INICIO EPISCOPALministerio muy estable, casi en un mismo lugar fijo,con casi un mismo grupo <strong>de</strong> gentes, y yo que conocíacómo andaban <strong>los</strong> obispos: les amanece en un lugar,les anochece en otro... son itinerantes, verda<strong>de</strong>ramenteperegrinos, me daba miedo ese <strong>de</strong>splazamiento.Y en segundo lugar, <strong>de</strong>cía yo: Ahora voy a aceptarser Obispo Auxiliar <strong>de</strong> Guadalajara porque dicen queme lo está pidiendo el Papa a través <strong>de</strong> mis superioresinmediatos; pero sé que un día tal vez ya no va a serGuadalajara, pue<strong>de</strong> ser otro lugar. ¿Seré capaz yo <strong>de</strong>estar <strong>de</strong>sprendido también <strong>de</strong> Guadalajara? ¿Serécapaz <strong>de</strong> volver a renunciar, <strong>de</strong> un día para otro, atodos mis proyectos?Al final, aquel insomnio salpicado <strong>de</strong> oración, oun poco <strong>de</strong> oración lleno <strong>de</strong> insomnio, <strong>de</strong>sembocó enque sí aceptaría la propuesta.Y llegó el día <strong>de</strong> <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>rse <strong>de</strong> GuadalajaraSobre su escritorio estaba una Biblia, su liturgia <strong>de</strong>las horas, y su libro guía para sus meditacionesdurante el ejercicio espiritual que realizaría duranteseis días. Este libro se encontraba abierto en unapágina que llevaba por título: «El sentido <strong>de</strong> la Cruz».Aceptar el peso <strong>de</strong> la cruz y renunciar a <strong>los</strong> planespropios, para seguir con amor y fe a Cristo, hacobrado un sentido especial para este hombre que<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> casi siete años ha sido Obispo Auxiliar <strong>de</strong>Guadalajara.Porque <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l 9 <strong>de</strong> enero <strong>de</strong> 1999, la cruz <strong>de</strong>Javier Navarro ha tomado otro nombre: <strong>San</strong> <strong>Juan</strong> <strong>de</strong><strong>los</strong> <strong>Lagos</strong>... Una diócesis <strong>de</strong> historia y <strong>de</strong> amorcristiano.- Esta vez no fue el Nuncio quien me llamó, sinoel Car<strong>de</strong>nal <strong>San</strong>doval, el hombre que fue mi Rector enel Seminario. Lo cual agra<strong>de</strong>zco porque me fue másfamiliar y, a<strong>de</strong>más, me ahorró una feria (ríe) pues enlugar <strong>de</strong> viajar a la Ciudad <strong>de</strong> México, simplementeme trasladé a <strong>San</strong> Pedro Tlaquepaque.Así, sentados en <strong>los</strong> equipales <strong>de</strong>l corredor <strong>de</strong> lacasa <strong>de</strong>l Car<strong>de</strong>nal <strong>Juan</strong> <strong>San</strong>doval, éste dijo a JavierNavarro: «El Nuncio me habló esta mañana, y mecomunica que quiere nombrarte Obispo <strong>de</strong> <strong>San</strong> <strong>Juan</strong><strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>Lagos</strong>. ¿Aceptas o no?».- La noticia realmente me <strong>de</strong>sconcertó, porque yoandaba totalmente en otros trabajos, con todo elentusiasmo por la visita <strong>de</strong>l Papa, con todo arregladopara ir... Y le pregunté: ¿Cuándo hay que respon<strong>de</strong>r?Porque la vez anterior me había dado un plazo; a loque el Car<strong>de</strong>nal me dijo: ¡Pues ya!.Yo no supe que respon<strong>de</strong>r, y lo primero que le dije,para darme tiempo <strong>de</strong> pensar, fue: Bueno ¿y usted quéopina? (Ríe)Esto me ayudó a pensar, a conocer su opinión ydije que sí, y me sostengo en ese sí.Aunque no voy a negarlo, me ha costado trabajoirme <strong>de</strong>sprendiendo poco a poco <strong>de</strong> Guadalajara,pero ya <strong>de</strong>s<strong>de</strong> aquella noche <strong>de</strong> 1992 ya lo teníaresuelto, sabía que iba a pasar y si hubiera sido algunaotra diócesis; sé que también habría dicho que sí.Un doble reto: ser amigo, e impulsar la labormisioneraEl próximo 21 <strong>de</strong> marzo, será el día en que JavierNavarro tome posesión como Pastor <strong>de</strong> esta nuevadiócesis. Por lo que en la víspera <strong>de</strong> este acontecimientooficial, ya vislumbra un doble reto a afrontar:-Acercarme a mis hermanos sacerdotes, conocer susnecesida<strong>de</strong>s, ser su amigo, enten<strong>de</strong>r<strong>los</strong> tanto comolí<strong>de</strong>res pastorales y como seres humanos; a<strong>de</strong>más,encontrar la forma <strong>de</strong> impulsar la labor misionera <strong>de</strong>la Iglesia.Con esta forma <strong>de</strong> pensar, se observa claramenteque la sencillez, ha sido la clave con la que este pastorse ha ganado el cariño, la amistad y el respeto <strong>de</strong> cadauno <strong>de</strong> <strong>los</strong> sacerdotes y seglares <strong>de</strong> la diócesis tapatía:-Siempre he pecado <strong>de</strong> poca formalidad, pero sientoque eso me ha ayudado a que con la relación que llevócon <strong>los</strong> miembros <strong>de</strong>l presbiterio, y con gran cantidad<strong>de</strong> laicos, no me vean lejano, sólo como el Obispo,sino más que nada como el amigo, su amigo.De esta forma, le preguntamos: -¿cómo podríaauto<strong>de</strong>finirse?-Javier Navarro es un hombre que ha venidocaminando con mucha confianza en la provi<strong>de</strong>ncia<strong>de</strong> Dios, abierto al proyecto <strong>de</strong> Dios en su vida, enocasiones inesperada; pero que ha aprendido a respon<strong>de</strong>rcon firme convicción al llamado que Cristo lehace a través <strong>de</strong> su Iglesia y a ser amigo <strong>de</strong> presbíterosy seglares.Qué sereno se ve en este instante al Obispo JavierNavarro. Cómo vive en búsqueda <strong>de</strong> la voluntad <strong>de</strong>Dios y cómo contempla confiado, ahora a <strong>San</strong> <strong>Juan</strong><strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>Lagos</strong>; pues sabe que su Madre, la VirgenMaría, «la Virgen <strong>de</strong> <strong>San</strong> <strong>Juan</strong>», también lo estáesperando... pág.32Bol-<strong>202</strong>
INICIO EPISCOPALPoesía <strong>de</strong> un sacerdote<strong>de</strong> GuadalajaraPADRE OBISPO JAVIER:Tengo días escondido en mí mismo, buscando elmejor traje a mi pensamiento para po<strong>de</strong>r <strong>de</strong>cirte quesiento un agra<strong>de</strong>cimiento sincero.Me senté y con el fondo <strong>de</strong> esta música <strong>de</strong> G.Frie<strong>de</strong>rich Haen<strong>de</strong>l, comencé a <strong>de</strong>sacomodar unasi<strong>de</strong>as que estaban guardadas: tiraba unas a la <strong>de</strong>recha,otras a la izquierda, al frente y atrás, volteabapara todos lados y no hallaba nada; entre más<strong>de</strong>sacomodaba más oscura se hacía mi habitacióninterior.Por fin, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> varios días me encontré unapalabra: «GRACIAS». Tomé la palabra mirándolauna y otra vez, la <strong>de</strong>jaba y la volvía a tomar hastaque salí <strong>de</strong> mí mismo; y quiero ahora que medisculpes, pero no hallé otra palabra más apegada ami sentimiento; otra disculpa más te ofrezco: nosupe pulirla porque me dije: hay cosas que por<strong>de</strong>sgastadas brillan más, me limité a soplarle con elsoplo <strong>de</strong>l Espíritu para que le quitara el polvo.Una vez que le quité el polvo, la envolví enpoesía y música.No temas Pastor ObispoRespuesta <strong>de</strong> Javier ObispoEncuentroDe cara al caminocon el rostro levantadoporque estás con Cristono temas hermanoPastor y Obispo.Dos amores te están llevandodos amores divinosuno te da el calladola mitra y el anilloy otro, el regazo<strong>de</strong> María que está contigosoñandoque llevas como testigo<strong>de</strong> Cristo, su rebaño.De cara al camino,firme el paso,pasa por el postigo<strong>de</strong> la puerta <strong>de</strong> <strong>los</strong> Altos.No temas Pastor y Obispoque el viento huracanadoes más débil que el Espíritu.Escuché su voz,en el silencio,era Dios,mi Padre Buenoquien me señaló<strong>los</strong> proyectos<strong>de</strong> estar con el Pastorllevando <strong>los</strong> cor<strong>de</strong>ros.Alcé mi vozy dije al Nazareno:Te seguiré, Señor,llevando el Evangeliocon la fuerza <strong>de</strong>l amor,como rosa <strong>de</strong> <strong>los</strong> vientos,<strong>de</strong> la gloria <strong>de</strong>l Taborgozo y alimentoa la Cruz <strong>de</strong> mi Pasiónen las huellas <strong>de</strong>l Maestropara morir <strong>de</strong> amorcomo él,con <strong>los</strong> brazos abiertos.Encuentro celestialtan lleno <strong>de</strong> esperanzapara el que sabe amaren esta nueva jornada.Abre sus brazos <strong>San</strong> <strong>Juan</strong>,las puertas <strong>de</strong> sus casas,su Iglesia Catedral,su corazón en llamas.Una estrella es la señalsobre la nube blanca,llena <strong>de</strong> amor maternaly el cielo en su mirada.Padre Obispo, que seas el Imán<strong>de</strong> Cristo con tu palabray una nueva señal<strong>de</strong> nuevas esperanzas.Padre Javier Obispo: «GRACIAS»Dios bendiga tus <strong>San</strong>daliasque van a <strong>de</strong>jar huellas Marianas.Zalatitán, Jal. Marzo 16 <strong>de</strong> 1999Bol-<strong>202</strong>pág.33