Edición 12 de junio de 2018
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Nacionales<br />
2 Martes <strong>12</strong> <strong>de</strong> <strong>junio</strong> <strong>de</strong> <strong>2018</strong> Diario Co Latino<br />
“No los odio, quiero justicia por<br />
todas las víctimas”: Dorila Márquez<br />
Gloria Silvia Orellana<br />
@SilviaCoLatino<br />
La ventana con marco<br />
<strong>de</strong> ma<strong>de</strong>ra rústica es<br />
la única fuente <strong>de</strong> luz<br />
en el cuarto <strong>de</strong> adobe <strong>de</strong> la cocina<br />
<strong>de</strong> María Dorila Márquez<br />
<strong>de</strong> Márquez, sobreviviente <strong>de</strong><br />
la masacre <strong>de</strong> El Mozote y sitios<br />
aledaños, perpetrada por un<br />
combinado militar que incluyó<br />
al Batallón Atlacatl, compuesto<br />
por soldados y oficiales preparados<br />
en la lucha contrainsurgente.<br />
Dorila, <strong>de</strong> 61 años, relató con<br />
voz suave los recuerdos que se<br />
agolpan en su memoria y alma.<br />
“Una psicóloga española me<br />
preguntó una vez, ¿por qué lloraba<br />
mucho?, que el luto solo es<br />
por dos años, entonces le respondí:<br />
“para mí, este dolor lo<br />
tengo presente como si fue ayer<br />
y me lo llevaré a la tumba”.<br />
La visita <strong>de</strong>l juez <strong>de</strong> paz <strong>de</strong><br />
Meanguera es la primera <strong>de</strong> tres<br />
jornadas <strong>de</strong> inspecciones oculares,<br />
toma <strong>de</strong> medidas perimetrales<br />
y fotografías para robustecer<br />
las <strong>de</strong>claraciones <strong>de</strong> los testigos<br />
sobrevivientes <strong>de</strong> la Masacre El<br />
Mozote y lugares aledaños.<br />
La comisión judicial fue or<strong>de</strong>nada<br />
por el Juzgado Segundo <strong>de</strong><br />
Primera Instancia <strong>de</strong> San Francisco<br />
Gotera, Morazán, que podría<br />
incluir, a<strong>de</strong>más, exhumaciones<br />
en el municipio <strong>de</strong> Aramba-<br />
María Dorila Márquez narra sus recuerdos <strong>de</strong> lo sucedido durante la masacre <strong>de</strong> El Mozote, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su humil<strong>de</strong> vivienda. Foto Diario Co<br />
Latino/GLoria SiLvia oreLLana.<br />
María Dorila Márquez,<br />
sobreviviente <strong>de</strong> la<br />
masacre <strong>de</strong> El Mozote,<br />
ocurrida en 1981<br />
en varios caseríos <strong>de</strong>l<br />
norte <strong>de</strong>l <strong>de</strong>partamento<br />
<strong>de</strong> Morazán.<br />
Foto Diario Co Latino/<br />
GLoria SiLvia oreLLana.<br />
la, con la cooperación <strong>de</strong>l Equipo<br />
Forense <strong>de</strong> Antropología <strong>de</strong><br />
Argentina en la i<strong>de</strong>ntificación <strong>de</strong><br />
osamentas.<br />
“Es terrible lo que viví en este<br />
lugar unos días antes (<strong>de</strong> la masacre),<br />
los militares los estuvieron<br />
transportando en helicópteros<br />
a estos lugares, pasaban<br />
bien bajito y encañonando con<br />
sus fusiles. La casa estaba cerrada<br />
y por la ventana <strong>de</strong> la cocina<br />
vimos moviéndose al Ejército<br />
a ese cerro, que era más bajito<br />
y limpio, sin árboles, se podían<br />
ver”, narró mientras señalaba el<br />
cerro La Cruz, que se avista <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />
la cocina que se encuentra en<br />
el mismo lugar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1981.<br />
Dorila recorrió junto al juez y<br />
agentes <strong>de</strong> Inspecciones Oculares<br />
(PNC) todos los lugares a los<br />
que recurrió junto a sus dos hijos<br />
y su esposo en su huida <strong>de</strong>l<br />
cantón La Guacamaya, cercano<br />
al caserío El Mozote, ese 11 <strong>de</strong><br />
diciembre <strong>de</strong> 1981.<br />
“Ahora no creo po<strong>de</strong>r bajar al<br />
abismo al que bajamos para ir a<br />
Los Toriles, porque estoy mal <strong>de</strong><br />
salud, en aquel momento lo hice<br />
por el susto y obligada, tuve que<br />
andar con mi hijo baleado en su<br />
pie, era noche <strong>de</strong> luna llena y teníamos<br />
que aprovechar la oscuridad<br />
para escon<strong>de</strong>rnos y huir.<br />
Lo que sufrimos fue terrible y<br />
lo he contado tantas veces, y lo<br />
seguiré haciendo porque, como<br />
digo siempre, no quiero que nadie<br />
más sufra esa terrible angustia<br />
que pasamos”, señaló.<br />
De los recuerdos más atroces<br />
Dorila Márquez <strong>de</strong>scribe el<br />
fuerte olor a cuerpos quemados,<br />
el espeso humo que subía<br />
en columnas por los cerros, luego<br />
que soldados incendiaran los<br />
ranchos y cultivos <strong>de</strong> los pobladores.<br />
Así como gritos <strong>de</strong>sgarradores<br />
<strong>de</strong> mujeres, niños, niñas y<br />
ancianos, aunque, entre sollozos,<br />
reconoció que quien no ha vivido<br />
una situación similar, difícilmente<br />
podrá i<strong>de</strong>ntificar la “tribulación”<br />
<strong>de</strong> esos días.<br />
“Vimos cómo un soldado<br />
salió corriendo <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> una<br />
niña que traía un niño a la cintura,<br />
y se van <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> la casa<br />
y <strong>de</strong>spués se escuchó la ráfaga<br />
y luego ya estaba quemándose<br />
la casa. Ahí estuvimos todo el<br />
día con ese olor a cuerpos quemados,<br />
fue terrible, escuchar<br />
los gritos <strong>de</strong> la gente. El Mozote<br />
se llenó <strong>de</strong> humo negro raro.<br />
El milagro que nos hizo Dios<br />
fue cegar (a los soldados) para<br />
que no nos masacraran y que<br />
mi hijo herido <strong>de</strong> su pie no muriera,<br />
esos fueron los milagros<br />
<strong>de</strong> Dios”, reafirmó.<br />
La odisea <strong>de</strong> Dorila Márquez<br />
junto a su familia <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />
la huida <strong>de</strong>l cantón Guacamaya<br />
hacia Los Toriles y luego como<br />
refugiada en tiendas <strong>de</strong> campaña<br />
en Arambala, junto a muchas<br />
más familias <strong>de</strong> los cantones<br />
y caseríos cercanos a El<br />
Mozote, fue documentada por<br />
el juez <strong>de</strong> Meanguera.<br />
“Yo no los odio, solo quiero<br />
justicia por las víctimas, fue<br />
tan cruel lo que hicieron en El<br />
Mozote y sitios aledaños, no le<br />
<strong>de</strong>seo a nadie ese sufrimiento<br />
que vivimos. Me quitaron a<br />
mi padre, mi hermanita embarazada,<br />
mi sobrina <strong>de</strong> 7 meses y<br />
sobrinito <strong>de</strong> un año; mis cuñados,<br />
sus esposas y sus hijos, y<br />
los hermanos <strong>de</strong> mi esposo -le<br />
masacraron cinco-, tres mujeres<br />
y dos hombres, una <strong>de</strong> ellas<br />
<strong>de</strong> cinco meses <strong>de</strong> embarazo<br />
y otra que tenía días <strong>de</strong> haber<br />
dado a luz”, <strong>de</strong>scribió.<br />
La sobreviviente <strong>de</strong> la masacre <strong>de</strong> El Mozote señala el cerro La Cruz, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la ventana<br />
<strong>de</strong> la cocina <strong>de</strong> su casa y narra cómo vio al Ejército moverse sobre ese cerro en 1981<br />
durante la masacre <strong>de</strong> El Mozote. Foto Diario Co Latino/GLoria SiLvia oreLLana.