La cultura de El Argar. Un modelo para el estudio de ... - UAB-Asome
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Así, los lugares <strong>de</strong> ocupación pertenecen a cinco <strong>de</strong> las siete sub-áreas que hemos<br />
<strong>de</strong>finido en nuestra explicación <strong>de</strong>l medio actual.<br />
Arribas (1963: 329), por otra parte, consi<strong>de</strong>ra oportunamente que la<br />
fauna también nos ilustra sobre <strong>el</strong> medio ambiente natural y ésta parece estar<br />
más <strong>de</strong> acuerdo con una vegetación semiesteparia: jabalí, équido, rumiante<br />
(cabra-oveja-buey) y cérvido (cervus clama). Corrobado por la presencia <strong>de</strong><br />
esparto y <strong>de</strong> linum usitatissimum.<br />
Sin embargo, <strong>de</strong>bemos añadir que las especies faunísticas, los rumiantes<br />
y los équidos, pue<strong>de</strong>n ser <strong>de</strong> aportación <strong>cultura</strong>l y no indicativos, y <strong>el</strong> resto, <strong>el</strong><br />
jabalí (sus scropha) y <strong>el</strong> gamo (cervus dama) (14) requieren un paisaje <strong>de</strong> bosque<br />
con sotobosque, lo que no <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> estar en contradicción con la vegetación<br />
semiesteparia y mucho más con la estepa xerofítica pura.<br />
Para Almizaraque, <strong>el</strong> análisis <strong>de</strong> los carbones acentúa, como sugiere<br />
Arribas, la contradicción. Netolilzky expone con reservas la presencia <strong>de</strong> al<br />
s y fagus, que falta actualmente en <strong>el</strong> Su<strong>de</strong>ste (15).<br />
Como resultado po<strong>de</strong>mos exponer las contradicciones <strong>de</strong> los análisis. <strong>El</strong><br />
<strong>estudio</strong> edafológico nos lleva a un ambiente sub<strong>de</strong>sértico con vegetación<br />
típica <strong>de</strong> estepa y su<strong>el</strong>os <strong>de</strong>gradados como en la actualidad. Los análisis palinológicos<br />
y <strong>de</strong> los carbones nos obligan a pensar por contra, en la existencia<br />
<strong>de</strong> una mayor humedad, lo que concuerda también con las inferencias realizadas<br />
a partir <strong>de</strong> la fauna.<br />
<strong>La</strong> solución <strong>de</strong> Arribas es que tanto las ma<strong>de</strong>ras como los animales<br />
pue<strong>de</strong>n ser intrusivos, proce<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> las serranías penibéticas. <strong>La</strong> solución<br />
parece la correcta, pero <strong>de</strong>bemos exponer ciertas salveda<strong>de</strong>s.<br />
En <strong>el</strong> caso <strong>de</strong> Almizaraque, la presencia <strong>de</strong> alnus y fagus implica necesariamente<br />
la existencia <strong>de</strong> mayor humedad, pues actualmente no encontramos<br />
caducifolias en la zona salvo restos fósiles, situados más al oeste. Si pensa<br />
os que puedan proce<strong>de</strong>r <strong>de</strong> la penibética <strong>de</strong>bemos establecer que ni la sierra<br />
<strong>de</strong> Cabrera ni la <strong>de</strong> Alhamilla, reúnen condiciones por su escasa altitud (16).<br />
<strong>La</strong>s gentes <strong>de</strong> Almizaraque <strong>de</strong>berían ir necesariamente a las estribaciones<br />
orientales <strong>de</strong> Filabres, siempre sobre una curva <strong>de</strong> 1.300 m., <strong>para</strong> encontrar<br />
ciertas condiciones exigidas que, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego, ahora no se dan, y esto supone<br />
una marcha <strong>de</strong> 20 km. en línea recta sobre terreno <strong>de</strong>sigual. <strong>Un</strong> <strong>estudio</strong> estimativo<br />
<strong>de</strong>l tiempo invertido en ir a buscar la ma<strong>de</strong>ra, realizar <strong>el</strong> <strong>de</strong>smonte,<br />
cargarla y volver al poblado nos indica que se invertirían no menos <strong>de</strong> 48 horas<br />
<strong>de</strong> trabajo continuo, suponiendo siempre que <strong>el</strong> <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> la<br />
tecnolología y <strong>de</strong> las comunicaciones fueran importantes. En <strong>el</strong> caso <strong>de</strong> Los<br />
Millares <strong>el</strong> tiempo invertido sería inferior, aunque no menor <strong>de</strong> 24 horas.<br />
Se pue<strong>de</strong> objetar que la ma<strong>de</strong>ra es un auxiliar <strong>de</strong> construcción <strong>de</strong> las casas<br />
y que dicho trabajo es puntual, pero <strong>de</strong> todos modos la implicación directa<br />
es que se trata <strong>de</strong> un gasto <strong>de</strong> energía innecesario, pues las casas <strong>de</strong> zócalos<br />
<strong>de</strong> piedra y tapial se rematan con ramas y barro y <strong>para</strong> <strong>el</strong>lo <strong>el</strong> gasto invertido<br />
no es rentable; no es necesario utilizar estas especies, bastaría con ramas <strong>de</strong><br />
encina fácil <strong>de</strong> hallar en un radio mucho menor.<br />
ESTUDIOS EDAFOLÓGICOS, PALINOLÓGICOS Y<br />
ANÁLISIS DE MUESTRAS DE CARBÓN<br />
En este apartado sólo contamos con los análisis <strong>de</strong> Kubiena y Scan<strong>el</strong>l <strong>para</strong><br />
Los Millares (17) y <strong>de</strong> Netolilzky <strong>para</strong> Almizaraque.<br />
Kubiena expone que pue<strong>de</strong> asegurar que «la constitución <strong>de</strong>l terreno en<br />
<strong>el</strong> lugar <strong>de</strong> Los Millares fue exactamente igual en la Edad <strong>de</strong>l Bronce I que en