06.02.2015 Views

AGRICULTURAS AFRICANAS Y MERCADO MUNDIAL - eFaber

AGRICULTURAS AFRICANAS Y MERCADO MUNDIAL - eFaber

AGRICULTURAS AFRICANAS Y MERCADO MUNDIAL - eFaber

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

sirve tanto para producir más como para eliminar mano de obra. La importación de<br />

maquinaria representa un coste suplementario para la nación, y los trabajadores<br />

excluidos por las máquinas corren el riesgo de encontrarse pura y simplemente en<br />

paro sin poder producir nada. Este caso puede parecer caricaturesco pero<br />

desgraciadamente es muy frecuente. A lo cual se añade el hecho de que el empleo de<br />

tractores supone que se reduzca el ancho de los setos vivos y de las cubiertas<br />

arbóreas mientras que estos últimos representaban frecuentemente un papel<br />

importante para la fertilidad de los suelos. Por otra parte, los tractores permiten<br />

también a los más ricos apropiarse más aún de tierras agrícolas, a veces en la más<br />

completa legalidad, apoyándose en leyes dictadas desde las capitales afirmando el<br />

precepto: “la tierra para el que la trabaja”. Los equipos motorizados son utilizados<br />

por las grandes familias para apropiarse de las tierras que antes eran de libre acceso<br />

para el resto.<br />

De manera más general la “rentabilidad” de los sistemas de producción<br />

agrícola no debería ser evaluada independientemente de las condiciones económicas<br />

y sociales en las que operan los agricultores: mayor o menor precariedad en la<br />

tenencia de la tierra, dependencia frente a los comerciantes usureros, posibilidad de<br />

trabajo y de salarios en otras actividades no agrícolas, mayor o menor solidaridad en<br />

los clanes o en las aldeas, etc.<br />

¿Vale la pena “mejorar” un rendimiento siempre en aumento sin tener en<br />

cuenta el trabajo, el dinero y los riesgos ¿El interés de gran número de agricultores<br />

no consiste más en reducir sus gastos monetarios para valorizar al máximo la fuerza<br />

de trabajo disponible y minimizar los riesgos de sus bajos resultados Muchos<br />

campesinos pobres se esfuerzan así en cultivar en cada una de sus parcelas una<br />

enorme variedad de cultivos con exigencias agroclimáticas diferentes: maíz, sorgo,<br />

judías, mandioca, ñames, boniato, calabazas, etc. De este modo pueden siempre<br />

recolectar un mínimo de cereales y de tubérculos sean cuales sean los eventuales<br />

accidentes climáticos (sequías, inundaciones, etc.).<br />

En estos momentos existen ya en varias regiones de África técnicas apropiadas<br />

a las condiciones agroecológicas y socioeconómicas de los campesinos que no<br />

recurren exageradamente a los abonos químicos ni a los productos fitosanitarios. La<br />

práctica que acabamos de evocar consiste en asociar simultánea y sucesivamente<br />

varias especies y variedades en un mismo campo, lo que contribuye no solo a<br />

disminuir los riesgos de catástrofes económicas en caso de accidentes climáticos, de<br />

problemas fitosanitarios o de caídas de los precios en los mercados internacionales,<br />

sino que también permite a las plantas cultivadas captar de la mejor manera posible<br />

la energía lumínica para transformarla en calorías alimenticias. Efectivamente, estas<br />

asociaciones de cultivos cubren la totalidad de la superficie agrícola y pocos son los<br />

rayos de sol que no consiguen ser utilizados para la función de la fotosíntesis. Ellas<br />

limitan además la propagación de agentes patógenos y de insectos depredadores, al<br />

tiempo que protegen los suelos de la erosión pluvial o eólica. La integración de<br />

leguminosas en estas asociaciones permite además fijar el nitrógeno del aire para la<br />

fertilización de los suelos y la síntesis de las proteínas. Este reconocimiento de la<br />

sabiduría de los campesinos no quiere decir que no exista ninguna posibilidad de<br />

mejora en la puesta en marcha de estos sistemas de cultivo, sino que, previamente, es<br />

preciso tener en cuenta su racionalidad para buscar cuales podrían ser realmente<br />

esas mejoras. De esta manera se comprenderá cómo la introducción en una<br />

33

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!