TOMO 5 CAPITULO 1 - Grupo Leon Jimenes

Capítulo 1 | El continuo período 1960 |8|
|9| El continuo período 1960 | Capítulo 1
El arte, que en sí mismo no tiene más atributo que el de ser pura manifestación de la
cultura del ser humano, a tiempo o destiempo con la situación que se vive, no fue lo
que únicamente y en abstracto resultaba comprometido. Los elocuentes párrafos de la
Declaración de Julio comprometían fundamentalmente al nativo de la sociedad dominicana,
al sujeto creador o recreador artísticamente y, en especial, a los que más estuvieron
vinculados a la experiencia armada, como a muchos que no participaron directamente
en ella, pero eran partidarios emocionales en un momento de la lucha, en el plano
político-partidista, en el cual se pasó a una lucha por la patria; una lucha donde la
identidad colectiva se ponía en juego, para ser menos dominicano o más dominicano.
Por consiguiente, desde el ademán hasta la más minimizada huella concreta del hombre
y de la mujer en nuestra sociedad, tenía que registrarse en pro o en contra. Empesión
norteamericana. Así lo manifiestan en proclama colectiva los artistas dominicanos
al asumir un compromiso de circunstancia, pero de dinámica proyección.
La Declaración de Julio enfatiza: «El arte vive dentro de un compromiso contraído ineludiblemente
con la sociedad y el tiempo que lo crean»… ¿Significa «compromiso» el
estar los artistas en guardia para la defensa soberana o significa que toda creación debía
estar en función de la lucha política Seríamos malos jueces de la historia si nos adentráramos
a esta declaración buscándole más connotaciones que las que manifiesta claramente.
Además, quienes firmaron el texto documental se constituyeron en una fuerza
monolítica carente de todo distanciamiento y diversidad clasista-ideológica. Eran artistas
y eran patriotas, por encima de rango, color, formación intelectual, credo o posición
ideológica, abandonados para comulgar con la causa común. Por eso, ni siquiera un arro,
¿y lo otro de esa insurrección ¿Lo que juzgamos y reconocemos como trascendencia
de los hechos de abril Aparte del juicio valorativo que de ella se pueda hacer, lo
trascendental que dejó la insurrección consistió en que las jóvenes generaciones de esta
sociedad se miraran a sí mismas y redescubrieran lo que eran. El compromiso fue el
mejor testimonio de este «caer en la cuenta» después de treinta años de estar ahogada
por la tiranía y frente al atentado contra la identidad nacional que constituyó la inva-
Danicel|Las iracundas|Mixta/cartón|44.5 x 75 cms.|1969|Col. Familia De los Santos
Orlando Menicucci|Fuerza-tensión-lucha|Óleo/madera|250 x 125 cms|1971|Col. Centro Cultural Eduardo León Jimenes.
Orlando Menicucci|Amor-tensión-lucha|Óleo/madera|250 x 125 cms|1971|Col. Familia De los Santos.