Ganesha-El-Dios-de-la-Sabiduria-Segunda-Parte-y-la-Iniciacion-del-Dragon
Ganesha-El-Dios-de-la-Sabiduria-Segunda-Parte-y-la-Iniciacion-del-Dragon
Ganesha-El-Dios-de-la-Sabiduria-Segunda-Parte-y-la-Iniciacion-del-Dragon
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
- XXXIV -<br />
La Sil<strong>la</strong> o Trono <strong>de</strong> Lucifer <br />
Reservado para el Hermano Francisco <strong>de</strong> Asís<br />
"Visión que tuvo el hermano Pacífico, en <strong>la</strong> que oyó<br />
que el trono <strong>de</strong> Lucifer estaba reservado al humil<strong>de</strong><br />
Francisco."<br />
"60. Al amanecer volvió el hermano Pacífico. <strong>El</strong><br />
bienaventurado Francisco estaba en oración ante el<br />
altar. <strong>El</strong> hermano Pacífico lo esperó fuera <strong>de</strong>l coro,<br />
orando también ante el crucifijo. Comenzada su<br />
oración, fue elevado y arrebatado al cielo -si en el<br />
cuerpo o fuera <strong>de</strong>l cuerpo sólo <strong>Dios</strong> lo sabe (1 Cor<br />
12,2-3)-, y vio en el cielo muchos tronos, entre los<br />
que sobresalía uno más alto, más glorioso y más<br />
resp<strong>la</strong>n<strong>de</strong>ciente que los <strong>de</strong>más y recamado <strong>de</strong> toda<br />
c<strong>la</strong>se <strong>de</strong> piedras preciosas. Cautivado por su<br />
singu<strong>la</strong>r belleza, empezó a pensar <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> sí <strong>de</strong><br />
quién sería aquel sitial. Y al momento oyó una voz<br />
que le <strong>de</strong>cía: 'Este trono fue <strong>de</strong> Lucifer, y en su lugar se<br />
sentará en él el humil<strong>de</strong> Francisco'."<br />
"En cuanto volvió <strong>de</strong>l rapto, el bienaventurado<br />
Francisco salió fuera y se llegó a él. <strong>El</strong> hermano<br />
Pacífico, con los brazos cruzados en el pecho, se<br />
arrojó a los pies <strong>de</strong> Francisco. Y, consi<strong>de</strong>rándolo ya<br />
sentado en el trono que había visto en el cielo,<br />
sollozaba: «Padre, ten piedad <strong>de</strong> mí y pi<strong>de</strong> al Señor<br />
que se compa<strong>de</strong>zca <strong>de</strong> mí y me perdone los<br />
pecados». <strong>El</strong> bienaventurado Francisco, dándole <strong>la</strong><br />
mano, lo levantó, y conoció al instante que algo<br />
había visto en <strong>la</strong> oración. Aparecía todo<br />
transformado, y hab<strong>la</strong>ba al bienaventurado<br />
Francisco no como a persona viviente, sino como a<br />
quien reina en el cielo."<br />
"Acto seguido, como no quería reve<strong>la</strong>r <strong>la</strong> visión al<br />
bienaventurado Francisco, empezó a proferir<br />
pa<strong>la</strong>bras inquiriendo como <strong>de</strong> lejos, y, entre otras, le<br />
dijo: '¿Qué piensas <strong>de</strong> ti, hermano?' 'Me parece -dijo el<br />
bienaventurado Francisco- que soy el mayor pecador <strong>de</strong> todo el<br />
mundo'. Y, <strong>de</strong> pronto, el hermano Pacífico percibió<br />
en su alma esta voz: 'Por aquí pue<strong>de</strong>s compren<strong>de</strong>r<br />
que es verda<strong>de</strong>ra <strong>la</strong> visión que has tenido. Como<br />
Lucifer, por su soberbia, fue arrojado <strong>de</strong> aquel sitial,<br />
así Francisco, por su humildad, merecerá ser<br />
ensalzado y sentarse allí'." ("Espejo <strong>de</strong> Perfección.").<br />
<strong>El</strong> anterior testimonio tiene un gran valor, porque<br />
proce<strong>de</strong> <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> los más allegados Discípulos <strong>de</strong> San<br />
Francisco <strong>de</strong> Asís.<br />
"Lucifer" significa "Portador <strong>de</strong> Luz".<br />
Para los antiguos, "Lucifer" no significaba ni el "Diablo"<br />
ni "Satanás" ni el "Demonio".<br />
138