INSTITUTO SUPERIOR DEL PROFESORADO DE SALTA N° 6005

Prof. Luis Cossio
Historia Social
Contemporánea
2º año
La Etapa de la consolidación burguesa
Después de 1830 quedaron planteados diversos conflictos o cuestiones que continuaron
agudizándose a lo largo del siglo XIX:
la cuestión política,
la cuestión nacional y
la cuestión social.
Estos problemas impusieron una profunda reflexión a los hombres de la época, conmocionados
por las exigencias del nuevo orden económico y social. Sus reflexiones generaron diferentes
concepciones sobre la realidad, apoyadas muchas veces en los postulados de la Revolución
Francesa de 1789.
También el decidido avance de la ciencia y la tecnología contribuyó a alterar la imagen del
universo, de la sociedad y su evolución histórica, y del hombre en sí mismo.
Alguna de las teorías que tratamos en este tema, como el liberalismo y el nacionalismo, dejaron su
impronta en los movimientos de la época, especialmente durante las revoluciones americanas, las
revoluciones del '30 y las del '48, y guiaron el desarrollo político de la segunda mitad del siglo XIX.
Otras, como el socialismo, dejaron sentir su influencia especialmente durante las últimas décadas
del siglo. Pero tanto unas como otras nos ayudan a comprender mejor el convulsionado mundo
que nos toca vivir hoy.
Tras las revoluciones de 1848, cuando se hizo evidente el peligro de una insurrección popular, la
burguesía dejó de ser revolucionaria y descubrió que sus demandas esenciales podían
satisfacerse dentro de un marco legal que garantizara la estabilidad social.
La fórmula de la soberanía popular fue
restringida al establecerse el sufragio
censatario, que desplazó de la
participación a la mayoría de los
individuos no propietarios.
Controlando el poder político en los países
más modernos de Europa occidental,
la burguesía implantó el sistema liberal,
que constituyó la expresión de sus intereses
económicos y políticos.
Se controló la voluntad general a través de un
régimen electoral restringido y se
reconocieron los derechos individuales por
un sistema de garantías que limitaba las
atribuciones del poder ejecutivo, en beneficio
del poder legislativo.
•En los países que tenían monarquías se exigió al rey el acatamiento de una constitución y se estableció la
división de poderes, que hacía al ejecutivo responsable ante el legislativo. De este modo se pusieron en
funcionamiento un conjunto de instituciones y mecanismos que tendieron a la conservación del poder en
manos de los burgueses.
•A partir del avance de la cuestión social, el liberalismo se fue adaptando progresivamente a la nueva
situación, especialmente en los países de mayor desarrollo económico, en los que llegaron a implantarse el
sufragio universal y el sistema democrático.