29.12.2015 Views

El Conflicto de los Siglos

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

418 <strong>El</strong> <strong>Conflicto</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> Sig<strong>los</strong><br />

[431]<br />

“Hasta que pasen el cielo y la tierra, ni siquiera una jota ni un til<strong>de</strong><br />

pasará <strong>de</strong> la ley”. Mateo 5:18 (VM). Como la ley <strong>de</strong> Dios es una<br />

revelación <strong>de</strong> su voluntad, un trasunto <strong>de</strong> su carácter, <strong>de</strong>be permanecer<br />

para siempre “com testigo fiel en el cielo”. Ni un mandamiento<br />

ha sido anulado; ni un punto ni un til<strong>de</strong> han sido cambiados. Dice<br />

el salmista: “¡Hasta la eternidad, oh Jehová, tu palabra permanece<br />

en el cielo!” “Seguros son todos sus preceptos; establecidos para<br />

siempre jamás”. Salmos 119:89; 111:7, 8 (VM).<br />

En el corazón mismo <strong>de</strong>l Decálogo se encuentra el cuarto mandamiento,<br />

tal cual fue proclamado originalmente: “Acuérdate <strong>de</strong>l<br />

sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás toda tu obra,<br />

pero el séptimo día es <strong>de</strong> reposo para Jehová, tu Dios; no hagas en<br />

él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu<br />

bestia, ni el extranjero que está <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> tus puertas, porque en seis<br />

días hizo Jehová <strong>los</strong> cie<strong>los</strong> y la tierra, el mar, y todas las cosas que<br />

en el<strong>los</strong> hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el<br />

sábado y lo santificó”. Éxodo 20:8-11 (RV95).<br />

<strong>El</strong> Espíritu <strong>de</strong> Dios obró en <strong>los</strong> corazones <strong>de</strong> esos cristianos que<br />

estudiaban su Palabra, y quedaron convencidos <strong>de</strong> que, sin saberlo,<br />

habían transgredido este precepto al <strong>de</strong>spreciar el día <strong>de</strong> <strong>de</strong>scanso<br />

<strong>de</strong>l Creador. Empezaron a examinar las razones por las cuales se<br />

guardaba el primer día <strong>de</strong> la semana en lugar <strong>de</strong>l día que Dios<br />

había santificado. No pudieron encontrar en las Sagradas Escrituras<br />

prueba alguna <strong>de</strong> que el cuarto mandamiento hubiese sido abolido o<br />

<strong>de</strong> que el día <strong>de</strong> reposo hubiese cambiado; la bendición que <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

un principio santificaba el séptimo día no había sido nunca revocada.<br />

Habían procurado honradamente conocer y hacer la voluntad <strong>de</strong><br />

Dios; al reconocerse entonces transgresores <strong>de</strong> la ley divina, sus<br />

corazones se llenaron <strong>de</strong> pena, y manifestaron su lealtad hacia Dios<br />

guardando su santo sábado.<br />

Se hizo cuanto se pudo por conmover su fe. Nadie podía <strong>de</strong>jar <strong>de</strong><br />

ver que si el santuario terrenal era una figura o mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong>l celestial,<br />

la ley <strong>de</strong>positada en el arca en la tierra era exacto trasunto <strong>de</strong> la<br />

ley encerrada en el arca <strong>de</strong>l cielo; y que aceptar la verdad relativa<br />

al santuario celestial envolvía el reconocimiento <strong>de</strong> las exigencias<br />

<strong>de</strong> la ley <strong>de</strong> Dios y la obligación <strong>de</strong> guardar el sábado <strong>de</strong>l cuarto<br />

mandamiento. En esto estribaba el secreto <strong>de</strong> la oposición violenta<br />

y resuelta que se le hizo a la exposición armoniosa <strong>de</strong> las Escrituras

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!