Arriba tenemos imágenes del día de los hechos y una recons- trucción por ordenador de las disintas trayectorias del disparo. Tambien dos fotograías de Lee Harvey Oswald. Abajo un dossier de fotogramas. 15
LOS ERRORES EN LA RUTA PRESIDEN- CIAL Como hemos comentado con anterioridad, esa mañana los <strong>Kennedy</strong> aterrizan en el aeropuerto Love Field de Dallas, provenientes de Fort Word en el Air Force One, aproximadamente a las 11,40h. Poco menos de una hora antes del asesinato. Seguidamente de bajar las escalerillas del avión, son recibidos por el matrimonio Caberl (el alcalde Earl Caberl y su esposa) los cuales regalan a la primera dama Jac<strong>que</strong>line, un centro de rosas en señal de bienvenida. <strong>El</strong> responsable del servicio secreto en Dallas, Forrest Sorrels y todos sus agentes, se adhieren a los <strong>Kennedy</strong> y al resto de personalidades para dirigirse en unos 10 minutos hacia las calles de Dallas en una comiiva de coches, tras saludar a la mulitud <strong>que</strong> les esperaba cerca de la pista del aeropuerto. <strong>Los</strong> <strong>Kennedy</strong>, el gobernador Conally y su esposa, y dos agentes principales del servicio secreto, ocupan el segundo coche de la comiiva, el famoso Lincoln presidencial, al cual se le había quitado la capota y por tanto <strong>que</strong>daba abierto y sin protección. Además curiosamente, la ventanilla del lado del presidente había sido bajada completamente, mientras <strong>que</strong> la de la primera dama yacía medio subida. <strong>Los</strong> agentes del servicio secreto permanecieron colocados en el coche siguiente al presidencial, en vez de correr a los lados del coche presidencial o colocados en los asideros del mismo cubriendo al matrimonio presidencial. A lo largo del trayecto por las calles (entre el aeropuerto de Dallas y la plaza Dealey, donde ocurre el atentado) el coche y la comiiva presidencial realizan diversas paradas para <strong>que</strong> los <strong>Kennedy</strong> puedan saludar, e incluso tocar a la muchedumbre de votantes y ciudadanos agolpados en las aceras (tremendo riesgo). Las ventanas de los edificios de todas las calles a lo largo del recorrido permanecieron abiertas, y la gente apretada en ellas y en las azoteas de los mismos, además de la falta de sellado de las tapas del alcantarillado. La policía de Dallas solamente se limito a controlar las vallas <strong>que</strong> contenían a la gente de las aceras, y los motoristas de la misma presentaban una posición totalmente desfavorable para cubrir al presidente si era baleado, ya <strong>que</strong> se colocaron delante de la comiiva o detrás del coche presidencial (acompañando más <strong>que</strong> protegiendo). <strong>El</strong> jefe de la policía de Dallas, el sheriff del condado y dos agentes del servicio secreto, fueron en el primer coche del desfile y no pudieron ver nada, ya <strong>que</strong> el mismo era un coche cerrado. La ruta de la comiiva coninuo por la calle Mayor de Dallas hasta entrar en Dealey Plaza, realizando casualmente dos giros bruscos de 120º en las dos calles (a muy poca velocidad, de Mayor a Houston y de Houston a <strong>El</strong>m, a unos 20 Km/h), ya <strong>que</strong> estas presentaban algunos edificios altos, ideales para cometer un atentado a distancia, cosa curiosa, ya <strong>que</strong> la ruta oficial hubiera sido coninuar recta por la calle Mayor, hasta la autopista Stemmons, para poder así llegar al centro comercial donde iba a ser el almuerzo oficial. Una vez sobrepasado el edificio del depósito de libros escolares de Texas, (donde casualmente Oswald trabajaba) se oyeron 3 o 4 disparos. LAS HUELLAS DE LOS ASESINOS Una vez <strong>que</strong> Oswald abandona el edificio de libros escolares (10 minutos después del atentado), este es precintado por la policía de Dallas. Al registrarlo, en la sexta planta en el lado más oriental cerca de la ventana, ocurre un curioso hallazgo. Tras unos cartones de la pared del fondo, se encuentra realmente un rifle Mauser alemán y dos casquillos en el suelo a pie de la ventana, separados unos cenímetros. Sorprendentemente mas tarde, confirmarían <strong>que</strong> se había hallado otro rifle, un Manlicher Carcano de 6,5 de origen italiano, con la mira telescópica desviada, y tres casquillos a pie de ventana y separados también unos cenímetros (como si hubieran sido colocados). Días mas tarde encontrarían huellas de Oswald en el mismo ¿Qué raro no? <strong>El</strong> rifle italiano presuntamente de Oswald no tenía indicios de haber sido disparado, ni Oswald fue someido a ninguna prueba para hallar restos de pólvora o indicios de <strong>que</strong> lo hubiera uilizado. También se encontró en la sexta planta cerca de la ventana más occidental huellas de alguna presencia, ya <strong>que</strong> se encontró un pa<strong>que</strong>te de palomitas de maíz irado a pie de ventana. Cosa extraña, ya <strong>que</strong> según la versión oficial Oswald estaba en esa planta solo disparando. Tras el iroteo, dos policías de la comiiva presidencial pararon su moto e intentaron registrar la zona con el fin de realizar alguna detención. Uno de ellos se dirigió hacia el monículo de hierba (detrás de la valla de madera <strong>que</strong> limita un aparcamiento), al intentar entrar en el mismo, encontró a varios hombres <strong>que</strong> se idenificaron como agentes del servicio secreto, ya <strong>que</strong> iban trajeados y mostraron sus idenificaciones. 16