25.10.2016 Views

Edición 25 de Octubre de 2016

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Diario Co Latino<br />

16<br />

Pedro Ticas<br />

Q<br />

uizás, una <strong>de</strong> las graves confusiones conceptuales<br />

es creer que la universidad <strong>de</strong>be verse como<br />

empresa, confundiendo con ello teoría y práctica,<br />

pensamiento concreto con pensamiento complejo. La<br />

universidad no <strong>de</strong>be jugar a ser empresa porque pier<strong>de</strong><br />

su sentido <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad. Su pensamiento se reduce al<br />

mundo <strong>de</strong> lo concreto sin compren<strong>de</strong>r que lo concreto<br />

<strong>de</strong>be enten<strong>de</strong>rse como la ascensión <strong>de</strong> lo abstracto, <strong>de</strong><br />

lo holístico, <strong>de</strong>l pensamiento complejo y sistémico. Si la<br />

universidad asume el rol <strong>de</strong> empresa, su carácter filosófico,<br />

teórico, epistemológico, histórico asume más una condición<br />

administrativa practicista que una labor <strong>de</strong> formación teórica<br />

transformada en práctica y ésta última, superada por una<br />

nueva teoría en un proceso ascen<strong>de</strong>nte. (Pedro Ticas)<br />

Introducción<br />

Este trabajo está referido a mi propuesta central <strong>de</strong> compren<strong>de</strong>r<br />

la articulación entre ambas entida<strong>de</strong>s a partir <strong>de</strong>l<br />

Territorio y, una vez resuelto, conferir a cada una <strong>de</strong> las<br />

entida<strong>de</strong>s (universidad-empresa-estado) la articulación<br />

intrainstitucional en la que cada una, sin per<strong>de</strong>r su i<strong>de</strong>ntidad<br />

–por el contrario, fortaleciéndola- sea capaz <strong>de</strong> asimilar la<br />

i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong>l otro en función <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo y realización <strong>de</strong><br />

sí misma, es <strong>de</strong>cir, en el objeto <strong>de</strong>sdoblado <strong>de</strong> su propia<br />

i<strong>de</strong>ntidad holística, epistémica y concreta. Las dos se hallan<br />

plenamente vinculadas tanto en el plano epistemológico<br />

como empírico, condición <strong>de</strong>l conocimiento científico que<br />

nos facilita y ofrece la posibilidad <strong>de</strong> construir ambos conceptos<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> una apreciación más holística y concreta a<br />

partir <strong>de</strong> la realidad in situ.<br />

La articulación universidad-empresa- estado<br />

Debo anteponer, que el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> los conceptos <strong>de</strong><br />

vinculación, intervinculación, intravinculación, articulación<br />

e integración institucional consiste en lograr un proceso<br />

ascen<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la cantidad a la calidad. Así pues, la Integración<br />

figura como la expresión concatenada, epistémica,<br />

holística y a la vez “concreta” [1] <strong>de</strong>l Proceso <strong>de</strong> Unicidad<br />

entre Universidad-Empresa-Estado.<br />

Pero en realidad, habría <strong>de</strong> <strong>de</strong>nominarse “articulación<br />

universidad-empresa-sociedad”, entendiendo esta última,<br />

como la configuración concatenada y articulada con el Todo,<br />

como la expresión <strong>de</strong> lo pluriétnico, multicultural, pluricultural,<br />

multiétnico y todas las formas históricas y emergentes<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> las que se organiza la población divididos en grupos<br />

etarios, i<strong>de</strong>ntitarios, culturales, económicos y otros tantos<br />

que han resuelto en andar histórico diacrónico y sincrónico<br />

<strong>de</strong> la población. Des<strong>de</strong> esa observancia epistemológica, el<br />

respeto a las particularida<strong>de</strong>s y singularida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la sociedad<br />

nos conducen al territorio, el cual, por tanto, constituye<br />

la unidad geo-holística <strong>de</strong> la articulación universidad-empresa-sociedad<br />

que hoy abordamos. Sin embargo, por un<br />

asunto <strong>de</strong> ubicación conceptual, me referiré a la noción<br />

<strong>de</strong> “estado” en lugar <strong>de</strong> “sociedad”, dado que resulta más<br />

ampliamente conocido.<br />

Desafortunadamente, por la amplitud <strong>de</strong>l tema, por ahora<br />

no podremos abordarlo con más <strong>de</strong>talle, sin embargo,<br />

habré <strong>de</strong> acotar algunas consi<strong>de</strong>raciones generales a<br />

cuatro componentes que me parecen sustanciales: 1)<br />

Las formas <strong>de</strong> incorporación <strong>de</strong> los egresados al mercado<br />

laboral, 2) prácticas profesionistas, 3) formas <strong>de</strong> contribución<br />

teórica, metodológica y empírica a la sociedad y 4)<br />

todos ellos articulados hacia la transformación in situ <strong>de</strong> la<br />

sociedad que no se explican en un solo y mismo intento,<br />

en realidad, constituyen el primer acercamiento a su respectiva<br />

configuración, la cual <strong>de</strong>be construirse constante<br />

y permanentemente con el propósito <strong>de</strong> lograr mayor<br />

profundidad en cada uno <strong>de</strong> los componentes que indico.<br />

Pero también, no basta con la constancia. Requerimos <strong>de</strong><br />

ESPECIAL<br />

la visión epistemológica holística, mucho mas compleja y<br />

disímil. Esa condición le genera la posibilidad <strong>de</strong> construir<br />

conceptos más <strong>de</strong>terminantes.<br />

Sin duda, El Salvador ha pasado por disimiles condiciones<br />

económico-educativas que le han significado cambios<br />

abruptos. Diseños y mo<strong>de</strong>los [2] educativos ejecutados<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la primera mitad <strong>de</strong>l siglo pasado estuvo orientada<br />

a la producción escolar <strong>de</strong> carácter instruccionista-oficios.<br />

Se trataba <strong>de</strong> formar en el dominio <strong>de</strong> oficios frente a la<br />

llegada <strong>de</strong>l “nuevo or<strong>de</strong>n mercantil que necesitaba <strong>de</strong> fuerza<br />

<strong>de</strong> trabajo especializada en dichas tareas: reparación <strong>de</strong><br />

productos eléctricos, talleres, sastrería, pana<strong>de</strong>ría” (Ticas,<br />

2009) [3], etc. Ahora, los intereses <strong>de</strong>l comercio internacional<br />

han cambiado. La globalización ha generado enormes olas<br />

<strong>de</strong> mercancías <strong>de</strong> la más amplia variedad y valor. No basta<br />

con formar en oficios, se requiere <strong>de</strong> formar profesionistas<br />

en áreas afines a la dinámica que exige el comercio internacional<br />

en el or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> lo jurídico, recursos naturales,<br />

técnicos, industria, tecnología, transporte, infraestructura,<br />

servicios, salud, etc.<br />

Esta nueva condición pone en aprietos al quehacer educativo<br />

escolar, especialmente a la educación superior. Más <strong>de</strong><br />

50 años <strong>de</strong> formar en las mismas profesiones han saturado<br />

el mercado, especialmente, tratándose <strong>de</strong> una sociedad<br />

con débil organización <strong>de</strong> formas productivas diversificadas.<br />

Pero eso no es culpa <strong>de</strong> la sociedad ni sistema educativo<br />

nacional. Se trata <strong>de</strong> las volunta<strong>de</strong>s y disposiciones <strong>de</strong><br />

algunos organismos y gobiernos internacionales que han<br />

condicionado sus préstamos, dadivas-donaciones, financiamientos<br />

concedidos al país, para que ejecuten algunos<br />

programas o proyectos escolares plenamente ajenos a la<br />

historia y realidad <strong>de</strong> la sociedad nacional. Ese hecho, que<br />

es histórico, no pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>saten<strong>de</strong>rse. No pue<strong>de</strong> quedar<br />

fuera <strong>de</strong>l análisis holístico <strong>de</strong> la educación escolarizada.<br />

Así que cuando nos referimos a la “incorporación <strong>de</strong> los<br />

egresados al mercado laboral”, <strong>de</strong>be compren<strong>de</strong>rse ante<br />

todo, qué es eso <strong>de</strong> mercado laboral en una sociedad<br />

predominantemente <strong>de</strong>terminada para el consumismo y<br />

no para la producción? Ciertamente, si trata <strong>de</strong> “mercado<br />

laboral” el principio básico <strong>de</strong> dicho concepto implica que<br />

la fuerza <strong>de</strong> trabajo continua siendo una mercancía en la<br />

que su valor <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>rá <strong>de</strong> las condiciones mismas <strong>de</strong> la<br />

Forma Económica existente en la sociedad, es <strong>de</strong>cir, en<br />

socieda<strong>de</strong>s-mercado, la fuerza <strong>de</strong> trabajo adquiere el valor<br />

igual o similar al valor <strong>de</strong> la mercancía y el tiempo <strong>de</strong> ese<br />

valor estará <strong>de</strong>terminado por igual condición <strong>de</strong>l tiempo<br />

<strong>de</strong> circulación <strong>de</strong> la mercancía.<br />

Si esto fuese así, entonces significaría que la masiva<br />

formación <strong>de</strong> profesionistas habrá <strong>de</strong> fluctuar tanto como<br />

fluctúe el valor <strong>de</strong> las mercancías y con ello respon<strong>de</strong>r a la<br />

lógica <strong>de</strong>l sistema, lo que indica que la retórica <strong>de</strong> la articulación<br />

universidad-empresa-estado no sería más que una<br />

expresión disociativa <strong>de</strong> las verda<strong>de</strong>ras responsabilida<strong>de</strong>s<br />

<strong>de</strong> la organización holística <strong>de</strong> las socieda<strong>de</strong>s.<br />

El otro problema consiste en reducir la articulación universidad-empresa-estado<br />

a simples números, esto es, a<br />

volumen <strong>de</strong> profesionistas puestos en el mercado. Cierto<br />

que los números son importantes en tanto las socieda<strong>de</strong>s<br />

se encuentren aptas para su asimilación. En ese caso,<br />

la operación aritmética es simple. En tanto halla mayor<br />

número <strong>de</strong> profesionistas en el mercado laboral, mayor<br />

y mejor se entien<strong>de</strong> la capacidad que tiene esa sociedad<br />

para incorporar su masa <strong>de</strong> profesionistas a un mercado<br />

productivo. En cambio, en tanto el número <strong>de</strong> profesionistas<br />

sea mínimo, menor es la capacidad <strong>de</strong> esa sociedad para<br />

incorporar a su <strong>de</strong>sarrollo y progreso la masa <strong>de</strong> fuerza<br />

<strong>de</strong> trabajo que produce.<br />

Pero como hemos dicho, la relación universidad-empresa-estado<br />

no <strong>de</strong>be observarse reduccionistamente a la<br />

cantidad, al número. Esa es una visión positivista mecánica,<br />

obsoleta y tristemente anacrónica. La transformación <strong>de</strong> la<br />

Cantidad en Calidad solo se logra mediante la observancia<br />

Martes <strong>25</strong> <strong>de</strong> octubre <strong>de</strong> <strong>2016</strong><br />

La articulación universidad-empresa y estado: una construcción epistémica<br />

y holística <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la particularidad territorial<br />

<strong>de</strong> los números en relación con la calidad que esos datos<br />

producen, esto es, que la relación universidad-empresa-estado<br />

no está <strong>de</strong>terminada por el número <strong>de</strong> profesionistas<br />

que las universida<strong>de</strong>s ponen en el mercado laboral, sino,<br />

fundamentalmente, por las transformaciones cualitativas<br />

que esos profesionistas logran en su práctica laboral, social<br />

y cultural. Eso es, en simples términos, la transformación<br />

<strong>de</strong> la Cantidad en Calidad.<br />

Des<strong>de</strong> dichas premisas con las cuales conferimos a la<br />

relación universidad-empresa-estado una condición sostenible,<br />

sustentable, articulada, concatenada y con rumbo<br />

histórico conjunto, conviene con absoluta proporción,<br />

pensar el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> una trilogía sistémica nacional <strong>de</strong><br />

manera que cada una <strong>de</strong> las tres entida<strong>de</strong>s contribuya a<br />

la superación <strong>de</strong> sí misma y <strong>de</strong> las <strong>de</strong>más. En esa lógica,<br />

no es muy difícil compren<strong>de</strong>r que la producción <strong>de</strong> lo material<br />

es apenas una <strong>de</strong> las formas en las que el mundo<br />

se produce y que por tanto, la articulación trilógica no está<br />

conferida únicamente al mundo material. Aceptar que la<br />

trilogía <strong>de</strong>be reducirse a la producción material, sería reducirse<br />

a la mínima expresión <strong>de</strong>l pensamiento y la razón<br />

humana. La trilogía respon<strong>de</strong> también a la formación y<br />

construcción <strong>de</strong> lo humano, <strong>de</strong> nuevas formas <strong>de</strong> vida, a<br />

<strong>de</strong>smecanizar las relaciones humanas y convertirlas en la<br />

preservación <strong>de</strong> la especie, no por su carácter biológico<br />

sino, fundamentalmente, por su carácter social, humano<br />

y en éste último, su estado <strong>de</strong> la conciencia.<br />

Por su parte, los subsiguientes componentes referidos a<br />

las prácticas profesionistas, las formas <strong>de</strong> contribución<br />

teórica, metodológica y empírica a la sociedad y la articulación<br />

hacia la transformación in situ <strong>de</strong> la sociedad<br />

que anteriormente indicamos –los cuales abordaremos<br />

con más <strong>de</strong>talle en otra oportunidad-, requieren al menos<br />

por ahora, una acotación sustancial: su unicidad sistémica<br />

<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong>l estado económico, educativo, tecnológico,<br />

productivo e histórico en el que se halle la sociedad en<br />

don<strong>de</strong> se realizan. Dicho estado o condición <strong>de</strong> la sociedad<br />

<strong>de</strong>be correspon<strong>de</strong>r a la unicidad simétrica entre población,<br />

estado político y empresa. Ninguna <strong>de</strong> las tres actúa o<br />

sobrevive sin la otra. Esa condición <strong>de</strong> inter<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia<br />

<strong>de</strong>be transformarse en Intra<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia, es <strong>de</strong>cir, <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

sus propias i<strong>de</strong>ntida<strong>de</strong>s articulando el Todo.<br />

Si este principio no se realiza, muy difícilmente pue<strong>de</strong> ni<br />

siquiera asociarse la condición empresarial, universitaria y<br />

estatal al <strong>de</strong>sarrollo y progreso <strong>de</strong> la sociedad. En materia<br />

empresarial, todas ellas se hallan articuladas por el mismo<br />

sistema. Ninguna escapa <strong>de</strong> la otra, no pue<strong>de</strong> ser in<strong>de</strong>pendiente.<br />

Tratase <strong>de</strong> empresas productoras, distribuidoras,<br />

servicios, comercio, mercantiles, etc. Las universida<strong>de</strong>s no<br />

solo están puestas al servicio <strong>de</strong> las empresas. Su carácter<br />

ontológico, humano, va más allá <strong>de</strong> las variabilida<strong>de</strong>s<br />

económicas. Se forma en ellas una cultura, conducta,<br />

comportamiento <strong>de</strong> lo social, <strong>de</strong> lo humano. El estado no<br />

es un administrador. Su participación en la unicidad sistémica<br />

consiste en la organización <strong>de</strong> las simetrías entre<br />

las entida<strong>de</strong>s. Debe adquirir un compromiso y por tanto,<br />

adquiere in situ, un proyecto humano.<br />

Hasta hoy, conocemos <strong>de</strong> la propuesta mercantil <strong>de</strong> esa<br />

trilogía <strong>de</strong>s<strong>de</strong> las i<strong>de</strong>as <strong>de</strong> Etzkowitz, Gulbrandsen y Levitt<br />

[4] que entien<strong>de</strong>n a la Universidad-como la empresa fundadora<br />

mediante instalaciones <strong>de</strong> incubación-, la Empresa<br />

–como la entidad educadora a través <strong>de</strong> universida<strong>de</strong>s<br />

empresariales y el Estado- como el capitalista <strong>de</strong> riesgo<br />

por medio <strong>de</strong> la investigación y la innovación en pequeñas<br />

empresas. Esto suce<strong>de</strong> bajo el supuesto teórico <strong>de</strong> pensar<br />

que cada una <strong>de</strong> ellas influencia a la otra adquiriendo un<br />

mismo ritmo y <strong>de</strong>stino.<br />

Ciertamente, al respecto <strong>de</strong> los intereses mercantiles, dicha<br />

noción no parece <strong>de</strong>scabellada; por el contrario, se ajusta<br />

al mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> sociedad en la que funciona. Pero es, sin<br />

duda alguna, el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> sociedad lo que <strong>de</strong>termina y<br />

garantiza su funcionamiento, es <strong>de</strong>cir, que en socieda<strong>de</strong>s

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!