10.04.2013 Views

oswald-chambers-en-pos-de-lo-supremo

oswald-chambers-en-pos-de-lo-supremo

oswald-chambers-en-pos-de-lo-supremo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

"A sus ovejas llama por nombre", Juan 10:3<br />

Agosto 16<br />

¿Me conoce?<br />

Lam<strong>en</strong>tablem<strong>en</strong>te, ¿cuándo <strong>lo</strong> he interpretado mal a Él? (ver Juan 20:11-18). Es <strong>pos</strong>ible conocer toda la<br />

doctrina y, sin embargo, no conocer a Jesús. El alma <strong>de</strong> una persona está <strong>en</strong> grave peligro cuando el<br />

conocimi<strong>en</strong>to <strong>de</strong> la doctrina supera a Jesucristo, evitando la comunión íntima con Él. ¿Por qué l<strong>lo</strong>raba<br />

María Magdal<strong>en</strong>a? Para ella la doctrina no significa más que la hierba que pisaba. Cualquier fariseo<br />

podría haberse mofado <strong>de</strong> ella por su doctrina, pero <strong>de</strong> <strong>lo</strong> que nunca se hubiera podido burlar era <strong>de</strong>l<br />

hecho <strong>de</strong> que Jesús la había liberado <strong>de</strong> siete <strong>de</strong>monios (ver Lucas 8:2). Y, aun así, las b<strong>en</strong>diciones <strong>de</strong>l<br />

Señor no eran <strong>en</strong> nada comparadas con el privilegio <strong>de</strong> conocer<strong>lo</strong> a ÉL. Dicho esto, se volvió y vio a<br />

Jesús que estaba allí; "pero no sabía que era Jesús... Él le dijo: ¡María!..." Tan pronto la llamó por su<br />

nombre, ella supo que t<strong>en</strong>ía unas viv<strong>en</strong>cias <strong>de</strong>l pasado con Aquel que le había hablado. "Volviéndose ella<br />

le dijo: ¡Raboni! Que significa: “Maestro”".<br />

¿Cuánto he dudado tercam<strong>en</strong>te? (Juan 20:24-29). ¿He t<strong>en</strong>ido alguna duda acerca <strong>de</strong> Jesús? ¿Tal vez con<br />

respecto a una experi<strong>en</strong>cia <strong>de</strong> la cual otros dan testimonio, pero yo aun no he vivido? Le dijeron, pues, <strong>lo</strong>s<br />

otros discípu<strong>lo</strong>s: ¡Hemos visto al Señor! Sin embargo, Tomás dudó y dijo: "Si no veo... no creeré". Él<br />

necesitaba el toque personal <strong>de</strong> Jesús. No sabemos cuándo han <strong>de</strong> v<strong>en</strong>ir sus toques, pero cuando llegan<br />

son in<strong>de</strong>scriptiblem<strong>en</strong>te preciosos. Entonces, Tomás respondió y le dijo: "¡Señor mío y Dios mío!"<br />

¿Cuándo <strong>lo</strong> he negado por egoísmo? (Juan 21:15-17). Pedro negó a Jesucristo con maldiciones y<br />

juram<strong>en</strong>tos. A pesar <strong>de</strong> eso, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la resurrección Jesús se le apareció a él únicam<strong>en</strong>te. Lo restauró<br />

<strong>en</strong> privado y <strong>de</strong>spués fr<strong>en</strong>te a <strong>lo</strong>s <strong>de</strong>más. Y Pedro le dijo: "Señor... tú sabes que te quiero". ¿T<strong>en</strong>go un<br />

historial personal con Jesucristo? La única señal cierta <strong>de</strong>l discipulado es la comunión íntima con Él; un<br />

conocimi<strong>en</strong>to <strong>de</strong> Jesús que nada pue<strong>de</strong> conmover.<br />

Agosto 17<br />

¿Estás <strong>de</strong>sanimado <strong>en</strong> tu consagración?<br />

"Jesús le dijo: Aún te falta una cosa: v<strong>en</strong><strong>de</strong> todo <strong>lo</strong> que ti<strong>en</strong>es... y v<strong>en</strong>, sígueme. Entonces, él oy<strong>en</strong>do esto,<br />

se puso muy triste porque era muy rico", Lucas 18:22-23<br />

¿Alguna vez haz oído que el Maestro te dice algo muy duro? Si no, dudo que <strong>en</strong> algún mom<strong>en</strong>to <strong>lo</strong> hayas<br />

oído <strong>de</strong>cir algo. Jesús dice muchas verda<strong>de</strong>s que oímos, pero realm<strong>en</strong>te no escuchamos. Cuando <strong>lo</strong><br />

escuchamos <strong>de</strong> verdad, sus palabras son notablem<strong>en</strong>te duras e inflexibles.<br />

Jesús no se mostró <strong>en</strong> <strong>lo</strong> más mínimo solícito <strong>en</strong> que el jov<strong>en</strong> hiciera <strong>lo</strong> que Él le estaba dici<strong>en</strong>do y no<br />

hizo ningún int<strong>en</strong>to por ret<strong>en</strong>er<strong>lo</strong> a su lado. S<strong>en</strong>cillam<strong>en</strong>te le dijo: "V<strong>en</strong><strong>de</strong> todo <strong>lo</strong> que ti<strong>en</strong>es y v<strong>en</strong>,<br />

sígueme". Nuestro Señor nunca rogó, ni aduló, ni tuvo que poner trampas.<br />

S<strong>en</strong>cillam<strong>en</strong>te pronunció las palabras más severas que oídos humanos hayan escuchado y luego <strong>lo</strong> <strong>de</strong>jó<br />

so<strong>lo</strong>. ¿Alguna vez he oído a Jesús <strong>de</strong>cirme algo duro e inflexible? ¿Me ha dicho algo personalm<strong>en</strong>te, que<br />

yo he escuchado <strong>de</strong> manera consci<strong>en</strong>te? No algo sobre <strong>lo</strong> que yo pueda hacer una ex<strong>pos</strong>ición ante <strong>lo</strong>s<br />

<strong>de</strong>más sino algo que le he escuchado <strong>de</strong>cirme directam<strong>en</strong>te a mí. Este hombre compr<strong>en</strong>dió <strong>lo</strong> que Jesús<br />

dijo, <strong>lo</strong> oyó con claridad, <strong>en</strong>t<strong>en</strong>dió el impacto total <strong>de</strong> sus implicaciones y su corazón se quebrantó. No<br />

partió con una actitud <strong>de</strong>safiante, pero sí muy triste, <strong>de</strong>sanimado por completo. Había v<strong>en</strong>ido a Jesús ll<strong>en</strong>o<br />

<strong>de</strong>l fuego <strong>de</strong> un sincero e int<strong>en</strong>so <strong>de</strong>seo, pero las palabras <strong>de</strong> Jesús <strong>lo</strong> congelaron. Le produjeron un<br />

do<strong>lo</strong>roso <strong>de</strong>sali<strong>en</strong>to <strong>en</strong> lugar <strong>de</strong> fervor y <strong>en</strong>tusiasmo. Y Jesús no fue tras él, sino que <strong>lo</strong> <strong>de</strong>jó ir.<br />

Nuestro Señor sabe perfectam<strong>en</strong>te que una vez que su Palabra ha sido oída <strong>de</strong> veras, tar<strong>de</strong> o temprano<br />

dará fruto. Lo terrible es que algunos <strong>de</strong> nosotros impedimos que fructifique <strong>en</strong> nuestra vida, ahora. Me<br />

pregunto, ¿qué diremos cuando, por fin, resolvamos consagrarnos completam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> ese asunto? Pero hay<br />

algo cierto: Él jamás nos echará <strong>en</strong> cara las fallas <strong>de</strong>l pasado.<br />

109

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!