la revista - Natural Life

trastornos
urológicos
Por una mejor calidad de vida
El Dr. Javier Zeballos explica las características y posibles tratamientos para trastornos urológicos
que afectan a la población masculina adulta: la hiperplasia prostática y el cáncer de próstata. En el
primer caso, se trata de una evolución natural en el hombre, que se trata cuando genera molestias.
En el segundo, la clave es la detección precoz.
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Perfil
El doctor Javier Zeballos es urólogo. Desde 1988 se
desempeña en diversas instituciones públicas y privadas.
Ejerció la docencia en la Facultad de Medicina,
es jefe del Servicio de Urología del hospital Maciel, y
urólogo de Medicina Personalizada.
Con el correr de los años y la llegada a la madurez,
los hombres comienzan a experimentar
nuevas preocupaciones vinculadas con la
salud de su aparato urinario, a raíz de dos problemas
que –con diversa frecuencia– suele
presentar la glándula prostática: la hiperplasia
prostática benigna y el cáncer de próstata.
Una característica natural en el hombre es la
progresiva hipertrofia de esta glándula. A medida
que avanza la edad, en lugar de disminuir
de tamaño, como ocurre con otros órganos,
la próstata incrementa su volumen. Sufre lo
que se denomina una “hipertrofia”.
“Este proceso es normal y afecta a más de
la mitad de los hombres por encima de los
cincuenta años”, aclaró el doctor Javier Zeballos,
médico urólogo especializado en cirugía
prostática, entre otros tratamientos.
Entre este segmento de la población, añadió,
“una parte importante va a tener síntomas
obstructivos, es decir, dificultad para vaciar
correctamente la vejiga”. Algunos de estos
casos se solucionan mediante el uso de medicación,
al menos durante un tiempo prolongado.
Sin embargo, al menos el 25% de quienes
presentan síntomas, necesitarán cirugía
en algún momento de su vida.
Por otro lado, otra afección típica de esta
glándula es el cáncer, una patología que, de
acuerdo con Zeballos, “ocurre con menos frecuencia,
pero afecta de modo significativo la
calidad de vida del hombre, siendo el segundo
tumor en importancia, y la segunda causa
de muerte por tumores en el varón”.
En los últimos tiempos, se han logrado avances
que posibilitan una detección precoz del