EQuival

REPORTAJES
Para la fortaleza del cuerpo, así como toda
la zona dorsal y lumbar del caballo,
debemos de buscar un equilibrio de los tres
tercios, estando en una misma horizontal,
es así cuando buscando esa misma
horizontal hacemos trabajar el cuerpo del
caballo (dorso, lumbar y abdominal). Se
debe de buscar un estiramiento del cuello,
pero siempre dentro de esa misma línea
horizontal, así como jugar con diferentes
posiciones del mismo. Intentaremos
mantener esa proyección de movimiento
hacia delante, con rectitud y con
regularidad. La búsqueda de esa
regularidad y rectitud en el aire nos dará
una impulsión equilibrada y sin cortes en la
transmisión de la misma, haciendo venir el
movimiento de atrás del caballo hacia
delante.
Para el fortalecimiento del dorso es
importantísimo el equilibrio del cuello y
cabeza, por ello evitaremos trabajar con un
cuello invertido o un cuello volcado sobre
las manos.
CONCLUSIÓN
El facilitar y ayudar al caballo con un buen
equilibrio así como decirle claramente las
órdenes que queremos que realice, hacen
que su trabajo sea mucho más grato hacia
él, por tanto se verá recompensada la
impulsión.
Un trabajo adecuado a su conformación,
estado de doma y carácter, sin abusos pero
exigiendo un esfuerzo capaz de realizar,
también nos da una impulsión correcta. Y
sobre todo recordar el refranero que
dice:”Del amigo y del caballo, ni se abusa
ni se le cansa….pero si lo hacemos
trabajar”.Es importante saber esto, cuando
el trabajo es abuso, y cuando el caballo
quiere abusar de nosotros, queriendo no
trabajar. Recordar siempre que la mayoría
de problemas que hay en los caballos es
por falta de impulsión.
Moraleja.
POR CULPA DE UN TIRÓN DE
MÁS Y UNA PATADITA DE
MENOS…
…tuve un problemón en vez de equitación.