CONTENIDO EDITORIAL - cieesc.com

El año 1992 forma parte fundamental de la Empresa Constructora Alfa Ltda.,
empresa de servicios y obras civiles, que al igual que Concretec se destaca por su
protagonismo en las mayores obras de ingeniería del país, tanto públicas como privadas.
Participó, entre otras obras importantes, de la construcción del Banco Nacional
de Bolivia, Clínica Foianini, Comercial Colón, represa Totaitú, Piscina Olímpica, Centro
Comercial El Cristo, Colegio Isabel Saavedra, Coliseo John Pictor Blanco, ampliación
del Colegio La Salle, Shopping Bolívar, Nuevo Hospital Viedma, Condominio Santa
Cruz I y II, Terminal Aérea de pasajeros del Aeropuerto de Potosí, Planta Térmica
Carrasco, Recepción de granos en SAO, decenas de viviendas, diversas plazas y parques,
de la pavimentación de calles y avenidas en las zonas Norte, Sur, Este, Colinas del Urubó,
urbanizaciones Génesis, Barrio Norte, Equipetrol Norte y La Colina de la ciudad de
Santa Cruz y de distintos barrios de las ciudades de La Paz, Cochabamba y Trinidad ;
sistemas de agua potable de distintas unidades vecinales y urbanizaciones de Santa Cruz y
barrios de Puerto Suárez, Quijarro, Paradero, Riberalta, Cochabamba, Portachuelo y
Trinidad; alcantarillados sanitarios en distintos barrios de Santa Cruz y en las ciudades de
Portachuelo y Yacuiba; construcción, mejoramiento vial y pavimentación en las carreteras
Santa Cruz-Abapó, Vita-Apumalla, Machacamarquita-Huanuni y Patacamaya-Tambo
Quemado; diversos puentes en la ciudad de Santa Cruz, puente El Bañado (Sucre),
puente Ivon (Riberalta), 9 puentes en Cochabamba, puente Parapetí III (Muyupampa),
45 puentes en la carretera Héroes del Chaco, mantenimiento del puente Eisenhower y
puente Sábalo en el departamento de Tarija.
Es a través de sus empresas que Rolando Nayar Velarde se realiza como ingeniero
en toda su dimensión, en ellas vuelca todos sus conocimientos, desarrolla sus inquietudes
y ejercita su profesión a fondo. También en ellas encuentra el instrumento fundamental
para dar rienda suelta a su visión empresarial y su tremenda capacidad de trabajo.
Hombre de gran energía y de un profundo amor por Santa Cruz, no pudo
permanecer ajeno a nuestro quehacer y se involucra en diversas instituciones aportando
con generosidad su inteligencia. Es así que forma parte de la Sociedad de Ingenieros de
Bolivia, de la Cámara Departamental de la Construcción de la cual fue su Presidente, de
la Cámara Boliviana de la Construcción como Vice-presidente, además de ser Consejero
de CRE, asesor de SUMA, presidente de la Fraternidad Urupé y Vice-presidente del
Consejo de Administración del Instituto Cooperativo Educacional Franco-Boliviano,
cargos que ejerció con responsabilidad, honestidad y dedicación.
Rolando fue un hombre de buenos principios y grandes virtudes. Dedicado hijo,
esposo y padre. Hijo de Rolando Nayar Vespa y Silvia Velarde de Nayar, fue el segundo
de cinco hermanos. Se casó con Cindy Alarcón y tuvo tres hijos: Cindy, Valeria y
Rolandito.
Fue un constructor a cabalidad, su vida fue un transcurrir de obras, comenzó
construyéndose a sí mismo, forjando un hombre recto, de sólida formación moral y por
sobre todo de una profunda generosidad que la practicó a través de la amistad. Continuó
su obra al formarse como ingeniero civil para luego destacarse como empresario, pero su
obra cumbre, su familia, fue en la que derrochó con mayor dedicación su cariño y
capacidad.
Que su ejemplo se transforme en un mensaje para que todos los ingenieros
continuemos su labor, porque nos demostró que a todas las obras de nuestra vida hay
que ponerles empeño y voluntad, para crecer como persona, como familia y como
comunidad.
Nuestro reconocimiento será por siempre. Su memoria estará con nosotros, no
solamente cuando veamos carreteras, puentes o edificios, o cuando contemplemos las
estrellas en las que seguramente está comenzando a construir, sino también cuando
sintamos, en cualquier momento, un mínimo y profundo gesto de amistad verdadera.