Web Ritmo Platinum Elvis 30-8-22

texto José Rafael Cerda
foto Pexels
Su último concierto
“Elvis ha abandonado el edificio”
Con esas palabras solían anunciarle a sus miles de espectadores que la más grande estrella del rock and roll
se había retirado de su camerino, solo que esta vez nadie se imaginaba que lo estaba dejando para siempre.
Era domingo en la noche
de un 26 de junio de
1977 y en el estadio
Market Square Arena de
Indianápolis, le esperaban
impacientes alrededor de 18,000 personas.
El reloj marcaba las 10:30 p. m. cuando
por arte de magia hace acto de presencia el
más esperado de la noche. El público estaba
eufórico, en el escenario ya se encontraba
la superestrella, su ídolo, su único Rey
del Rock, que a pesar de los problemas
de salud y emocionales por los que estaba
pasando el artista, le permanecían siendo
leal, honrando al Elvis Presley que, en sus
años de inicios como cantante, enloquecía
a todos por su manera de interpretar sus
canciones, su forma tan peculiar de vestir y
por sus provocativos movimientos al bailar.
El tan esperado momento dio inicio con
la canción See see rinder, una popular
composición de blues estadounidense.
Bajo las luces se encontraba un hombre
realizando una interpretación con una
voz casi perfecta, como en sus comienzos,
poniendo todo su mayor esfuerzo para
ofrecerle a sus fanáticos los acostumbrados
movimientos de cintura que, con el
transcurrir de los días, se le dificultaba
realizar debido a su agotamiento físico y
dificultad para respirar.
Este concierto del 26 de junio en el Market
Square Arena, demolido en el año 2001,
era el último de una agotadora gira de diez
días por todos los Estados Unidos que Elvis
había agotado y que luego de un descanso
en su casa de Granceland, la retomaría en
el mes de agosto, incluso, muchos pensaron
de que fue un abuso innecesario por parte
de sus manejadores y principalmente de su
mánager, el “Coronel” Tom Parker, exponer
de ese modo la salud del popular cantante.
Varios acontecimientos importantes se
vivieron esa noche, que luego con la muerte
de Elvis Presley tomaron trascendencia.
Nadie de los que allí estaban presentes se
imaginaban que, a pesar del deterioro de
su salud, este sería su último concierto y su
último encuentro con sus admiradores. Ese
día presentó por su nombre y se despidió
de cada uno de los miembros de su banda.
Agradeció y le dio públicamente todo el
reconocimiento a muchas personas, tanto
de su vida personal como profesional e
hizo que su padre Vernon Presley subiera
al escenario. Un momento mágico que se
vivió y que hoy, a 45 años de su muerte,
se recuerda con mucha melancolía fue
cuando interpretó su última canción sobre
un escenario y no podía ser otra que Can’t
help falling (No puedo evitar enamorarme),
uno de sus más grandes éxitos musicales
de todos los tiempos. Con esta canción se
despidió para siempre de su público.
Este concierto pasó a la historia y quedó en
la memoria de todos sus seguidores por ser
el último del artista, ya que siete semanas
después su cuerpo fue encontrado sin vida
por su novia de ese momento, Ginger Alden,
en su mansión de Graceland, en Memphis.
Elvis falleció a causa de un infarto agudo de
miocardio a la temprana edad de 42 años, el
16 de agosto de 1977. RP
El Market Square Arena fue testigo de lo que aquella noche allí
se estaba escribiendo, para después formar parte de una de
las páginas más importantes de la música del mundo.
136 RITMOPLATINUM2022