Sesiones de enero de 1813 - Academia Puertorriqueña de ...

DISCUSION DEL PROYECTO DE DECRETO
porque el Soberano católico, como se explica Covarrubiss, espemrlae en los paísw donde la espada de esto tribunal
nada puede hacer que perjudique 8 los intereses de la ejerce au8 fueros, porque es un pod8ro8o obstáculo, ha-
Igleeia , para cuya conservacion se le ha dado el Reino, ciendo que todos piensen de un mismo modo en puntos de
segun se explica San Gregorio.
religion.)) Debo añadir lo que el inglés Young dice en su
Antes de reasumir lo dicho, permítaseme que de pasa obra titulada Bjtsnplo de la F?as&a en las siguientes Ralarebata
lo expuesto por el Sr. García Herreros s@bre que bras: tsi yo fuera Ministro de España acon8ejaria.á mi
los Diputados no deben hacer cas0 de la opinion de aua Soberano arreglara la Inquisicion; mas,no le acons8j@a
provincias, y aun votar contra au voluntad conocida. Na que la suprimiera; gracia8 á loe jacobino8 por estos conoes
la primera vez que esta especie ha parecido en públi- cimientos. ti Debo concluir aon lo que D’Alambert escribió
co. No pensaban así los señores que .votaron la libertad al Rey de Prusia en 3 de Julio de .1767. AYO ,no sé, ,de,de
imprenta, pues juzgaban que la opinion pública debia cia, aómo la expulsion de los jesuitas de la España pueda
ser la norma de las resoluciones del Congreso; tanto, que ser un gran bien para la razon mientras la Inquisicion JI
el Sr. Torrera dijo que no podia proceder, con acierto á los eclesiástiacxl gobiernen el Reino,? De todo lo dicho rela
eleccion de Regentes, porque no habiendo libertad de sultan comprobadas las epuivocacion8s con que la comiimprenta,
no sabia por quién 8e decidia la opinion pública, sion ha querido probar la necesidad de extinguir la .Jnquiy
y no 8010 t8nia considermion á la opinion general, sino aicion y las contradicciones ep qU8 ha incurrido. Esta cs
que aun Ib de un pueblo particular, como es Salamanca, una8 veces un establecimisnto político dc que se valieron.
merecia su atcneion, diciendo que allí se opinaba por la los Reyes ppra esclavizar los pueblos; otras,, segun la,
libertad de imprenta. Yo estoy tan de acuerdo con este misma comision, 88 un establecimiento eclesiástico de que
modo de pensar, que no puedo concebir en que se funde 108 Papas se .valieron contra 10s Reyce. Ya se nos prasenr
el Sr. García Herreros para sostener que un Diputada ta como un instrumento el más á prop&ito para re,mach-o
puede votar contra la opinion de su provincia. i&aé otra los.grillos de la esclavitud. Ya aomo un tribunal capaz de
cosa ea un Diputado que un apoderado de SU provincial infundir, miedo á los Príncipe8 y-corno opuesta á su sobeiY
podrá un apoderado ,obrar contra la voluntad de BU po- ranía. Ya se quiere restablecer la primitiva disciplina. Ya
derdante? iCon qué abjeto sc hbn pedido las instruccio - se establecen recuraos. que doscqnocieron los primeros, si:
nes á las provinciaa sino aon el de que 10s Diputados gbren glos de la Iglesia. Resulta igualmente que la oposiciony
en todo conforme al tenor de su voluntad? Porque de otro alborotos de loa malo8 coptra el Sant0 .Ofìciq no le perjUmodo
seria inútil el pedir tales instrucciones. Ni sediga que dican, así como le favoreccn,los elogio8 de loa buenos ca-.
los poderes son ihmitadO8; porque aun cuando así aea, que tólicos y ,las silplicas y clamores de la mayor parte gel
no lo ea, ellos no extienden las facultades más allá de cristianismo peninsular pqr su subsistencia: que las C6raquello
que se puede segun derecho y siempre con arre- tes no,haq embarazado su. estableaimietto, y que las que
glo B. las instrucaiones, de lo cual es Vi8tO deducirse que, han reclamado, solo lo han hecho contra los abusOs, sin
manifestada la opinion de los pueblos á favor de la per- propasarse á pedir su extincion; y ha oido V. M. cómo las
manencia del Tribu.nal Supremo de.la Santa y general In- Córtcs de CatalUiia han votado siempre por la continuaquisicion,
no es lícito á un Diputado separarse de ella sin cion del Santo Oficio; que el Supremo Consejo de Ia Santa
faltar á la conflauza que les ha merecido. V. M. ha se- y general Inquisicion .tiene la autoridad necesaria en cas0
guido siempre esta,conducta, y no tuvo otro motivo para de vacante para juzgar en las causas de la fé; que no hay
modificar 8US decretoa coptra 108 empleados, sino el saber en lae Córtes facultad para mudar la disciplina de laIgleel
disgusto con que fueron recibidos en muchos pueblos li- aia, por lo cual las aauaaa de fé se juzgan por los inquibres,
sidores apostólicos en consorcio de los. ordinarios: que haiC&o
pod& pues, V. M. e+tinguir, el Santo Oficio aa- cer esta vaiiaaion tiene una tendencia cismática, porque
biendo la pesadumbre que caUsaria.esta noticia en la ma- persuade que en las Córtes raeida una facultad privativa
yor y más sana parte de la Monarquía, que pide 821 con- del Sumo Pontífice, ó del Concilio nacional durante la intinuacion?
comunicacion con Su Santipad: que eeta medida, propues-
Antes de concluir dibo_iac& pre&te. $ V.. M; que la ta par la comision, no hará otra cosa. que, aumentar los
aomieion~en el.@. 6.’ del aapítu1o.I del propflctp quiere enemigos de la fé, por lo mismo que facilita la impunidad
alterar el articulo constitucional qUe conssrva cl:fuero mi,- le loa delincuente8 contra ella, no 8010 por medio del,rclitar,
pretendiendo que lo: pierdqn en las causa8 dc fé, zurso de fuerza que propone, aino tambien porque la concuando
en: el, sistema presente de la Inquisicion no sa pro - lenacion puramente ,espiritual que .)e quiqe hagan los ,recede,
6 pr8pder 6 .qn Mjita$, aeriQue.tenga delito que me- verendos Obispos, ea insuficiente para contener á los marezca
Pena, corporal, sin .que se, dé ,parte á 5. Mt para que .oa; test$lca@o esto la experiencia en el b,ibliotecario de
lo permita y dé órden, á, au jefe á @ti de que lo allane, y .aa Córtee, cuya obra está censurada, no por un Obiépo,
aún ee manifiestan los motivos’cuando el Rey quiere 8a- 3ino por muchos de la Iglesia de Espaqa, Sin que au aator
berlos. (Cuál .puede ser ahora la causa JI: qu8 utilidad púr haya sido castigado por la autoridad civil. Y si, eet0 sublica
puede resultar dc- la pérdida de este fuero en loa militares?,
gE8 mayor la heregía de. ellos que la de los p$isanos?.$or
que, pues, estoo no han de perder,sy, juzgado en
:ede ahora, tqué seria extinguido el Santo Oficio? Resul-
;a , además, que el proyecto, bajo del preteatq de reporar
Ios primitivos derechos episcopales, los coarta mhs,
laa causa? de fé y 19. han’ d8 perder 10s militares? Yo no sujetando á los Sres. Obispos al j,nioio de loa legos, que
alcanzo la profundidad de esta pohtica, y!,por .coo nunca ion sua oyejqs, ,en punta de doctrina, en qqF,,?on júeces
acc@eré á eata medida que empeora la .< suerte,+ una claae
tan benemérita y que la rebaja en este punto con ralaprivatiyos,.
y que esta medida, es muy parecida 4 la pro-
?osicion. de Queapel condenada po?, la Silla apostólica.
cion B, los paisanOS.
Por ‘último* qUe el proycc,t0 intenta hn+itar el fúcro mili-
Para reasun& en pocas ~&bras lo d&o bcsta’a’&í, bar,, ,querlen~$o sa,pierd,a’en las causas’de la fé, para 10
quiero hacer presente á V. : M. lo’, que 81. ah&’ hfabli, que
no debe ser ,sospech0ao 4,108 Bmuloe del Santo Oficio, Pice
XI@ r+o, gst;5 autorizada la comkio& cgmo no. lo estuvo
pra,$raW de-$ conviene d no el rt3+r+blecimiento del SUen
SU .DWCC&C pJbl&o cls Bwro~& r aque eatas oqr@entsp prypo: Tr$y+pl de .la Santa.. y gwral Ioqui&c& J“l04
OMBQIM (hbla do IU revoluaioma religioso) ao 487 que learbe tribunales provinoialee ) una vez ,que el (lp@q