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rocas y minerales FEBRERO 2013
ANÁLISIS DE MERCADO
aprecia en él una suave subida
media entre los años 1993 y 2000,
con un brusco ascenso en los dos
últimos años. Luego hay un periodo
de transición con una media horizontal,
sin crecimiento, hasta 2005, año
éste en el que se produce un nuevo
ascenso hasta el máximo de 2007. A
partir de ahí caída continua de tres
años y un remonte interesante de
dos años hasta el pasado 2012.
La segunda línea que gana mercado
es la de los dúmperes rígidos.
Los datos del 2012 muestras unas
ventas de 64 unidades, un incremento
en el número de unidades con respecto
al 2011, aunque no en el incremento
porcentual. En 2010 se vendieron
26 unidades, que pasaron a
ser 47 en el 2011, lo que supone una
subida del 81%, mientras que en el
2012 se vendieron 64 unidades, lo
que supone un aumento del 36%.
Estos incrementos tan importantes
se deben a las bajas cifras de mercado
de cada línea, a lo que se
añade la irregularidad del mercado
de los dúmperes, al ser la adquisición
generalmente por flotas y cada
mucho tiempo por su larga vida útil.
En el gráfico 4: Dúmperes rígidos,
se aprecian cuatro máximos en los
años 1997, con 229 unidades; el año
2001, con 248 unidades; en 2005,
con 279 unidades; y uno un poco más
atenuado en el 2007, con 222 equipos
vendidos. Los mínimos más llamativos
son igualmente cuatro: en
1993 se vendieron en España solo 32
unidades, la cifra más baja de la historia;
en 1998, 134 equipos; en 2003,
148 unidades; y en 2010, 26 equipos.
Pensando siempre en valores
medios, el mercado de los dúmperes
rígidos crece entre 1993 y 2005 y
baja a partir de ahí, dos años antes
que el conjunto de las ocho líneas.
Las grandes obras tienen siempre
una fase de proyecto, que al no existir
a partir de 2005 limitó la adquisición
de los dúmperes antes que las
restantes líneas. El incremento en las
ventas desde el 2011 se debe a
paquetes de empresas de movimiento
de tierras que han adquirido los
equipos en España y los han enviado
a sus obras en el exterior.
Dentro de este apartado se pueden
incluir las cargadoras de cadenas,
unos equipos que ni ganan ni pierden,
pues en el 2012 se vendieron dos unidades,
igual que en el 2011, viniendo
el 2010 de 4 unidades vendidas. Por lo
tanto, no representa ninguna pérdida,
aunque las ventas son tan reducidas
que prácticamente son unos valores
que afectan muy poco al global del
mercado de maquinaria.
La realidad es que las cargadoras
de cadenas han desaparecido prácticamente
del mercado sustituidas
por excavadoras de ruedas y de
cadenas, retrocargadoras y cargadoras
de ruedas. En esta tercera crisis,
y en los cinco años que le corresponden,
entre 2008 y 2012, ambos
incluidos, el mercado ha sido de 7, 7,
4, 2 y 2 unidades respectivamente,
tras el máximo de 30 en el año record
de las ochos líneas, el 2007.
En el gráfico 5: Cargadoras sobre
cadenas, se puede ver que no es
más que una sucesión de dientes de
sierra, con una trascendencia nula,
ya que los cinco máximos que se
aprecian en él son de 22, 26, 21, 23
y 30 unidades; y los mínimos de 10,
12, 10, 9, 7 y 2 unidades, lo que significa
un arco entre las 2 y 30 unidades,
que no es prácticamente nada
en comparación con el mercado de
cualquier de las otras líneas.
En lo referente a su peso relativo
con respecto a las ocho líneas de
máquinas grandes, en el año 2009
fue el 0,9%; el 0,6% en 2010 y el
0,4% en 2012.
6.2 Líneas que pierden mercado
Cinco han sido las líneas de maquinaria
que han perdido mercado. Las cargadoras
de ruedas y las motoniveladoras
un 20%, un 32% las excavadoras
de ruedas, el 45% los dúmperes
articulados, y un 62% las excavadoras
de cadenas, un valor este último muy
elevado frente a la bastante menor
caída que contabilizó en el 2011.
Las cargadoras de ruedas son los
equipos con la menor caída, conjun