abrir vol iii - iiiª parte - cap. x - Biblioteca Complutense - Universidad ...
abrir vol iii - iiiª parte - cap. x - Biblioteca Complutense - Universidad ...
abrir vol iii - iiiª parte - cap. x - Biblioteca Complutense - Universidad ...
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
y Pravia, con el castillo de San Martín y con la tenencia del alcázar de Oviedo, lo que suponía un<br />
potencial nada despreciable en la región. Aunque el conde de Luna había recibido el encargo de<br />
pacificar el Principado y someter los focos de resistencia favorables al rey legítimo, la tarea no le fue<br />
fácil. A finales de 1465 ya había en Asturias dos bandos: uno <strong>cap</strong>itaneado por DIEGO FERNÁNDEZ DE<br />
QUIÑONES, su hermano SUERO DE QUIÑONES y por otras personalidades asturianas, su principal<br />
objetivo era que Asturias pasase cuanto antes al dominio del príncipe DON ALFONSO; el segundo grupo<br />
lo integraban el conde de Valencia de don Juan, el conde de Trastámara y otros caballeros<br />
relacionados por lazos de parentesco con estos nobles, partidarios de ENRIQUE IV. El enfrentamiento<br />
era inevitable, pero finalmente se prefirió la negociación al derramamiento de sangre. La condesa de<br />
Luna DOÑA JUANA ENRÍQUEZ dio muestras de gran habilidad negociadora y fue la encargada develar<br />
por un traspaso pacífico de la tenencia del alcázar de Oviedo - en manos de DON JUAN DE ACUÑA,<br />
conde de Valencia de don Juan - a favor de su esposo DIEGO FERNÁNDEZ DE QUJÑONEs’<br />
36; dicho<br />
proceso culminó en 1466 con la entrega del castillo de San Martín, también en poder de ACUÑA. De<br />
este modo esta alcaidía representaba el dominio sobre Asturias a la vez que la adscripción de esta<br />
tierra al bando del príncipe DON ALFONSO. Como recompensa a los servicios prestados, éste concedió<br />
al conde de Luna la comarca de Babia, la villa de Avilés, así como los concejos de Grado y Pravia;<br />
sin embargo, la tierra de Babia se resiste a la toma de posesión. En los meses siguientes el conde se<br />
preparó para la confroníacíen final de 1467 en Olmedo, de la que los dos bandos afirman salir<br />
victoriosos’37.<br />
Junto a estos personajes hubo otros también situados en la primera fila de la nobleza que<br />
desempeñaron un importante papel en la época. Las fortalezas que tuvieron en nombre de la Corona<br />
les sirvieron para conseguir sus objetivos políticos. DON JUAN PACHECO, el arzobispo de Toledo, DON<br />
ALFONSO CARRILLO, y el almirante de Castilla DON FADRIQUE, fueron alcaides de importantes<br />
enclaves defensivos del reino. El arzobispo de la sede íoledana y el almirante supieron encubrir sus<br />
verdaderas intenciones con gran maestría y arrancaron al rey la tenencia de tres plazas fortificadas de<br />
la máxima importancia: Avila, Medina del Campo y Valladolid, era el comienzo de la ofensiva<br />
nobiliaria contra la monarquía. Después de la entrevista que el rey mantuvo con ellos y con otros<br />
caballeros y nobles de su bando - el marqués de Villena, el arzobispo de Sevilla DON ALFONSO DE<br />
FONSECA. DON IÑIGO MANRIQUE, obispo de Coria, el conde de Paredes, el conde de Santa Marta.<br />
‘3