Revista Sala de Espera Venezuela Nro 154, Abril-Mayo 2017

Portada
-Quevedo dice en su stand up de
la película: “Hay que exagerar
a veces”. ¿Te ha tocado?
-(Risas) ¡Nooo! Soy demasiado honesta,
creo que hasta es un defecto.
Sus raíces, su esencia
Cuando Ruddy Rodríguez, quien fue
la primera actriz venezolana que protagonizó
en Colombia, apareció al rato en
su país, fue criticada porque hablaba con
acento colombiano y sus seguidores decían
que había perdido la venezolanidad. Abril
ha hecho dos novelas caleñas y dos novelas
cachacas, para lo cual tuvo que trabajar
el acento y también se le pegó, pero en su
caso asegura que ha sido circunstancial por
las exigencias de los personajes y agradece
que todos los públicos han sido amables y
generosos con ella: “Nunca me han criticado
ni se han ofendido, por el contrario me
han abierto las puertas”.
-Tu internacionalización comenzó
en Colombia. Ahora estás
haciendo algo para FOX y una
serie para Univisión, en Estados
Unidos. Definitivamente se ve que
tú estás donde te llame el trabajo
¿A qué otros países quieres llegar?
-Lo dijiste perfecto, estoy donde me
llame el trabajo y no me detengo jamás,
propicio que me llame en lugares diferentes
siempre. Sueño con Francia, México,
España, Estados Unidos, no hay límites.
-Ahora también estás como
productora con el proyecto
Golden Ceiba. ¿Cómo te ves más
en el futuro, como productora,
directora o siempre actriz?
-He participado en algunos proyectos
de Golden Ceiba estrenándome como
productora, hicimos una película en Cuba,
Habana Instant, con la que ganamos varios
premios en festivales de cine, ha sido una
experiencia súper enriquecedora. Espero
trabajar mucho con Golden, pero creo
que he aprendido que por sobre todo, amo
actuar. Estoy explorando la producción,
pero ¡soy 100% actriz!
-¿Teatro, cine o televisión?
-(Risas) La pregunta del millón. Amo
actuar, es así de simple. El teatro es mi vida,
me hace feliz como nada más, el cine es
magia pura y la televisión me ha enseñado
muchísimo. Disfruto hacer los tres y espero
siempre poder hacer los tres.
-¿Hollywood y Nueva York
te quitan el sueño?
-Miles de cosas me quitan el sueño, no
paro de pensar y a veces sufro de insomnio.
Nueva York y Hollywood son mi meta, son
un sueño para hacer realidad. No me quitan
el sueño, me inspiran para seguir soñando.
-A ti el arte te corre por las venas.
¿Te apoyaron tus padres cuando
les dijiste que querías será actriz?
-Pues como sabes mi mamá es actriz y
mi papá es músico. Ser actriz es algo que
decidí y al mismo tiempo sucedió y mi
familia siempre me ha apoyado 100%. Soy
muy afortunada por la familia que tengo.
-En la telenovela colombiana
Hagamos lo que diga el corazón, Niche, que
se transmitió en 2016 en Venezuela,
tu personaje Marisol López tocaba
las congas y bailaba salsa a un
nivel profesional. ¿Te ayudó la
herencia de tu papá músico?
-Sin duda sí. Le mandaba videos todo el
tiempo pidiéndole asesoría con la forma de
tocar las congas y demás. Cuando canté
en la novela le mandaba las canciones a
él y a mi mamá también, que es cantante
además de actriz, ambos me ayudaron y
asesoraron. La música es parte de mi vida.
-¿Qué ha cambiado de la
chama sifrina y con rulos
que interpretabas en la
telenovela de RCTV, Amor a
palos, a la Abril de ahora?
-La chama de rulos de Amor a Palos era
Greta, sifrina sin duda pero no boba (risas).
Pues sí he cambiado, he madurado, siempre
he sido muy independiente, muy diferente
a Greta. Me he equivocado, he acertado,
en fin, he crecido y se siente bien
(sonríe y hace una pausa) Y, a pesar de los
cambios, sigo siendo yo, la misma Abril.
-Entonces, ¿sin tetas sí hay paraíso?
-¡Sí! ¡Lo juro que sí!
-¿Qué es lo que más te
gusta de ser actriz?
-No sé explicarlo bien, pero todo.
Actuar me hace feliz como nada en la vida.
Soy yo cuando actúo, soy completa, crear
me llena de alegría y me hace sentir que
todo tiene sentido.
-¿Y qué es lo que más has tenido
que sacrificar para ser actriz?
-He sacrificado la comodidad, lo fácil,
lo simple, el área de confort, ver crecer a
mi sobrina, tener cerca a mi familia, he
tenido que decidir si salir con amigos o
estudiar textos, pero he tenido suerte de
rodearme de familia y amigos que me han
entendido y apoyado. Pensándolo bien no
siento que he sacrificado nada, he decidido
que mi vida es actuar y no hay sacrificio
en ello ni sufrimiento aunque sea difícil
a veces.
-¿Cuál es tu mayor aspiración
en la actuación?
-Actuar toda la vida, llenarme de experiencias
para poder interpretarlas luego,
conmover a la audiencia y que al verme
actuar la gente se inspire a crear y crecer.
18 Revista Sala de Espera • Edición Especial Digital