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ARTÍCULOS DE INVESTIGACIÓN
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9. Índice craneal = (anchura del cráneo/
longitud del cráneo) x 100.
10. Índice facial = (anchura de la cara/
longitud de la cara) x 100.
11. Índice nasal = (anchura de la cara/
longitud nasal) x 100. Aunque tradicionalmente
de poco interés en Etnología
animal, consignamos este índice a fin de
completar el cuadro de mediciones.
En otros 18 animales, se ha procedido a la
medición de la alzada a la cruz, longitud
caudal, longitud de la oreja, y longitud
facial (en arco y en cuerda), siguiendo el
procedimiento descrito por Benadjaoud &
Lauvergne (1991), a fin de obtener los
índices caudal, auricular y fronto-nasal:
12. Índice caudal = longitud de la cola/
alzada a la cruz.
13. Índice auricular = longitud de la oreja/
alzada a la cruz
14. Índice fronto-nasal = longitud en arco
de la cara/longitud en cuerda de la cara.
Finalmente, y en base a consultas bibliográficas,
se establece una comparación
biométrica, con parte de los datos
obtenidos, con otras cinco razas ovinas.
RESULTADOS
En la tabla 2 se exponen los valores
lineales obtenidos y, en la tabla 3, los
índices. Como datos más interesantes,
podemos destacar su formato general
en cuadrilátero, con clara tendencia
sarcopoiética aunque a la vez con buena
predisposición para la producción lechera
(antiguamente, la raza había tenido
Figura 1. Representación de componente principal
importancia lechera, habiendo, incluso,
llegado hasta Roquefort) y, desde el punto
de vista etnológico, un tercio anterior
sensiblemente elevado, carácter longilíneo,
mesocéfalo, dolicocranioto y braquiprosopio,
perfil facial convexilíneo, orejas
largas, cola de longitud media, y
grupa convexilínea.
En la tabla 4 se muestran valores
biométricos de otras razas ovinas, a
efectos de comparación. A partir de estos
datos, ha sido posible establecer una
representación de componente principal
(figura 1). Aunque trabajamos con unos
pocos valores, indistintamente de interés
productivo y etnológico, y con valor
discriminante diferente, observamos los
dos ecotipos de la Gallega, por un lado, y la
Canaria y la Xisqueta, por otro; la Roja
quedaría más cercana a la Aranesa, siendo
ambas razas subhipermétricas de marcado
carácter longilíneo y tórax cilíndrico, de
acusada vocación sarcopoiética.
DISCUSIÓN
Algún autor (Babo, 2000) ha señalado que
la Roja Rossellonenca es el producto de un
antiguo cruzamiento entre los ovinos
autóctonos locales y otros procedentes de
Túnez 2 , aunque otros también afirman
que la raza podría descender de la francesa
Solognote o de la alemana Roja de
Cobourg, e, incluso, los hay que afirman
que estaría emparentada con la española
Guirra (aunque personalmente nosotros
rechazaríamos esta posibilidad, debido a
las acusadas diferencias en determinados
caracteres, como, por ejemplo, la cola).
Índice
X±d.e.
Índice corporal 93,11±12,70
Índice de carga
de la caña 21,96±5,90
Índice dáctilotorácico
9,85±1,34
Índice pelviano 85,79±10,85
Anchura inclinada 103,53±12,71
Índice
dáctilo-costal 44,47±4,69
Índice cefálico 43,60±4,53
Índice craneal 127,75±34,39
Índice facial 34,73±5,08
Índice nasal 48,84±4,94
Balance 0,73±0,12
Índice caudal 0,65±0,10
Índice auricular 0,22±0,02
Índice fronto-nasal 0,93±0,05
Tabla 3. Índices obtenidos
Deberíamos ser cautos, de todos modos, a
la hora de asumir estas teorías de formación,
que podrían resultar excesivamente
simplistas o de poco rigor científico, y
derivadas tan sólo de la percepción de esta
gran similitud entre la Roja Rossellonenca
y otras razas de pelo rojizo. Este pequeño
estudio aporta algunos datos que
contribuyen a establecer su morfotipo.
Aún así, debería estudiarse en
profundidad y rigor el tema, recurriendo a
los loci marcadores sanguíneos (analizando
un número suficiente y representativo de
loci polimórficos), estudios citogenéticos
y análisis de la divergencia de los ácidos
nucleicos, mediante las técnicas de los
enzimas de restricción y el análisis del
ADN mitocondrial. La relación y filogenia
entre las razas ovinas rojizas paleárticas
debería incluir otras como las francesas y
alemanas antes citadas, la Roussin de la
Hague, Tunecina, Peona, Guirra, Roja
Mallorquina, Roja Californiana (en la que
ha intervenido la raza Tunecina), e, incluso,
2 “Les moutons de races algériennes sont expédiés en gran nombre à Marseille (1.180.000 en 1913)” (Girard, 1920); en este país, esta raza representa en la actualidad
el 85% de su efectivo ovino total (Atti, 1990)