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FERIAS
“SURGIERON TEMAS COMO LA PURIFICACIÓN
DEL AGUA CON LAS RAÍCES DEL CÁÑAMO, EL
CÁÑAMO COMO FORRAJE Y EL USO DE LAS
SEMILLAS COMO ALIMENTO PARA HUMANOS”
EXPO CANNABIS URUGUAY 2016
MATEMÁTICAMENTE,
URUGUAY TIENE
CHANCE
La Expo Cannabis Uruguay hizo énfasis en la pasada edición en el uso industrial del cáñamo. En
la primera feria trataron sobre el cannabis en general. La segunda vino de la mano del potencial
terapéutico de la marihuana. Y ahora se privilegiaron las posibilidades que esta planta tan versátil
tiene para ofrecer en el plano de las industrias que requieren su fibra, tan poco valorada por la
sociedad en general y tan preciada para activistas y amantes del cannabis.
por JC Eisenberg / fotos: Nicolás Celaya adhocFOTOS
La Expo nació un año después de
votada la ley de regulación del mercado
de cannabis en Uruguay, en el
2014. Su objetivo fue, y es, el acceso
a la información sobre el cannabis,
la reglamentación, la difusión de la
ley y su alcance, ya que todavía no
se ha implementado una campaña de
medios de comunicación, como obliga
la ley a los gobernantes que están
en falta, digámoslo claro. Entonces la
Expo cumple un papel de educación
ante la incertidumbre con “un espacio
neutral de información. No estamos
vinculados con empresas, somos
un proyecto neutral, una plataforma
para encontrarse, para saber quiénes
somos y qué hacemos. Porque todavía
es todo muy underground. Pero no
deja de ser una industria y necesita un
espacio de encuentro anual para revivir,
reconectar el negocio, hacer que la
industria avance. Pero también somos
nexo entre la información estatal, que
a veces está desprendida o desconectada
de la población”, dice Mercedes
Ponce de León, una de las organizadoras
e integrante del colectivo Uruguay
Siembra que lleva adelante la Expo.
La feria uruguaya, al ser en un país que
técnicamente tiene toda la cadena legal
del cannabis, debe ser especialmente
cuidadosa con la transparencia para
sacar de la nube de humo y de las pibas
en bolas la imagen de lo cannábico, es
decir, sacar esa imagen que se tiene del
movimiento cannábico y del cannabis,
mostrar el asunto a la población en
general sin prejuicios y con imágenes
claras, no con prejuicios y estereotipos
distorsionados de cómo son las cosas.
“Necesitamos otra imagen de qué es
el cannabis y teniendo la presencia del
Estado en el evento, siendo la feria de
interés ministerial, nos da fuerza para
seguir porque vale la pena hacerlo y
ayuda a quitarle el estigma al tema y a
que los usuarios encuentren un lugar
de confort”, dice Mercedes.
En la primera Expo Cannabis Uruguay,
pasaron 6.000 personas, al año
siguiente la visitaron 7.000 personas y
en esta tercera edición 9.000 personas
llegaron durante los tres días al parque
de exposiciones del Laboratorio
Tecnológico del Uruguay (LATU) para
fumar sus caños, armarlos, compartirlos
y, sobre todo, para pasar un fin de
semana entre amigos. Hubo muchos
visitantes de la región del Cono Sur y
también de otros lugares. La experiencia
uruguaya todavía atrae la atención
de unos cuantos. Aunque fue bastante
claro que, por ejemplo, los bancos de
semillas no estuvieron tan presentes
como en otros años, probablemente
por las restricciones, o mejor dicho,
por el vacío legal que el país tiene en
cuanto a la reglamentación de la venta
de semillas.
Por todo eso la Expo Cannabis Uruguay
2016 buscó la vinculación del potencial
de la planta con la ciudadanía,
con la clase política y los empresarios,
para promover el desarrollo del sector.
Entre algunos ejemplos de esa sinergia
en la que se trabajó, surgieron temas
como la purificación del agua con las
raíces del cáñamo, el cáñamo como
forraje y el uso de las semillas como
alimento para humanos. El decreto del
Uruguay sobre cáñamo industrial no
considera al cáñamo como alimento
para seres humanos. “Y eso es una
grave falla”, dice Ponce de León. “Se
sabe que las semillas son una gran
fuente de proteínas, de ácidos grasos,
aminoácidos, aceites omega. Entonces
es bueno hacer presión para ver si
podemos cambiar algo de esto. Más
allá del potencial que tiene en la industria
alimenticia, hace que otros cultivos
sean más valorados económicamente.
Podés usar la semilla para hacer un
aceite que se pueda comer y usas el
resto de la planta para otras cosas”.