14.04.2013 Views

Descargar libro - Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau

Descargar libro - Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau

Descargar libro - Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

28 y 29 <strong>de</strong> abril:<br />

Viaje hacia lo <strong>de</strong>sconocido<br />

Por fin, a <strong>la</strong>s tres <strong>de</strong> <strong>la</strong> madrugada <strong>de</strong>l viernes 28 <strong>de</strong> abril, partimos<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>la</strong> ciudad <strong>de</strong> Cár<strong>de</strong>nas más <strong>de</strong> ochocientos bri-gadistas,<br />

agrupados en dos trenes, con veinte y tantos vagones cada uno.<br />

Nadie podía conciliar el sueño. Por primera vez yo viajaba hacia<br />

<strong>la</strong> provincia <strong>de</strong> Oriente y también me estrenaba en <strong>la</strong> aventura <strong>de</strong><br />

montar esa <strong>la</strong>rga serpiente <strong>de</strong> hierro, que al comenzar a moverse<br />

<strong>de</strong>spi<strong>de</strong> un ruido estruendoso y suelta al aire un pitazo ensor<strong>de</strong>cedor<br />

y un olor a humo <strong>de</strong> petróleo quemado, que para mí era <strong>la</strong><br />

señal <strong>de</strong> una carrera sin retorno inmediato. En el vagón íbamos<br />

los «tres mosqueteros por dos» y otro grupo <strong>de</strong> brigadistas, todos<br />

varones. Andrés se había untado en exceso una colonia 1830, que<br />

sobresalía entre <strong>la</strong>s fragancias saturadas <strong>de</strong> alcohol <strong>de</strong> nuestros<br />

<strong>de</strong>sodorantes sólidos <strong>de</strong> barrita. Jesús comenzaba a bromearlo,<br />

diciéndole: «Oye, rompe corazones, ni mi abue<strong>la</strong> usa tanta colonia…»<br />

cuando en ese momento el tren empezó a moverse y todos<br />

quedamos estupefactos durante unos segundos.<br />

–¡Caballeros, el que <strong>de</strong>cidió que <strong>la</strong>s muchachas y los hombres<br />

viajemos separados seguro es cherna como Manolito! –gritó Raúl<br />

muy jocoso, haciendo lo posible por simu<strong>la</strong>r los gestos <strong>de</strong> un homosexual.<br />

–O tiene una hija señorita y teme que pierda <strong>la</strong> virginidad en el<br />

tren –soltó Jesús sin <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> mofarse.<br />

–Total, cuando estemos solos en el monte, el<strong>la</strong>s nos van a vio<strong>la</strong>r<br />

a nosotros – c<strong>la</strong>mó sonriente el Abuelo, quien para alegría mía<br />

integraba nuestro vagón. Y agregó, mientras imitaba un acto<br />

sexual–: ¿Levanten <strong>la</strong> mano los que no han estrenado el fusil?<br />

Y Roberto completó <strong>la</strong> jarana, en medio <strong>de</strong> una sabrosa chanza:<br />

–Pero si seguimos así pronto se nos va a oxidar; por eso, mejor<br />

<strong>de</strong>scansemos y si alguien quiere disparar que le pida a Andrés el<br />

arma <strong>de</strong> Marilyn.<br />

Mientras bromeamos, cada quien se <strong>de</strong>dicaba a amarrar su<br />

hamaca en sendos barrotes a ambos <strong>la</strong>dos <strong>de</strong>l enorme vagón, cuyo<br />

uso normal era para cargar caña y nos servía en ese momento<br />

<strong>de</strong> peculiar transporte, con sus techos cobijados <strong>de</strong> guano para<br />

59

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!