Rock To Rock Magazine N°2

Nasson
Además de tener una respetada
carrera como solista con ya 2
discos bajo el brazo, Nasson está
continuamente trabajando
en la escena musical ya sea
en su faceta de guitarrista,
como vocalista en Resilience,
participando en distintas
colaboraciones con diferentes
bandas de metal en Chile,
y en producción de bandas
tanto a nivel audiovisual, con
incontables trabajos de fotografía
y dirección de videoclips, así como
a nivel musical bajo el alero de Riff
Studios. Conversamos un poco con
Nasson para que nos dé su visión de
la escena musical actual del heavy
metal en Chile.
En tu largo curriculum, llevas
varios discos en el cuerpo,
ya sea como músico o como
productor, sin contar un periodo
radicado en México como
parte de la promoción de tu
trabajo solista, ¿Dada esa
experiencia qué opinas de
la calidad, en general, de los
discos chilenos, y cómo los ves
respecto a la oferta internacional?
Me parece que el material musical
que se desarrolla en Chile
es de primer nivel, tanto musicalmente
como a nivel de producción.
Particularmente, cierto
segmento de músicos de rock
y metal, son extremadamente
talentosos y preocupados de las
producciones que lanzan al mercado.
Creo que hay materia prima
en nuestra escena para hacer algo
poderosísimo a nivel internacional
y posicionar a grandes bandas
en la escena mundial, pero para
eso se necesita generar un circulo
virtuoso de retroalimentación
entre bandas/músicos, público,
medios, locales e incluso empresas
ajenas al medio dispuestas a
invertir en bandas de este estilo
musical que es el que más fanáticos
moviliza en el país.
Como productor, ¿cuales son
las mayores debilidades que
has observado en las bandas
nacionales al momento de sentarse
a grabar?
Así como estamos rodeados de
grandes músicos que trabajan a
gran nivel, también existe la veta
contraria. En mi estudio, Riff Studios,
he trabajado breve y extendidamente
con grandes amigos
músicos con los que siempre es
un agrado trabajar, con un profesionalismo
a toda prueba, pero
también me ha tocado registrar a
bandas que cumplen con todos
los canones del amateurismo en
el peor de los sentidos. Cosas
tan simples como llegar con las
canciones aprendidas al estudio,
uno pensaría que son obvias
¿No? Pero hay gente que desafía
los limites del sentido común. Por
otro lado, existe también cierto
recelo de trabajar con productores.
Hay un miedo a que este
personaje externo venga, evalue
y ponga de cabeza tu trabajo creativo.
Hay mucha inseguridad en
ese sentido. Tampoco hay que negar
que hay tipos que se llaman
“productores” que son derecha-