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146 SEGUNDA PARTE.
Ventilación.
La ventilación que debe darse á las salas de los criaderos
debe ser graduada á la edad y mayor resistencia de
los gusanos. En la segunda y tercera edad debe efectuarse
en las horas más calientes del dia en que la temperatura
oscila entre los 16 á 17° R., abriendo las ventanas para
renovar el aire y que haya una ventilación moderada, sin
exponerlos á las corrientes violentas que pudieran dañarlos;
aunque en la cuarta y quinta edad, que la estación
está más adelantada, deberán tenerse abiertas casi todo el
dia, excepto en las horas frias de la noche, ó cuando
ocurriese algun temporal que la excesiva humedad pudiera
serles mortífera, regularizando la temperatura interior
á los '16 o
Reaumur, que es la más conveniente en las últimas
edades; y en caso que hiciese más frío, es preciso modificar
la temperatura encendiendo la chimenea que debe existir
por regla general en todas las salas, sea para calentarlas,
como para establecer durante la combustion una corriente
de aire que pueda graduadamente renovar el aire de las
salas, y con la combustion que atraviesa se destruyen
los esporos y otros gérmenes que existen en suspension en
la atmósfera.
Al tener las ventanas abiertas, debe evitarse toda corriente
de aire que pueda producir una disminución repentina
de temperatura bajo los 16 grados Reaumur, graduación
mínima á que pueden estar expuestos los gusanos
al ambiente exterior; como también en caso de lluvia ó
tempestad, en que sea preciso cerrarlas, no debe enteramente
privarse á las salas de una renovación graduada y
constante del aire, que se va viciando por momentos á
causa de la enorme cantidad de gusanos que necesitan