L a gestión de los residuos radiactivos, en todas sus facetas, se caracteriza por una consideración a largo plazo. No obstante, lo cierto es que se producen hechos relevantes que conviene, de vez en cuando, recapitular. En este sentido, el año 2000 no ha carecido de hitos y acontecimientos dignos de mención. Tanto en España como a nivel internacional se han producido nuevas realidades y avances significativos, que merecen ser recapitulados. En nuestro país la gestión de los residuos radiactivos ha venido marcada por ser éste el primer año afectado en su totalidad por el 5° Plan General de Residuos Radiactivos (5°PGRR), de julio de 1999. Este documento, aprobado oficialmente por el Gobierno, define las estrategias y actuaciones tanto en gestión de residuos de baja y media -donde el almacenamiento de El Cabril da cumplida respuesta a las actuales necesidades-, como en residuos de alta actividad y combustible gastado de las centrales nucleares, al fijarse las pautas a seguir en almacenamiento temporal, y determinarse nuevos plazos y programas en relación al almacenamiento a largo plazo. Respondiendo a estos nuevos requerimientos, <strong>Enresa</strong> ha puesto en marcha durante este año un nuevo Plan de Investigación y Desarrollo Tecnológico 1999-2003, que partiendo del acervo anterior acumulado, tiene como principal propósito iniciar un periodo -que ha de culminar en el 2010-, en el que se pueda ofrecer una completa evaluación de tecnologías y alternativas que hagan posible una toma de decisiones, por parte de los poderes públicos, en materia de tratamiento final del combustible gastado. Muy ligado a esto es de destacar la inserción de este nuevo Plan de I + D en los programas y proyectos que se desarrollan en los países de nuestro entorno y, muy fundamentalmente, en los que se refieren al 5° Programa Marco de Investigación de la Unión Europea, donde <strong>Enresa</strong> participa en 23 proyectos, liderando algunos de ellos. Todo ello se pudo ver, discutir y analizar de forma exhaustiva en las IV Jornadas de I + D de <strong>Enresa</strong> que se editorial Balance de 2000 desarrollaron brillantemente en Barcelona entre el 21 y el 24 de noviembre pasado. En almacenamiento temporal también se ha dado un paso muy importante con el comienzo de la fabricación de los contenedores DPT, que permitirán el almacenamiento en seco del combustible nuclear gastado de la central nuclear de Trillo en su nuevo almacén en construcción. En cuanto al desmantelamiento de la central nuclear Vandellós I hay que constatar el cumplimiento de los plazos y su éxito organizativo, de manera que en el 2000 se consiguió llegar al ecuador del proyecto de clausura y desmantelamiento al concluir los trabajos de aislamiento y sellado del cajón del reactor. Como acontecimiento internacional de señalada importancia hay que recordar que Córdoba se convirtió entre el 13 Y el 17 de marzo en el gran foro mundial de debate con motivo de la Conferencia Internacional del OlEA sobre la Seguridad en la Gestión de los Residuos Radiactivos, que tenía como punto de partida un tratado internacional: la Convención Conjunta sobre Seguridad de las N aciones Unidas. Lo sustancioso de sus conclusiones confirmó la oportunidad de la convocatoria. La actividad internacional de <strong>Enresa</strong>, además de lo ya mencionado, se ha acentuado al adquirir un auténtico papel protagonista en el consorcio comunitario Cassiopee de asistencia técnica a antiguos Países del Este. Por lo que respecta a lo acaecido en otros países, acontecimientos relevantes del 2000 han sido el informe de viabilidad presentado por el Departamento de Energía (DOE) de EEUU, en relación con el proyecto subterráneo de Yucca Mountain, yel comienzo de las actividades en el laboratorio subterráneo de Meuse-Haute Marne en Francia. Finalmente, se debe destacar el auge notable del esfuerzo de formación e información, gracias a la potenciación y desarrollo de las cátedras de Medio Ambiente, de los cursos de verano y los cinco centros de visitas con que cuenta la empresa. _ estratos • INVIERNO 2001 • I