Revista Juntos - Septiembre / Octubre 2021

MBA. ALFREDO
MENESES CIBRIÁN
Profesor de Posgrados de la Universidad Panamericana
Director General de Invivus Consulting
DECISION MAKER
El clima laboral y la reactivación
organizacional
Las empresas están “surfeando”, con mucho esfuerzo, cada ola
de esta pandemia. No ha sido fácil, ni lo será. Hoy más que nunca
se ha confirmado que el factor para la reactivación organizacional
son las personas, y aunque autores enfaticen que lo importante
es cuidar el flujo de efectivo o apostar por la digitalización, el ciclo
siempre iniciará y terminará de la mano de las personas. Por lo
tanto, se torna relevante conocer su nivel de compromiso para
con la organización y su grado de conocimiento de los objetivos
establecidos. Para ello se utiliza el análisis del Clima Laboral.
¿Cómo seleccionar un buen análisis de Clima Laboral?
1. Metodología: evitar aplicar diagnósticos cuyo resultado se
muestre en promedios, ya que los promedios suelen “ocultar” la
dispersión de los resultados, por lo tanto, pierden confiabilidad. La
recomendación sería porcentajes de satisfacción.
2. Dimensiones: preguntar aquello que la empresa esté lista
para escuchar respuestas al respecto. Recordar el principio
“menos es más”, sobre todo en estos tiempos donde la
focalización no es negociable.
3. Data analytics: aunque el primer objetivo es conocer las
propias fortalezas y áreas de mejora, resulta interesante la
comparación con otras empresas, ya que esto ayuda a predecir
comportamientos, prevenir problemas y maximizar las
posibilidades de éxito de un plan de acción.
La interpretación de los resultados se hace en base al
impacto que tienen para con la organización. Existe un orden
lógico que nos permite conocer dicho impacto y diseñar
planes de acción mucho más precisos:
1. Estructura: lo primero de atender es asegurar que todos
los colaboradores entiendan la parte estructural de la
organización: hacia dónde vamos, qué cultura vivimos y cómo
se gestiona la empresa.
2. Factores Clave: para un salto de calidad en las prácticas
institucionales, los factores clave son: líderes, nivel de
comunicación y visión de equipo entre áreas.
3. Compromiso: una vez “resueltos” los dos anteriores,
centrarnos en iniciativas que incrementen el engagement
del personal, con desarrollo individual y organizacional,
cultura de reconocimiento y competitividad en las
compensaciones, para finalmente reflejar el grado de
pertenencia hacia la organización.
Recuerda que involucrando a los que trabajan para ti,
escuchando sus ideas y sugerencias para optimizar la
operación, harás que la reactivación organizacional sea
mucho más rápida, menos costosa y más eficiente.
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SEPTIEMBRE / OCTUBRE 2021
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