01.10.2018 Views

La_esclava_de_mi_familia

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

SELECCIONES <br />

Yo tenía 13 años. Ese fue <strong>mi</strong> primer<br />

intento por <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r a la mujer que<br />

había pasado su vida cuidándome.<br />

Quien me mecía hasta que me dormía<br />

y quien, cuando crecí, me vestía,<br />

me daba <strong>de</strong> comer y me llevaba a la<br />

escuela por las mañanas e iba a buscarme<br />

por las tar<strong>de</strong>s.<br />

Oírla llorar me enfurecía.<br />

Nuestro vergonzoso secreto<br />

Mis padres se esforzaban muchísimo<br />

por ocultar cómo trataban a Lola.<br />

Cuando había invitados la ignoraban o,<br />

si les preguntaban, mentían y cambiaban<br />

<strong>de</strong> tema pronto. En Seattle vivíamos<br />

frente a los Missler, una revoltosa<br />

fa<strong>mi</strong>lia <strong>de</strong> ocho <strong>mi</strong>embros.<br />

—¿Quién es esa señora pequeña<br />

que tienen en la cocina? —preguntó<br />

una vez Big Jim, el patriarca Missler.<br />

—Un fa<strong>mi</strong>liar <strong>de</strong> nuestro país —respondió<br />

<strong>mi</strong> padre con ti<strong>mi</strong><strong>de</strong>z.<br />

Billy Missler, <strong>mi</strong> mejor a<strong>mi</strong>go, no lo<br />

creyó. Pasó suficiente tiempo en nuestra<br />

casa como para captar indicios <strong>de</strong>l<br />

secreto que guardábamos.<br />

—¿Por qué siempre está trabajando?<br />

—cuestionó alguna vez.<br />

—Le gusta trabajar —repuse.<br />

—¿Por qué tus padres le gritan?<br />

—No escucha bien.<br />

Ad<strong>mi</strong>tir la verdad habría implicado<br />

exponer a todos. Pasamos nuestra primera<br />

década en el país aprendiendo<br />

las costumbres <strong>de</strong> esta nueva tierra.<br />

Tener una <strong>esclava</strong> me generaba serias<br />

dudas sobre qué clase <strong>de</strong> personas<br />

éramos y si merecíamos ser aceptados.<br />

Existía otra razón para mantener el<br />

secreto: los per<strong>mi</strong>sos <strong>mi</strong>gratorios <strong>de</strong><br />

Lola habían vencido en 1969. Luego<br />

<strong>de</strong> varias discusiones con sus superiores,<br />

<strong>mi</strong> padre renunció al consulado y<br />

manifestó su intención <strong>de</strong> quedarse<br />

en Estados Unidos. Consiguió la resi<strong>de</strong>ncia<br />

permanente para su fa<strong>mi</strong>lia,<br />

pero Lola no reunía los requisitos exigidos.<br />

Tenía que regresar a su país.<br />

<strong>La</strong> madre <strong>de</strong> Lola, Fer<strong>mi</strong>na, falleció<br />

en 1973; su padre, Hilario, en 1979. En<br />

ambas ocasiones ella quiso ir a su casa<br />

<strong>de</strong>sesperadamente. En ambas oportunida<strong>de</strong>s,<br />

<strong>mi</strong>s padres dijeron: “Lo<br />

sentimos”. No había dinero, ni tiempo.<br />

Mis papás temían también por ellos<br />

<strong>mi</strong>smos; me lo confesaron tiempo<br />

<strong>de</strong>spués. Si las autorida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>scubrían<br />

la presencia <strong>de</strong> Lola, algo que<br />

con certeza habría sucedido si hubiera<br />

intentado <strong>de</strong>jar el país, ellos podrían<br />

haberse metido en problemas, quizá<br />

hasta podrían haber sido <strong>de</strong>portados.<br />

LA RENUNCIA DE MI PADRE dio inicio<br />

a un periodo turbulento. El dinero<br />

escaseó y <strong>mi</strong>s padres empezaron a pelear.<br />

Nos mudamos <strong>de</strong> Seattle a Honolulu;<br />

regresamos a Seattle, luego<br />

fuimos al su<strong>de</strong>ste <strong>de</strong>l Bronx y, por último,<br />

a Umatilla, Oregon, un lugar con<br />

750 habitantes. Mi madre solía laborar<br />

en turnos <strong>de</strong> 24 horas; primero fue<br />

médica interna, <strong>de</strong>spués resi<strong>de</strong>nte.<br />

Mi padre <strong>de</strong>saparecía por días. Hacía<br />

todo tipo <strong>de</strong> trabajos, pero también<br />

(como nos enteraríamos más tar<strong>de</strong>)<br />

era un mujeriego.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!