LA TESIS DEL "CRISTIAJNLSMO-^T^ENO" Y LAS REVISTAS ...
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L. MORTEAU E Y. LE PENQUER<br />
la Iglesia de Jerusalén, y que este ejemplo no fue seguido en otras<br />
partes.<br />
Ningún dogmatismo favoreció el desarrollo del mismo. Al contrario.<br />
Así se puede ver en el pasaje concerniente a la muerte, castigo<br />
sufrido por Ananías y Safira (12). San Pedro, en efecto, no les<br />
reprochó haber violado la puesta en común de los bienes considerada<br />
como un deber fundamental de los primeros cristianos. ¡No!<br />
San Pedro hizo codo lo contrario. Insistió en recalcar al defraudador<br />
que hubiera podido guardar, en plena propiedad, el precio de la tierra<br />
que acababa de vender. En otras palabras: no era por su renuncia<br />
a participar en la puesta en común de los bienes por lo que Ananías<br />
y Safira fueron castigados por el Señor. Fue, según los propios términos<br />
de San Pedro, por haber "mentido al Espíritu Santo" disimulando<br />
su fraude.<br />
"¿No tenías el derecho (el ¡DERECHO!) —hace observar clarísimamente<br />
el primer Papa—, no tenías el derecho de guardar (de<br />
¡GUARDAR!) tu campo cuando lo tenías y, habiéndolo vendido, de<br />
disponer de su precio a tu agradoP",<br />
Prueba manifiesta de que la "puesta en común" de los bienes,<br />
incluso en esta circunstancia trágica, no era considerada como un<br />
imperativo de la moral cristiana.<br />
No hubo, pues, en Jerusalén, nada más calificable como hecho<br />
de una revolución socio-económica, sino una simple experiencia comunitaria,<br />
inspirada por un celo generoso pero utópico. Experiencia<br />
de los primeros cristianos de Jerusalén.<br />
Pero esta experiencia fue conduyente.<br />
Después de un momento de euforia material, precipitó a la Iglesia<br />
de Jerusalén en la indigencia Hasta el punto de que para remediarlo,<br />
San Pablo alertó a los otros cristianos de las costas del mar<br />
Egeo hasta los viveros del mar Negro.<br />
De ahí las advertencias hedías por d ilustre Abad de Solesmes,<br />
Dom Delatte (13): "Condiciones tales, donde lo mío y lo tuyo son<br />
(12) Cf. opus, cit., cap. V, versículos 1 al 11.<br />
(13) ... ea su admirable comentario de las Epístolas de San Pablo, respuestas<br />
en el medio histórico de las Actas de los Apóstoles, t, 1, pág. 54<br />
(Alfred Maure et fíls — Ed).<br />
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