V 32 N 35
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SOSA ALCARAZ, M.A., CAMPOS CHUC, F.R., Y COBOS DÍAZ, M.P.<br />
embargo, Escobar (1995) menciona que el flujo de desarrollo<br />
sustentable abre la puerta a ‘un nuevo desarrollo verde ', pero<br />
es otro esfuerzo por reducir las aspiraciones y necesidades de<br />
las personas marginadas que viven en el mundo. Por lo tanto,<br />
el objetivo del desarrollo sustentable debe ser no sólo para<br />
cubrir las necesidades básicas de las personas, sino también<br />
una distribución equitativa de la riqueza, lo que implica<br />
mejores oportunidades económicas y los derechos<br />
individuales. Pero, la mayor participación de las<br />
corporaciones globales más que el gobierno por desregular el<br />
mercado capitalista mundial, y el aumento de los sistemas de<br />
producción y consumo hacen que este modelo económico<br />
produzca más crisis económica y ambiental. Aunque, la<br />
WCED (2000) propone acciones críticas para producir con<br />
eficiencia y eficacia, patrones de cambio de consumo, y una<br />
manera diferente de participación de la sociedad, estas<br />
acciones no han sido suficientemente asimiladas y seguidas<br />
por corporaciones globales, industrias y gobiernos, ya que<br />
parece que el énfasis es más económico que en los aspectos<br />
sociales y ambientales. Con 3 mil millones de personas<br />
pobres que viven en el mundo, y 1.29 billones de personas<br />
que viven por debajo de $ 1.25 USD por día en los países en<br />
vías de desarrollo (Banco Mundial, 2012) no creo que este<br />
modelo económico esté funcionando muy bien como una<br />
alternativa para el desarrollo local y sustentable. Lo cual,<br />
lleva a la necesidad de repensar la sustentabilidad desde el<br />
enfoque económico actual.<br />
La justicia social y ambiental es otra perspectiva de la<br />
sustentabilidad (Agyeman, 2005). Como se ha mencionado<br />
anteriormente, uno de los efectos de la introducción del<br />
desarrollo sustentable fue la promoción de las<br />
preocupaciones ambientales, lo que indica consideraciones<br />
sociales también. Con el auge de la industrialización y<br />
modernización, incluida la tecnología en la agricultura,<br />
surgieron graves problemas de contaminación, tales como<br />
pesticidas, contaminación del agua y del aire, y un lugar de<br />
trabajo inseguro. Estos problemas aparecen debido al manejo<br />
inadecuado de los residuos y desechos sólidos y tóxicos, que<br />
afecta principalmente a los grupos sociales desfavorecidos.<br />
Por esta razón, muchas instituciones internacionales y<br />
nacionales, así como entidades públicas y privadas, a través<br />
de las políticas públicas han mantenido un control de<br />
residuos peligrosos, químicos y productos tóxicos. Es la<br />
participación de todas las personas en las leyes ambientales,<br />
reglamentos y políticas para la asignación equitativa de los<br />
beneficios ambientales. Además, la privatización de la tierra<br />
es otro problema de la justicia social y ambiental,<br />
especialmente para los países en desarrollo. Por ejemplo, la<br />
negociación de los acuerdos comerciales internacionales<br />
como el TLCAN en México, está permitido por ley la<br />
privatización y venta de tierras. Esta situación refleja graves<br />
daños de la equidad y los derechos humanos de las personas<br />
que viven en zonas rurales, debido a que estas personas son<br />
a menudo engañadas por la promesa de mejores ingresos,<br />
seguridad laboral o mejores servicios públicos. Obviamente,<br />
estas promesas no llegan a concretarse. Como Esteva y<br />
Prakash (1998) afirman: "las tierras y las formas de gobierno,<br />
la justicia y la autodefensa del pueblo de la India sufren la<br />
interferencia continua de las fuerzas del mercado o del estado<br />
causando graves daños" (p.37). Es así que las injusticias<br />
sociales y ambientales continuarán si el modelo económico<br />
actual sigue con la tendencia de favorecer a los que más<br />
tienen y son más fuertes a nivel global.<br />
Agyeman (2005) propone otra perspectiva de la<br />
sostenibilidad. Esta autora comenta que la sustentabilidad<br />
consiste en cuatro áreas de interés:<br />
- Calidad de vida<br />
- Presente y futuras generaciones<br />
- Justicia y equidad<br />
- Estar dentro de los límites de los ecosistemas<br />
Estas áreas indican que no sólo las oportunidades<br />
económicas y la preocupación ambiental son relevantes, pero<br />
también las necesidades sociales y el bienestar son cruciales<br />
para transformar el objetivo de sustentabilidad en acción real<br />
de la comunidad (Agyeman, 2005; Roseland, 2012). Una de<br />
las acciones fundamentales para la sustentabilidad es la<br />
participación pública a través de la resolución de problemas<br />
locales por parte de todos los grupos de la comunidad,<br />
incluyendo mujeres y jóvenes, que trabajan y toman<br />
decisiones en conjunto, junto con las autoridades locales a<br />
través de un proceso democrático. Por su parte, Robinson<br />
(2008) describe la sustentabilidad como el entendimiento de<br />
tres dimensiones: la dimensión ecológica para llevar la<br />
capacidad biofísica a la sociedad; la dimensión económica<br />
para dar una buena calidad de vida para todas las personas; y<br />
la dimensión social para ofrecer estructuras sociales de<br />
gobierno y de los valores. Esto significa que la<br />
sustentabilidad es entendida desde y con diferentes enfoques<br />
e interpretaciones, pero dando como resultado que la<br />
interrelación sociedad, economía y ecología sea<br />
indispensable para el logro de los principios sustentables en<br />
cualquier actividad económica.<br />
MATERIAL Y MÉTODOS<br />
Para observar la realidad de un caso en particular, el<br />
investigador debe desarrollar habilidades como historiador,<br />
sociólogo, y economista, y tener una buena actitud para<br />
preguntar sobre los nuevos descubrimientos (Hernández et<br />
al., 2010). La metodología de estudio de caso tiene la ventaja<br />
de que los investigadores pueden hacer comparaciones con<br />
otros casos, llevar a cabo una asimilación de las<br />
descripciones (Yin, 1993), y enriquecer nuestra comprensión<br />
de cómo la sustentabilidad es entendida e interpretada. Una<br />
metodología cualitativa es una forma de examinar la<br />
evidencia empírica recogida en el campo. Se tiene la<br />
intención de asegurar un margen estrecho entre los datos y lo<br />
que las personas dicen y hacen. Es observar a la gente en su<br />
vida cotidiana y escuchar lo que tienen en mente; como<br />
resultado, el investigador cualitativo obtiene un<br />
conocimiento directo de la vida social e institucional (Yin,<br />
1993). Según Hernández et al. (2010) Los métodos<br />
cualitativos son inductivos y holísticos, ya que se genera<br />
REVISTA DEL CENTRO DE GRADUADOS E INVESTIGACIÓN. INSTITUTO TECNOLÓGICO MÉRIDA Vol. 31 NÚM. 64 47