10.07.2015 Views

ri 21 editorial.pdf - IRI

ri 21 editorial.pdf - IRI

ri 21 editorial.pdf - IRI

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

jada de aquel “nuevo orden internacional”que algunos pronosticaban. En cambio comolo expresamos en la presentación del Anua<strong>ri</strong>o1994 del Instituto, en mayo último, “elmundo de hoy ha perdido sus certitudes ynos encontramos con muchas más preguntasque respuestas”. Entre algunos de losinterrogantes de este fin de siglo, nos enfrentamoscon nuevos dramas: los refugiadosque se cuentan por millones y en va<strong>ri</strong>oscontinentes. Las “limpiezas étnicas” en elcorazón de Europa, que pensamos había aprendidola lección de la irracionalidad humana.La degradación continua del medio ambiente,como si ya la Conferencia de Río pertenecieraal pasado remoto. El narcotráfico ysu asociado, el terro<strong>ri</strong>smo que están creandoun nuevo jinete del apocalipsis “en los tiemposposmodernos”. El dramático crecimientodemográfico del planeta, que según el Fondode las Naciones Unidas para la Población,analizado en la reciente Conferencia del Cairosobre Población y Desarrollo, llevará la poblaciónmundial a contar entre 10.000 y 14.000millones de seres humanos en el año 2050, yla misma aumenta casi 1.000 millones cadadécada. Como lo hiciera notar el histo<strong>ri</strong>adorestadounidense Paul Kennedy, el 95% de estecrecimiento ocur<strong>ri</strong>rá en los <strong>ri</strong>ncones más pobresdel globo, en cambio en las sociedadesmás <strong>ri</strong>cas, las poblaciones están creciendo conmucha lentitud o incluso (como en Italia,Francia y el Japón) están en franco retroceso.La desintegración social, incluso de paísescentrales, que como lo señala la convocato<strong>ri</strong>aa la Cumbre Mundial sobre DesarrolloSocial a realizarse en marzo del año próximoen Copenhague, Dinamarca: “A diferenciade la perspectiva de progreso social y económicoque pareció vislumbrarse a la sazón,el fin de la guerra fría ha dado pie, en realidad,a una -paz fría-, caracte<strong>ri</strong>zada por unaatomización política y desestabilización socialgeneralizadas, donde la pobreza y el desempleoson crecientes, acompañados de una sensaciónde insegu<strong>ri</strong>dad cada vez mayor”.En el plano regional, otra vez presente elÁf<strong>ri</strong>ca, interpelando a la conciencia de lahumanidad. ¿Es posible banalizar el horror?.Los acontecimientos de Ruanda, que perdiócasi la mitad de su población entre muertosy refugiados, ante la pasividad de la sociedadinternacional nos parecen dar lamentablementeuna respuesta positiva. Ante tantatragedia af<strong>ri</strong>cana, por lo menos una pequeñalucesita iluminó al continente, enMozambique, donde se celebraron pacíficamentelas p<strong>ri</strong>meras elecciones multipartida<strong>ri</strong>asde su histo<strong>ri</strong>a, con la participación de las antiguasfacciones que se habían desangradoen una cruenta guerra civil.El tratamiento del caso haitiano por lasNaciones Unidas dejó abierto otro gran interrogante:¿La resolución 940 del Consejo deSegu<strong>ri</strong>dad responde a la letra y el espí<strong>ri</strong>tu dela Carta de la Organización Mundial?. Nosotrospensamos que la respuesta es negativa.P<strong>ri</strong>mero es necesa<strong>ri</strong>o recordar, el carácter exclusivamenteinterno del conflicto, porque sibien defendemos a ultranza como uno de losp<strong>ri</strong>ncipios fundamentales de las relaciones internacionalesla protección de los derechoshumanos, no podemos dejar de advertir laenorme hipocresía que significa considerar elcaso de Haití y no tratar de la misma formalos casos de Bosnia o Ruanda por poner sólodos ejemplos, entre muchos, donde no reinanprecisamente el respecto a los derechosdel hombre.Segundo, es dable preguntarse. ¿Haití amenazarealmente la paz y la segu<strong>ri</strong>dad internacional,como lo establece en susconsiderandos la resolución?. Tercero, el capítuloVII de la Carta, no se termina en elarticulo 42, como parecería de<strong>ri</strong>varse de lapráctica de la Organización, a partir de laguerra del Golfo y las resoluciones poste<strong>ri</strong>oresdel Consejo. Pues si no se implementa unverdadero Comité de Estado Mayor, como losprevén los artículos 43 y siguientes, las NacionesUnidas terminarán legitimando las accionesde una gran potencia, y entonces lalucha por una verdadera democratización dela sociedad internacional quedará para otrostiempos. Cuarto, ¿Dónde está otro de los grandesp<strong>ri</strong>ncipios del Derecho Internacional contemporáneo,y además profundamente arraigadoen nuestra región, como es el p<strong>ri</strong>ncipiode No Intervención?. El cual no figuraba entrelos p<strong>ri</strong>ncipios de la Carta en 1945 y fue elGrupo Latinoame<strong>ri</strong>cano que lo impulsó a travésde la adopción de la resolución <strong>21</strong>31 de 1965y poste<strong>ri</strong>ormente reforzado por la resolución2625 de 1970. Por parte la última reforma ala Carta de la OEA, el Protocolo de Cartagenade Indias, lo consagra de la siguiente forma:“Promover y consolidar la democracia representativadentro del respeto al p<strong>ri</strong>ncipio deno-intervención”. Quinto, los precedentes sonmuy importantes en la práctica de la Organi-EDITORIAL17

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!