Lecciones de la universidad de la vida - Baden-Powell - The Dump
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Mi anfitrión contrató los servicios <strong>de</strong> los Boy Scouts <strong>de</strong> <strong>la</strong> localidad para que hicieran <strong>de</strong><br />
batidores, y colocó un Scout <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> cada escopeta para fijarse en dón<strong>de</strong> caían <strong>la</strong>s presas y<br />
juntar <strong>la</strong>s que cazara.<br />
Al final <strong>de</strong> <strong>la</strong> batida, cuando me volví para <strong>de</strong>jar mi puesto, encontré una pi<strong>la</strong> <strong>de</strong> aves que<br />
había cazado. Entonces me di cuenta que <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> <strong>la</strong> línea <strong>de</strong> escopetas, los muchachos<br />
habían pasado a escondidas algunas <strong>de</strong> <strong>la</strong>s aves cazadas por los <strong>de</strong>más cazadores, como una<br />
contribución para mi montón.<br />
Éste es el espíritu <strong>de</strong> cuerpo entre los Boy Scouts.<br />
De alguna manera, <strong>la</strong> cacería en cubierto no tiene el mismo interés para mí que el cazar<br />
cuando estaba en el medio salvaje. Una posible razón <strong>de</strong> esto es <strong>la</strong> que me dio para no<br />
realizar <strong>la</strong> caza en ojeo, el Mayor <strong>Powell</strong> Cotton, el notable cazador <strong>de</strong> caza mayor:<br />
“Yo soy tan d-d mal cazador“ (6).<br />
(6) d-d : damned= maldito, en el contexto con<strong>de</strong>nadamente.<br />
CAZA DE ANTÍLOPES EN ÁFRICA<br />
Hab<strong>la</strong>ndo <strong>de</strong> cacería, guardo <strong>la</strong> feliz memoria <strong>de</strong> haberme quedado en casa <strong>de</strong> un<br />
Boer, Bertie Van <strong>de</strong>r Byl, en Bredasdorp, cerca <strong>de</strong>l Cabo Agulhas. Tenía una enorme granja<br />
<strong>de</strong> avestruces don<strong>de</strong> había cacería diversa, e incluso habíamos intentado <strong>la</strong> cacería <strong>de</strong><br />
cerdos con <strong>la</strong>nza con los <strong>de</strong>scendientes <strong>de</strong> cerdos doméstico que se volvieron salvajes.<br />
En esta granja estaba preservado un rebaño <strong>de</strong> Bonteboks. Éstos eran una variedad <strong>de</strong><br />
Blesboks (un tipo <strong>de</strong> antílope sudafricano- N.d.T.), que estaban prácticamente extintos en <strong>la</strong><br />
Colonia <strong>de</strong>l Cabo. Mi anfitrión me permitió cazar uno como espécimen. Aquel<strong>la</strong> fue una<br />
ocasión única, no sólo por <strong>la</strong> rareza <strong>de</strong> <strong>la</strong> especie, sino también por <strong>la</strong> manera en que los<br />
cazamos.<br />
Van <strong>de</strong>r Byl manejaba una calesa <strong>de</strong> dos ruedas, tirada por cuatro mu<strong>la</strong>s, y directamente<br />
sobre <strong>la</strong> sabana avistamos <strong>la</strong> manada. Cuando nos vieron, los venados comenzaron a<br />
galopar alejándose a toda velocidad. El látigo hacía ¡crack!, ¡crack!, mientras los seguíamos<br />
muy <strong>de</strong> cerca.<br />
Fue una persecución vertiginosa, mientras saltábamos sobre el difícil terreno, a veces en<br />
una so<strong>la</strong> rueda, a veces en ninguna, yo aferrándome a <strong>la</strong> <strong>vida</strong> y mi conductor, tan excitado y<br />
astuto como un niño, exigiéndoles a sus mu<strong>la</strong>s para que dieran lo mejor <strong>de</strong> sí.<br />
Por un tiempo pareció una persecución sin esperanza, pero como <strong>la</strong> manada cambió su<br />
dirección dando <strong>la</strong> vuelta, fuimos capaces <strong>de</strong> cortar <strong>la</strong>s esquinas y gradualmente acercarnos<br />
a ellos.<br />
Dos colinas <strong>de</strong> tamaño bastante gran<strong>de</strong> aparecieron frente a nosotros, <strong>la</strong> una junto a <strong>la</strong> otra,<br />
y mientras <strong>la</strong> manada iba hacia <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>de</strong>recha, Van <strong>de</strong>r Byl condujo hacia <strong>la</strong> izquierda, y<br />
cuando nos acercamos al espacio entre <strong>la</strong>s dos, me gritó: “ya”, me impulsé en su equipo y<br />
salté justo a tiempo <strong>de</strong> dispararle a una gace<strong>la</strong> macho, mientras pasaba por el espacio entre<br />
<strong>la</strong>s dos.<br />
Por suerte, mi tiro alcanzó a una buena gace<strong>la</strong> y le atravesó el cuello, por lo que cayó<br />
muerta patas arriba. Afortunadamente era un espécimen bastante bueno.<br />
Unos años <strong>de</strong>spués Van <strong>de</strong>r Byl se mudó a otra granja en el Transvaal, se llevó consigo su<br />
rebaño y vivieron en un gran parque.<br />
Cuando comenzó <strong>la</strong> Guerra Boer, <strong>la</strong>s tropas británicas invadieron el país y al llegar a su<br />
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