionaria nace como respuesta a <strong>la</strong> violencia oficial.Hoy como ayer, un alto <strong>por</strong>centaje de campesinos, indígenas y afros notienen tierra suficiente para vivir y trabajar dignamente; unas cuantasfamilias gobiernan a millones de personas; <strong>la</strong>s fuerzas militaresdisparan contra su propio pueblo; <strong>la</strong> soberanía es una ilusión; en <strong>la</strong>stribunas “democráticas” reina el unanimismo; <strong>la</strong> riqueza de unos esdirectamente pro<strong>por</strong>cional a <strong>la</strong> miseria de los otros; es decir, <strong>la</strong>s causas<strong>por</strong> <strong>la</strong>s que se levantaron en Marquetalia siguen siendo <strong>la</strong>s mismas <strong>por</strong><strong>la</strong>s que luchamos hoy.Las nuevas generaciones de gueriller@s, al <strong>la</strong>do de experimentados yconsecuentes camaradas, estamos asumiendo con responsabilidad ycompromiso revolucionario, el enorme reto de no ser inferiores almomento histórico que nos tocó vivir, somos conscientes del inmensolegado que nos dejaron Jacobo y Manuel, estamos convencidos de <strong>la</strong>justeza de nuestra causa, y sabemos que <strong>por</strong> grandes que sean loscercos mediáticos y militares, que aunque mueran comandantes demanera heroica como lo hizo el camarada Alfonso Cano, <strong>la</strong> moral de l@scombatientes farianos no decaerá, <strong>por</strong> el contrario aumentará nuestradecisión de ir al frente, de continuar abriendo caminos hacia <strong>la</strong> <strong>Nueva</strong><strong>Colombia</strong>, ya sea en los campos de batal<strong>la</strong> o en una mesa de diálogo,siempre con el anhelo imperecedero de <strong>la</strong> paz y del socialismo. Esa esnuestra moral.
LA SOLUCIÓN POLÍTICA:plena validez y actualidad de unareivindicaciónhistórica de nuestro pueblo“El destino de <strong>la</strong> patria no puede ser el de <strong>la</strong>guerra civil”Jacobo Arenas.Por: Andrés Arboleda.En <strong>la</strong>s intensas luchas libradas <strong>por</strong> nuestro pueblo en pos de <strong>la</strong>construcción de una real democracia, se ha levantado <strong>la</strong>bandera de <strong>la</strong> Solución Política al conflicto social y armadocomo alternativa a <strong>la</strong> salida militarista derivada de <strong>la</strong> Doctrinade <strong>la</strong> Seguridad Nacional impuesta <strong>por</strong> el imperialismo. Poneren <strong>la</strong> palestra pública este debate es responsabilidad de todos ytodas quienes trabajamos <strong>por</strong> <strong>la</strong> paz en <strong>Colombia</strong>.La salida militarista no es viable ni deseable:IDADIDENPartamos en nuestro p<strong>la</strong>nteamiento de <strong>la</strong> discusión de unaaseveración muy corriente en nuestros tiempos: que <strong>la</strong> salidamilitar a nuestro conflicto es <strong>la</strong> única válida dentro del escenariopolítico. Para ello demostraremos que no es viable ni muchomenos deseable.DENTIDAD30No es viable <strong>la</strong> salida militarista, pues compromete lo recursosde <strong>la</strong> Nación en rubros que no nos representan progreso,mejora de <strong>la</strong>s condiciones de vida de <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción, ni muchomenos desarrollo de <strong>la</strong>s fuerzas productivas. La prosperidadeconómica derivada del militarismo sólo toca a <strong>la</strong>strasnacionales del armamento y a <strong>la</strong>s minorías que se lucrandel macabro negocio de <strong>la</strong> guerra.Un país que subordine <strong>la</strong> salud, <strong>la</strong> educación, el bienestary <strong>la</strong> producción a los intereses guerreros, no poseerájamás un sustento seguro para su futuro. Será un paísempeñado a los mercenarios y los sepultureros.La salida militar no es tampoco deseable, pues si secumpliera su presunto objetivo (<strong>la</strong> pacificación a todacosta, <strong>la</strong> pax romana de los sepulcros), el resultado deeste no podría ser distinto al de una nación bañada ensangre y pob<strong>la</strong>da <strong>por</strong> viudas y huérfanos.La bandera de <strong>la</strong> Solución Política: construcciónhistórica de nuestro pueblo.Desde que comenzara en nuestro país <strong>la</strong> imposición de<strong>la</strong> Doctrina de <strong>la</strong> Seguridad Nacional y del militarismorampante, <strong>la</strong>s organizaciones popu<strong>la</strong>res hanreivindicado <strong>la</strong> necesidad de una solución políticaalternativa a <strong>la</strong> salida militar.Desde su temprano inicio <strong>la</strong>s actuales organizacionespolítico-militares revolucionarias p<strong>la</strong>ntearon que <strong>la</strong>conf<strong>la</strong>gración armada no era <strong>la</strong> única salida al conflictosocial de <strong>Colombia</strong>. En los anaqueles del MuseoNacional reposa <strong>la</strong> carta que <strong>la</strong>s familias campesinas de<strong>la</strong> región tolimense de Marquetalia enviaran al presidenteValencia en 1964. En el<strong>la</strong> solicitaban el urgente cese deagresiones y seña<strong>la</strong>mientos en contra del asentamientode <strong>la</strong>briegos. La respuesta del Gobierno, y sus<strong>la</strong>mentables consecuencias, son ya suficientementeconocidas.El Programa Agrario de los Guerrilleros, documentofundacional de <strong>la</strong> lucha de <strong>la</strong>s FARC-EP, fruto de <strong>la</strong>asamblea de combatientes del 2 de julio de 1964proc<strong>la</strong>mó en consonancia con lo anterior:36