23.11.2019 Views

BOMBARA, Paula-La chica pajaro

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

/ 1 1111/11 Hombara

l.m11or, pará, ¿y vos qué vas a hacer? Mara la sigue. ¿Yo?

Por 111 í no te preocupes, yo voy a estar bien. ¿Bien? ¿Qué vas a

ltc1a 1; te vas a quedar acá? No, no. ¿viste la amiga que te conté?,

/11111110, me voy a ir a su casa un par de noches. Después voy a volver.

i.!1 C1í? Leonor la mira un instante mientras llena de agua

1.i p<wa. Sí, acá. No puedo dejar el departamento así. Pero junto

Jodo y me vuelvo a lo de mi amiga, eh, no te preocupes que con

l'l/11 lince años que decimos de vivir juntas. Mara la mira con

( lesconfianza, Leonor se percata de eso y sonríe, acerr¡1

nclose y tomándola de un brazo. En serio. Te dije que no

/1' fll'l'Ocuparas por mí. Está bien. Pero te voy a ayudar a arreglar

11 /gu de este desastre. La llama de la hornalla crepita bajo la

1> 1va. Leonor le toma las manos y le dice si eso te va a dejar

lr1111quila, apenas me organice le aviso. Perfecto, y te voy a dejar

111i celular viejo. Quiero que estemos comunicadas. Pero apenas sé

11surlo. Es muy fácil, mirá. Agarralo.

La chica pájaro

Cuando está ahí toma una silla y se sienta. Busca su

mirada agachándose un poco pero ella sigue con el rostro

concentrado en el celular,

Hola, hermosa, le dice, lo más suave que puede, guardando

una distancia que cree apropiada. Me encantó cenar

con vos esta noche. A pesar de todo esto. Quiero volver a la terraza a

buscar tu tela, ústá bien? Después vuelvo y te acompaño a lo de tu

hermana.

Mara lo escucha. Se conmueve. Los recuerdos de todo

lo que hizo por ella esa noche. Sin pedir nada a cambio.

De pronto desea tanto buscar sus ojos y alojarse allí. Se

gira hacia él y se esconde en ese cálido lugar que se forma

cuando cuello y clavícula se unen. Cierra los ojos. Darío

siente el cosquilleo de la respiración pero no se mueve.

No quiere hacer nada que la aleje.

Darío se pierde los detalles de esa conversación. Su

mrnte está ocupada. Fue una noche tan larga, tan llena.

( 'omo si desde el momento en que cenaron en la terraza

t lr la construcción hubieran pasado semanas en lugar de

horas. Mira a su alrededor, mira a Mara, mira a Leonor.

l ldce tan poco que conoce a esas dos mujeres.

Va a la cocina y las encuentra sentadas a la mesa

rn i n:tndo el celular. Leonor levanta la vista y le sonríe.

/\111· quiere enseñar a usar el guasap. Obvio, es una pavada, vas a

1¡m·11der enseguida. Esperá, querida, que quiero ir al baño. Ya vuelvo.

Leonor le presiona el brazo a Darío cuando pasa y los

dl'j;1 solos. Él camina en silencio hasta su lado.

164

165

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!