quien pagara el pan?* ? - Aleix Arcarons

Leyendo este trabajo de un tirón,
se diría que existe una guerra
con dos bandos claramente
diferenciados. De un lado, los
teóricos hablan de la tecnología
semántica y los datos abiertos
como un pozo de riqueza en todos
sus sentidos – conocimiento,
desarrollo económico… En el otro
bando, los que han llevado este
ejercicio a la práctica hablan
de aprendizaje y autopromo-
ción. Pero nadie diría que estas
dos visiones son opuestas ni
incompatibles, sino más bien
complementarias. La aportación
de conocimiento en la que
desembocarán los datos relacionados
empieza por la propia
formación de sus intermediarios.
Y podemos considerar la
autopromoción como el primer
florecimiento del tan anhelado
desarrollo económico basado en
la reutilización de la información.
Lo que está claro es que nos
encontramos en un estado todavía
incipiente del open data y,
en consecuencia, más primitivo
aún si hablamos de linked data –
por lo menos en nuestro ámbito
geográfico.
Parece que los esfuerzos de
administraciones, colectivos, empresarios
y emprendedores por
difundir e inculcar los beneficios
de los datos abiertos llenan el
aire de ambición y buenas intenciones,
pero éstas no caen en
manos que las demanden. En un
país en el que la penetración de
lo digital se suele juzgar como
escasa, la evangelización sobre
lo invisible (los datos, las tecnologías
semánticas) encuentra
doble barrera de entrada.
VolVIENDo
a loS
oBJEtIVoS
Si refrescamos los objetivos
expuestos en el capítulo 3,
llegamos a las siguientes consideraciones.
Oportunidades y
ventajas
El planteamiento actual del
programa Dades Obertes puede
ser un buen principio, pero
se queda corto si queremos
hablar de oportunidades reales.
Aunque los sets de datos
abiertos crecen paulatinamente,
su frecuencia de actualización
y su nivel de profundidad se
demuestran insuficientes a la
hora de explotarlos. Ninguna
de las aplicaciones analizadas
podría subsistir únicamente con
los datos abiertos como fuente.
Además, los medios de comunicación
tradicionales tienen línea
directa con las fuentes – Meteo-
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Cat, TransMet – por lo que ellos
sí pueden ofrecer información
actualizada, pero al parecer sus
propios términos legales impiden
la reutilización de la información
que ofrecen. Y por si todo esto
fuera poco, la propia administración
parapeta sus riquísimos
canales de información, limitando
la profundidad de los sets
de datos abiertos publicados o
sometiéndolos a tasas inexplicables.
Las posibles ventajas del
open data, pues, quedan ensombrecidas
por la mala praxis o
praxis insuficiente.
Aún así, las dos aplicaciones
analizadas podrían tener oportunidades
todavía no explotadas.
Beneficios que no serían derivados
directamente de los datos
abiertos, pero que estarían relacionados
con las propuestas de
valor estudiadas. En la línea de
lo expuesto por Luistxo Fernández,
PimPamPum podría ofrecer
a la administración información
útil para evaluar la calidad de
sus prestaciones. Rodalia.info
dispone de un histórico de opiniones
y comentarios de usuarios
del servicio de cercanías
que bien podría explotarse para
monitorizar la percepción del