Contenido Revista Judicial Edicion 2 - Rama Judicial

Justicia es el máximo tribunal de la Jurisdicción ordinaria y está encargado de tramitar
ión; en la foto Palacio de Justicia, Bogotá.
De esta manera, se entiende por qué nuestra
Constitución Política, como la de la mayoría
de países, consagra la Corte Suprema de
Justicia como máximo Tribunal de la Jurisdicción
Ordinaria (Art. 234) y establece como
la primera de sus atribuciones la de actuar
como Tribunal de Casación (Art. 235).
También explica que desde los albores del
desarrollo de la casación laboral, se afi rmara
que, acorde con los preceptos legales y
la doctrina ”… el recurso de casación es
un medio extraordinario de impugnación
de las sentencias, sometido en su formulación
a una técnica especial, sin cuya observancia
no resulta estimable …” , tendiente
a lograr su objetivo principal y sustancial,
que no podría ser otro que el de obtener
el reinado constante de la ley y de su espíritu,
donde su actuación plasma en toda
la extensión como derrotero la unidad y
rectitud de sus aplicaciones, o sea, unifi car
la jurisprudencia nacional del trabajo (G.J.
LXXXVII nums. 2192 a 2193, de febrero
20 de 1958).
Hoy no escapa al mundo jurídico que la
casación sigue velando por que la ley se
cumpla dentro del marco de la Constitución
Política, y por que la supremacía de principios,
valores y derechos subjetivos que esta
consagra, tomen vida o lo que es lo mismo
se materialicen en cada decisión judicial.
Desde esta perspectiva, la presencia de la
casación en el universo del Derecho y concretamente,
en la realidad del trabajo del
hombre, constituye un instrumento de ran-
go constitucional para hacer efectiva la justicia,
en el que la técnica es el vehículo para
garantizar la igualdad de los ciudadanos y
orientar a los jueces en su espléndido trabajo
de armonizar los contenidos axiológicos
del derecho con las situaciones concretas y
específi cas de la cotidianeidad laboral.
Hablar de dignidad humana es hablar del reconocimiento
del ser humano y del respeto
que merece como un fi n en sí mismo y no
como una mercancía que pueda ser instrumentalizable.
Es por eso que esa formulación teórica requiere
mecanismos concretos que permitan
que esa aspiración fundante del Estado Social
de Derecho, consagrada en el Art. 1º de
la Constitución Política, tenga caminos específi
cos que permitan hacerla efectiva.
De lo refl exionado a propósito de este primer
interrogante, se recupera la razón de ser de
la casación con sus requisitos habilitantes, y
la función de la Corte Suprema de Justicia
como Tribunal de Casación, como instituciones
jurídicas que al evitar soluciones notoriamente
injustas permiten recuperar para la
interpretación judicial el respeto, y la ayuda
al ser humano como fi n en sí mismo.
2. En cuanto al segundo de los interrogantes
planteados:
El pensamiento de la Corte en 1958, rememorado
anteriormente, me conduce a
ocuparme del segundo interrogante, al que
ya hice referencia y atañe con la percepción
del mundo jurídico y del usuario en general
en torno al concepto de la “técnica de casación”.
Para ello, es oportuno hacer referencia al signifi
cado etimológico de la palabra “técnica”,
que proviene del latín “technicus”, y este a
su vez del griego “techne”. El Diccionario de
la Real Academia de la Lengua cataloga la
técnica como “Perteneciente o relativo a las
ciencias y las artes”.
Es decir, la técnica en su signifi cación semántica
literal se asocia a un conjunto de
procedimientos para lograr unos objetivos o
propósitos. En el arte se hace referencia a la
“técnica de pintura al óleo”, en la docencia
a “técnica de aprendizaje” y en la ciencia,
en sentido moderno, a la tecnología, entendida
esta como la acción orientada científi
camente, con reglas y datos relevantes,
enderezada a la satisfacción de necesidades
humanas.
José Ortega y Gasset, en su obra “Meditación
sobre la técnica y otros ensayos”, anota
que “… un hombre sin técnica, es decir, sin
reacción contra el medio, no es un hombre”
y luego dice “… el hombre es hombre porque
para él existir signifi ca desde luego y
siempre bienestar”, para terminar afi rmando:
“el hombre, técnica y bienestar son, en
última instancia, sinónimos”…
Recapitulando: de lo anterior se sigue que la
técnica se caracteriza por ser acción racional
que deriva en reglas útiles para alcanzar fi -
nes efi caces, justifi cándose en la medida en
Noviembre 2006 Revista Judicial 7